Se elimina la doble sentencia en los procesos de nulidad con acuerdo entre las partes y se busca que en un futuro sean procesos totalmente gratuitos. A menos de un mes de que dé comienzo el próximo Sínodo de la Familia, el Papa Francisco ha decidido presentar hoy en el Vaticano dos documentos motu proprio: Mitis Iudex Dominus Iesus e Mitis et misericors Iesus. Estos documentos papales suponen una reforma del Código de Derecho Canónico, tanto de la Iglesia latina como de las Iglesias orientales, en lo que a procesos de nulidad matrimonial se refiere. Respetando el principio de indisolubilidad del matrimonio, se simplificarán y agilizarán los procesos de verificación de nulidad matrimonial. Esta simplificación consiste en eliminar el requisito de la doble sentencia conforme para las declaraciones de nulidad matrimonial en que hay acuerdo de ambas partes y sólo será necesaria una sentencia para declarar la nulidad. De tal manera que «la sentencia que la primera vez ha declarado la nulidad del matrimonio, de acuerdo con los términos establecidos en los cánones 1630-1633, tiene plena eficacia en sí misma», tal y como se afirma en el documento Mitis Iudex Dominus Iesus. Los procesos de nulidad matrimonial, con la reforma introducida por el Papa Francisco, serán ahora más breves y la sentencia única estará firmada por «un juez único bajo la responsabilidad del obispo». Especialmente, en aquellos casos en los que la nulidad del matrimonio haya sido demostrada con testimonios y documentos de forma evidente. Otro de los cambios significativos es la composición del tribunal en estos procesos. Con la nueva reforma, tendrá que estar formado por tres miembros sin la obligación de que pertenezcan en su totalidad al clero, y el miembro del clero podrá tener dos asesores. Por otra parte, el Santo Padre ha querido resaltar la indisolubilidad del matrimonio, para que no se creen confusiones respecto a las razones que han impulsado esta reforma. También se ha señalado durante la rueda de prensa que la Iglesia no anula los matrimonios, sino que los declara nulos, es decir, declara que el matrimonio nunca lo fue como tal. En esta reforma también, según ha explicado en rueda de prensa Mons Pío Vito Pinto, decano de la Rota Romana, se abaratarán los procesos de nulidad, buscando en último término la gratuidad del proceso. Es deseo del Santo Padre que en un futuro los procesos de nulidad matrimonial sean completamente gratuitos, «porque la Iglesia, mostrándose ante los fieles madre generosa, en una materia tan estrechamente ligada a la salvación de las almas, manifieste el amor gratuito de Cristo». Serán las Conferencias Episcopales las encargadas de garantizar la «justa y digna retribución de los operadores de los tribunales». El papel de los obispos en estos procesos adquiere mayor relevancia, ya que a partir de ahora «el mismo obispo es juez» y no delegará «completamente» la responsabilidad «a las oficinas de la curia la función judiciaria en materia matrimonial» El pasado mes de noviembre, el Papa subrayó públicamente la necesidad «de agilizar los procesos por un motivo de justicia con la gente que espera. Mucha gente espera años por la sentencia». El Papa constituyó en agosto del año pasado una comisión para esta reforma de los procesos de nulidad matrimonial, y las conclusiones se han querido publicar hoy 8 de septiembre, en fiesta mariana.
