Los asaltantes se llevaron el Santísimo y robaron la corona de la Virgen en la Parroquia de Nuestra Señora de Belén de este municipio alicantino. En la madrugada del viernes al sábado pasados, un grupo de asaltantes forzaron la entrada de la Parroquia de Nuestra Señora de Belén, en el municipio alicantino de Bigastro, y provocaron múltiples destrozos en el interior del templo. Cuando llegó a la iglesia el párroco en la mañana del sábado encontró el sagrario destrozado arrojado en el suelo y el Santísimo había desaparecido. «Entraron y profanaron el sagrario, se llevaron el Santísimo», relata el párroco de esta iglesia asaltada, que aclara que aunque se ha hablado de robo, se trata de un ataque religioso: «También robaron la corona de la Virgen, pero sobre todo se trata de una profanación». La corona robada pertenecía a la Virgen del Belén, patrona de Bigastro, que este domingo ha salido en procesión con motivo del tercer centenario de la imagen. Este sacerdote tuvo que contemplar desolado al llegar a la parroquia cómo algunas de las Sagradas Formas habían sido arrojadas al suelo y pisoteadas, y muchas de ellas habían desaparecido. Los asaltantes destrozaron, asimismo, parte del templo, llegando a arrancar el sagrario, y robaron la corona de la Virgen de Belén, patrona del municipio, así como tres cálices. A pesar de los robos, el párroco sostiene que se trata principalmente de una profanación y de un ataque contra la religión ya que el dinero en monedas que había en el templo no fue sustraído. Es más, en opinión de los feligreses podría tratarse de un ataque satánico, ya que todas las cruces del templo fueron puestas del revés durante el asalto. En la tarde del sábado, los vecinos participaron en un acto de desagravio en la parroquia al que acudió el obispo para orar en reparación por el ataque. «Nosotros somos una parroquia muy eucarística», asegura el párroco, «todos los días tenemos actos eucarísticos y celebramos el Corpus con mucha devoción». Las autoridades policiales aún desconocen la identidad de los asaltantes, aunque desde la Guardia Civil de Jacarilla, responsable de la investigación, aseguran que se tienen indicios que pueden llevar a los culpables de este ataque de odio religioso.
