La fiesta de Cristo Rey fue instaurada por el Papa Pío XI el 11 de diciembre de 1925. El Papa quiso motivar a los católicos a reconocer en público que el mandatario de la Iglesia es Cristo Rey.
Posteriormente se movió la fecha de la celebración dándole un nuevo sentido. Al cerrar el año litúrgico con esta fiesta se quiso resaltar la importancia de Cristo como centro de toda la historia universal. Es el alfa y el omega, el principio y el fin. Cristo reina en las personas con su mensaje de amor, justicia y servicio. El Reino de Cristo es eterno y universal, es decir, para siempre y para todos los hombres.
Con la fiesta de Cristo Rey se concluye el año litúrgico. Esta fiesta tiene un sentido escatólogico pues celebramos a Cristo como Rey de todo el universo. Sabemos que el Reino de Cristo ya ha comenzado, pues se hizo presente en la tierra a partir de su venida al mundo hace casi dos mil años, pero Cristo no reinará definitivamente sobre todos los hombres hasta que vuelva al mundo con toda su gloria al final de los tiempos, en la Parusía.
Si quieres conocer lo que Jesús nos anticipó de ese gran día, puedes leer el Evangelio de Mateo 25,31-46.
En la fiesta de Cristo Rey celebramos que Cristo puede empezar a reinar en nuestros corazones en el momento en que nosotros se lo permitamos, y así el Reino de Dios puede hacerse presente en nuestra vida. De esta forma vamos instaurando desde ahora el Reino de Cristo en nosotros mismos y en nuestros hogares, empresas y ambiente.
Jesús nos habla de las características de su Reino a través de varias parábolas en el capítulo 13 de Mateo:
“es semejante a un grano de mostaza que uno toma y arroja en su huerto y crece y se convierte en un árbol, y las aves del cielo anidan en sus ramas”;
“es semejante al fermento que una mujer toma y echa en tres medidas de harina hasta que fermenta toda”; “es semejante a un tesoro escondido en un campo, que quien lo encuentra lo oculta, y lleno de alegría, va, vende cuanto tiene y compra aquel campo”;
“es semejante a un mercader que busca perlas preciosas, y hallando una de gran precio, va, vende todo cuanto tiene y la compra”.
En ellas, Jesús nos hace ver claramente que vale la pena buscarlo y encontrarlo, que vivir el Reino de Dios vale más que todos los tesoros de la tierra y que su crecimiento será discreto, sin que nadie sepa cómo ni cuándo, pero eficaz.
La Iglesia tiene el encargo de predicar y extender el reinado de Jesucristo entre los hombres. Su predicación y extensión debe ser el centro de nuestro afán vida como miembros de la Iglesia. Se trata de lograr que Jesucristo reine en el corazón de los hombres, en el seno de los hogares, en las sociedades y en los pueblos. Con esto conseguiremos alcanzar un mundo nuevo en el que reine el amor, la paz y la justicia y la salvación eterna de todos los hombres.
Para lograr que Jesús reine en nuestra vida, en primer lugar debemos conocer a Cristo. La lectura y reflexión del Evangelio, la oración personal y los sacramentos son medios para conocerlo y de los que se reciben gracias que van abriendo nuestros corazones a su amor. Se trata de conocer a Cristo de una manera experiencial y no sólo teológica.
Acerquémonos a la Eucaristía, Dios mismo, para recibir de su abundancia. Oremos con profundidad escuchando a Cristo que nos habla.
Al conocer a Cristo empezaremos a amarlo de manera espontánea, por que Él es toda bondad. Y cuando uno está enamorado se le nota.
El tercer paso es imitar a Jesucristo. El amor nos llevará casi sin darnos cuenta a pensar como Cristo, querer como Cristo y a sentir como Cristo, viviendo una vida de verdadera caridad y autenticidad cristiana. Cuando imitamos a Cristo conociéndolo y amándolo, entonces podemos experimentar que el Reino de Cristo ha comenzado para nosotros.
Por último, vendrá el compromiso apostólico que consiste en llevar nuestro amor a la acción de extender el Reino de Cristo a todas las almas mediante obras concretas de apostolado. No nos podremos detener. Nuestro amor comenzará a desbordarse.