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ROBAR NO ES ROBAR (ES EL BUEN COMUNISMO), EL ADULTERIO NO ES ADULTERIO, ES AMOR, MENTIR ES DECIR LA VERDAD, MATAR ES HACER JUSTICIA, PROFANAR EL TEMPLO DE DIOS ES EL PAN DE CADA DÍA…EL MAL YA ESTÁ ENTRE NOSOTROS…
Esto sí me parece una reforma honesta. Sin tener que rebajar el concepto del matrimonio, facilitando el saber si el matrimonio es nulo o no, y sin quitar garantías de que solo se dará la nulidad si el matrimonio es nulo de verdad
Mira Luis, triste eres tú, diles a tus hijos que son fruto de una nulidad de algo que no existió que no sabes ni como pasó, porque ¿cuáles son las causas de nulidad?. Porque que sepa yo nadie va al altar esposado o drogado. Claro si ustedes le llaman nulidad a que después de 6 años de noviazgo hoy en día con cama incluida, 10 años de matrimonio y tres hijos, dicen que el día que se casaron que estaban en babia, eso no cuela. Más bien digan que despues de lo previamente dicho, que se han cansado de su cónyuge, que ronca que le huele el aliento y que quieren otra cosa, o que se ha vuelto insoportable que no lo dudo, que no lo soportan pero eso será un divorcio pero no nulidad, la nulidad no existe en nada, porque todos los actos de nuestra vida han dejado una huella. ·Eso no es no tener misericordia, es sentido común, digan ¡me equivoqué al casarme! o en aquellos momentos no tuve otros pretendientes y otras posibilidades, o pensaba que esa persona iba a cambiar y no cambió sino que empeoró, pero por favor no digan nulo. A sus hijos que les van a decir, sois hijos de algo que no ha sucedido que no ha pasado, mejor es que les digan me casé salió mal, lo he intentado pero no he podido, sus hijos entenderán mejor esto, que no una nulidad.
YO NO PERTENEZCO A SATANÁS, YO NO MIENTO, NI CALUMNIO, NI DIFAMO, NI TENGO MALDAD EN MI CORAZÓN NI EN MIS PALABRAS!
Dejando a salvo la buena voluntad e intenciones de los promotores de esta reforma, quiero hacer dos comentarios:
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Uno.- Ningún proceso de nulidad es «gratuito» porque no hay nada gratuito, lo único que puede cambiarse es «quién paga los gastos». Se pretende que los cónyuges no paguen los gastos (¿tampoco los de sus respectivos abogados?), pero el coste del procedimiento existe, por lo tanto «otro» pagará la gratuidad. ¿Tal vez la diócesis?, entonces los pagarán todos los fieles de la diócesis con sus limosnas. ¿Vendrá alguien a decirnos luego que ese dinero se debería dar a los pobres?.
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Dos.- Se echa en falta alguna preocupación por que se produzcan «tantos» casos de nulidad y no se intente poner remedio en el origen del mal. El procedimiento para preparar y celebrar el matrimonio tendría que ser suficientemente serio y cuidadoso para que no se produjeran matrimonios nulos en su origen, es decir matrimonios «mal» celebrados, que no deberían haberse celebrado nunca; o al menos que su número quedara reducido a casos verdaderamente excepcionales.
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Ignoro el porcentaje de matrimonios declarados nulos, pero tengo la seguridad de que será muy superior al de ordenaciones sacerdotales nulas, o bautismos nulos, o confirmaciones nulas; y esto da que pensar.
Paralelamente, si lo comparamos con el Derecho Civil de los estados, el porcentaje de nulidades canónicas sobre el total de matrimonios canónicos es muy pero que muy superior al porcentaje de matrimonios civiles nulos sobre el total de matrimonios civiles.
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El problema es que en la práctica, los procesos canónicos de nulidad matrimonial se han convertido en un sucedáneo del divorcio.
Me parece bien la decisión tomada por aquello de que es bueno agilizar los trámites burocráticos; ahora hay que esperar para ver cómo se aplica todo esto en la vida real. Y respecto a lo que menciona para que los trámites sean gratuitos… no sé que pensar. He viajo mucho por este planeta llamado Tierra, y en ninguna parte pude conseguir nada que fuera gratuito.
Se parece bastante a las «American Procedural Norms» que estuvieron en vigor en los EE.UU. entre 1970 y 1983. Las sentencias de nulidad pasaron de 600 a 39.000 al año, hasta que Juan Pablo II paró el coladero. Ya tenemos «divorcio católico» por acuerdo mutuo.
Los progretas dirán ahora que el Vaticano da luz verde al amor libre.
Me parece excelente está clausula buena decisión por parte del papa francisco… Ramiro Helmeyer Quevedo!!!!
Adios indisolubilidad del matrimonio. El divorcio express ha entrado en la iglesia. Imposible mantener el rigor de las sentencias si se elimina la segunda instancia!. Lo que se deberia hacer es sincerar las cosas, y celebrar el matrimonio solamente entre contrayentes que, previa y expresamente a la celebración, manifiesten por escrito su conformidad con las normas de la iglesia en referencia al matrimonio sacramental. Y despues de eso no hay excusas!!! Seria mejor que andar repartiendo nulidades baratas a diestra y siniestra.
Ahora queda bien claro el motivo de la «misericordiación» del cardenal Burke. Si no se puede pasar por la via de Kasper por la oposición que ha encontrado, se pasa abaratando las nulidades. La iglesia católica convertida en una caricatura de los ortodoxos.
No solo el Cardenal Burke, sino tambien el decano del Tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica en España, Carlos M. Morán Bustos, advirtió el año pasado de las consecuencias profundas y fatales de la «(..) supresión de la doble conforme, limitación del derecho de apelar, incluso sustitución de la colegialidad en primera instancia. Si se tocan algunas de estas instituciones se verá afectado directa y esencialmente el matrimonio, de hecho, existe algún antecedente histórico no muy lejano en el tiempo». (http://www.periodistadigital.com/religion/opinion/2014/11/22/algunas-cuestiones-relacionadas-con-los-procesos-de-nulidad-religion-iglesia-opinion.shtml)
Y Carlos M. Morán Bustos aquí se refiere precisamente a las llamadas «Normas Americanas», aprobadas en 1970 por Pablo VI , ad experimentum para los EE.UU. Estas generaron en brevísimo tiempo una dinámica tan desastrosa, «que Juan Pablo II, citando una carta del Cardenal Prefecto del Consejo para los Asuntos Públicos en la Iglesia al Presidente de la Conferencia Episcopal de los EE.UU (20-6-1973), dijo que las Normas USA consintieron «una dinámica la cual, si se convierte en praxis habitual, abre el camino para tolerar en la Iglesia el divorcio, oculto bajo otro nombre (Juan Pablo II, Discurso a la Rota romana de 1980, n. 6).»
En 1968 hubo en los EE.UU 450 declaraciones de nulidad, 5.403 a finales de 1970, y 48.630 en 1981. Carlos M. Morán Bustos concluye en 2014, que «Así fue entonces, y no es previsible que sea distinto ahora». Y esta dinámica explosiva parece ser la deseada para la Iglesia Universal por el Pontífice reinante, quizá porque ya desconfía de la victoria de las propuestas kasperianas, favorecidas y propulsadas fuertemente por él, en el Sínodo por venir.
Para poder entender mejor, que las normas emitidas hoy, especialmente la abolición de la exigencia de la «doble conforme», no son simplemente el cambio de un pequeño detalle procesal, sino un completo cambio de rumbo en la Iglesia, con profundidades teológicas, seguiré citando integramente al Tribunal de la Rota de la Nunciatura Apostólica en España:
«Por lo que respecta a la supresión de la obligatoriedad de la doble conforme, quizás convenga tener en cuenta lo siguiente.
Establecida por Benedicto XIV el 3 de noviembre de 1741 -en la Dei Miseratione-, con la doble conforme se funda, no en razones de naturaleza meramente disciplinar o exclusivamente práctico-formalista o de mera desconfianza respecto de las instituciones judiciales en la Iglesia, sino que creo que se puede hablar de un verdadero fundamento teológico de la misma, así como de una relación directa del principio de la doble sentencia conforme con otros tres principios esenciales del proceso canónico de nulidad, en concreto con el favor veritatis, el favor matrimonii y la certeza moral.
En efecto, aunque el principio de la doble conforme en las causas de nulidad matrimoniales proceda del derecho positivo, lo cierto es que tiene como causa final alcanzar, a través del mecanismo de la certeza moral -que no excluye lo contrario como posible, pero sí como probable-, aquella verdad objetiva que llamamos vínculo conyugal, un vínculo que indisoluble. Históricamente, la introducción de la doble conforme responde a una exigencia de la indisolubilidad del matrimonio, es decir, a una exigencia teológica, no a un mero carácter formal o disciplinar. Esta defensa de la indisolubilidad del matrimonio, especialmente en una cultura divorcista como la que vivimos, es un verdadero desafío para la Iglesia, en el que se ve involucrada en todas sus dimensiones y con todas sus «herramientas» y con todas sus instituciones jurídicas, también con la doble conforme.»