Dedicar nuestra vida a la extensión del Reino de Cristo en la tierra es lo mejor que podemos hacer, pues Cristo nos premiará con una alegría y una paz profundas e imperturbables en todas las circunstancias de la vida.
A lo largo de la historia hay innumerables testimonios de cristianos que han dado la vida por Cristo como el Rey de sus vidas. Un ejemplo son los mártires de la guerra cristera en México en los años 20’s, quienes por defender su fe, fueron perseguidos y todos ellos murieron gritando “¡Viva Cristo Rey!”.
La fiesta de Cristo Rey, al finalizar el año litúrgico es una oportunidad de imitar a estos mártires promulgando públicamente que Cristo es el Rey de nuestras vidas, el Rey de reyes, el Principio y el Fin de todo el Universo.
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Viva Cristo Mi Rey!
Pío XI estableció que la festividad del Reinado Social de Cristo se celebrase en Octubre, el último domingo de ese mes. En aquella época, el año litúrgico se cerraba con otra festividad: la nueva venida de Cristo y el Juicio Final, que suponía el triunfo glorioso de Cristo, de la Iglesia, de la Fe. Tras «El Concilio», todo se desvirtuó: la festividad de Cristo Rey no solo se trasladó de fecha (suprimiendo la consideración a la nueva venida de Cristo y el Juicio Final), sino que se dio a entender —desvirtuando a Pío XI— que el Reinado Social de Cristo solo llegará al fin de los tiempo, cuando en realidad el Reinado Social de Cristo ya está operando ahora mismo. ¡Todo al revés!
Yo perdona que os diga, pero tengo que discrepar como siempre. El artículo parece muy ortodoxo pero no lo es. Tiene claras influencias neomodernistas. Eso de que a Jesucristo se lo conoce por la experiencia y no sólo por la teología es modernismo puro. Los únicos que experimentaron a Jesucristo fueron los apóstoles y los discípulos. El modernismo se ha colado en la Iglesia de esta manera, pq para ellos la fe no es el asentimiento de la inteligencia a la verdad revelada sino que la fe es una experiencia y una vivencia. Con lo cual como todos los humanos tienen experiencia de fe, todas las religiones son verdaderas y reveladas y por eso hay q intercambiar experiencias con el ecumenismo falso para enriquecerse todos mutuamente. Como q la verdadera se enriquece con religiones falsas. Los liberales se equivocan, Dios no hizo al hombre libre sino que lo hizo inteligente para que razonara cual era la religion verdadera, y la verdad es entonces cuando te hace libre.
Los modernistas, fomentando la libertad sin verdad y la experiencia vivencial, tienen un falso concepto de Cristo Rey. Para esta gente Cristo Rey sólo tiene que reinar al final de los tiempos y por eso cambiaron la fecha al final del año litúrgico. Si Cristo es Rey del Universo y de todas las cosas, tiene que reinar en las sociedades en las leyes, en los Estados, en la educación, y en todo porque es Rey de todo al margen de q tengas la verdadera fe o no la tengas, no se te obliga a tenerla. Porque los principios verdaderos del decálogo puestos por Dios no perjudican a nadie. Pero no, los modernistas restringen a Cristo a reinar en las almas individuales, en lo privado pero no en lo público, porque atentas contra la falsa libertad religiosa de los demas, contra la libertad del error. Se creen que les estás diciendo q hay que imponer la fe católica, y esto lo dicen pq no se enteran. El error se tolera pero no se le da la libertad.
A Cristo lo destronaton porque no lo creen que sea Rey de todas las cosas. De las leyes de los Estados no puede ser Rey, el Vaticano II se lo prohíbe, los principios de los Estados son los que vaya diciendo la mayoría como si no existiera el pecado original y la mayoría no se inclinara al error. Es Cristo Rey del universo pero con excepciones, con lo cual, no es Rey del universo. Es de lo que ellos digan. No puedes obligar a la gente a no abortar, atentas contra su libertad de conciencia, no puedes obligar a la gente a prescindir de su libertad de fornicación, sino que el Estado al final legisla para fomentar la libertad de fornicacion. Han conseguido un Estado separado y contra Dios y ahora se quejan. Un Estado agnóstico sin principios legislará contra los principios de Dios, y la consecuencia de eso es que en Bélgica ya van por el 9 por ciento de católicos. Pq la apostasía del Estado es la apostasía de la sociedad.
El vaticano II establece el error de que todo el mundo por el hecho de ser persona, ya tiene dignidad humana absoluta pq Cristo por la encarnación se ha unido a todo hombre y ha elevado la naturaleza humana. Con lo cual la Gracia de los sacramentos es prescindible, no sirve para nada. Pelagianismo.¿ para qué la Gracia si Jesucristo ya se ha unido a todo hombre?. Y como la libertad de elegir el error la fundamenta el vaticano II en la dignidad humana, no se puede coaccionar a nadie para que deje el error, pq vas contra su libertad, como si toda coaccion fuese violenta. El resultado ha sido que las familias no han trasmitido la fe para no coaccionar la libertad de los hijos, no los pueden coaccionar. El unico límite a la libertad es el orden público, con lo cual mientras la pederastia no altere el orden público por la prensa, no hay que hacer nada. Y en esas estamos. El papa no condena ya el error pq no puede coaccionar la libertad.¿ cuando se darán cuenta?
Es gracioso, la Iglesia diciendo no abortes, es asesinato. Y la abortera responde: y a mi que mi importa, no puedes coaccionar mi dignidad humana que es libre, tu vaticano II me ampara, es mi libertad de conciencia.
Pues claro.
El nuevo reinado social de cristo modernista consiste en hacer agradable la vida en el mundo natural, pero no que los principios de los Estados sean católicos para q la vida natural sea conforme a Dios.
Por eso, como los modernistas tienen esta forma de pensar, fomentando la libertad sin verdad y la experiencia de un falso misticismo vivencial, tienen un falso concepto de Cristo Rey. Para esta gente Cristo Rey sólo tiene que reinar al final de los tiempos y por eso cambiaron la fecha al final del año litúrgico. Si Cristo es Rey del Universo y de todas las cosas, tiene que reinar en las sociedades en las leyes, en los Estados, en la educación, y en todo porque es Rey de todo al margen de q tengas la verdadera fe o no la tengas, no se te obliga a tenerla. Porque los principios verdaderos del decálogo puestos por Dios no perjudican a nadie. Pero no, los modernistas restringen a Cristo a reinar en las almas individuales, en lo privado pero no en lo público, porque atentas contra la falsa libertad religiosa de los demas, contra la libertad del error. Se creen que les estás diciendo q hay que imponer la fe católica, y esto lo dicen pq no se enteran. El error se tolera pero no es libre.
«el Concilio….. deja íntegra la doctrina tradicional católica acerca del deber moral de los hombres y de las sociedades para con la verdadera religión y la única Iglesia de Cristo». DH 1.
Que en la práctica esa doctrina haya sido abandonada es otra cuestión.
El vaticano II afirma una cosa y en renglón siguiente afirma lo contrario
En un sitio dice una cosa y en otro lo contrario. Menudo descubrimiento
!VIVA CRISTO REY!, y Santa María de Guadalupe
Menudo descubrimiento a estas alturas. El vaticano II afirma una cosa en un sitio y en otro sitio afirma lo contrario. Inspiracion inerrante.
Con el final del » Milenio » cristiano ,después de la Primera Guerra Mundial,empezó el Segundo Cumplimiento de la Historia de La Iglesia y de la Humanidad ; no importa que para nosotros no haya llegado el Reino real de Jesucristo ,porque estamos viviendo la prueba final ; y
cuando la hayamos superado entonces será el Reino de Dios para toda la Humanidad.
Pero Jesucristo no está atado a nuestras decisiones finales ; Él ya triunfó en la cruz sobre el Diablo y sobre todos los poderes malignos del último régimen pagano y de la Bestia.
Para que sirva
de estímulo para nosotros,Dios ha querido entronizar a Cristo como Rey del Universo y de toda la Tierra habitada ; es como si nos estimulara diciendo : » No temáis al Diablo ni lo que podáis sufrir o padecer,porque el triunfo de Cristo como Rey de toda la Humanidad ,ya ha llegado.
El Segundo Cumplimiento está garantizado con la entronización de Jesucristo,como Rey reinante por anticipado.
VIVA CRISTO ,REY DE TODOS !!!