En otras palabras, la Iglesia Católica hoy, el 8 de setiembre del 2015, claudicó ante el desafío de «una cultura divorcista como la que vivimos» y mas bien le abrió las puertas de la Iglesia de par en par a esta cultura divorcista. En el papel se seguirá hablando de «nulidad matrimonial», pero en la práctica se ha introducido hoy el divorcio católico para todos, pagado por todos. Ya no se trata «solamente» de la «Comunión para los dicorciados», propugnada con muchos sofismas por el Cardenal Kasper y sus aliados, sino de la completa legalización práctica de la poligamia serial, a través de un simple acto administrativo del Romano Pontífice. Lo que separa este acto de legislación de la herejía abierta y confiesa es tan solamente la ficción de seguir llamando «nulidad matrimonial» a algo que, a partir de hoy, en la gran mayoría de los casos efectivamente va a ser un simple y llano divorcio de un matrimonio sacramental válido, declarado engañosamente inválido por orden de una política eclesial populista.
Me parece que, ya que quiere nuestro Santo Padre, que los juicios de nulidad sean más rápidos. Donde se puede solicitar que si es posible también exista una comisión canónica, para conceder a los novioz el poder casarse, pues muchos no conocen ni siquiera que es el sacramento, etc., bueno ni siquiera cual es la fe de la Iglesia y se casan. No será mejor el enfocarse en el antes y no en el después. Yo con mi novia que ahora es mi esposa, fuimos a un encuentro de novios para casarnos el sacramento, y bueno nos quedamos sorprendidos de tantas parejas, que primero no tenían ni idea del catolisismo, peor lo que significa el sacramento matrimonial. Porque no puede existir una comisión también rapidita, para examinar a los novios, si pueden cumplir con los requerimientos del sacramento los novios? No entendería si se les preguntara a los novios que entienden por indisolibilidad matrimonial, métodos anticonceptivos naturales, hijos, etc., y responden que no saben, que no creen en la indisolulilidad, y castidad matrimoinial, etc. Como es posible que se les permita casarse. Ahora si estan concientes de sacramento y se casan, pues ya no debería existir la nulidad pues tiene plena conciencia. La nulidad solo entraría en casos determinados, como matrimonios mixtos, etc, que no se realizaron correctamente, etc.
Hay en todo el mundo cerca de 5.000 obispos y según algunos comentaristas están incapacitados de ejercer el oficio de juzgar la validez de sacramento del matrimonio impartido entre los fieles bajo su gobierno.
Han hecho un juicio contra este Papa en su corazón y salvo una gracia especial morirán con ese pecado enroscado. No es que sea un pecado menos grave que el pecado de adulterio, es más grave aún porque proclaman abiertamente y ante todo el mundo que son capaces de gobernar la Iglesia mejor que el que tiene ese oficio con asistencia del Espíritu Santo.
Y a los que son argentinos mejor lean las revelaciones de la Virgen en San Nicolás sobre Francisco en el día de su elección y que están publicadas con permiso del obispo.
Y a los que no lo son les recomiendo que lean los mensajes a Vassula Rydén sobre este Papa. Tal vez reciban la gracia extraordinaria que las oraciones de otros les han ganado y se den cuenta de la oscuridad en que viven y quien los inspira.
Me han gustado muchos de los comentarios de este artículo sobre la agilización de los procesos de nulidad matrimonial en la Iglesia Católica propiciada por Bergoglio. Son una buena señal de que los seres humanos debemos usar un arma poderosa que Dios nos ha dado, inteligencia y sentido común. Pero quisiera resumir lo más importante y dicho sin concesiones a la galería, por la extraordinaria gravedad de la situación en que se halla la humanidad. Esta reforma no es mas la introducción del “divorcio express” por la propia Iglesia y para mas INRI con el dinero de los cristianos, pues tales procesos no serán gratuitos. Esta es una de las artimañas más diabólicas de Bergoglio, si no la que más, y que intenta justificar como bienhechora y desde una supuesta ortodoxia. Esta medida es de una perfidia que procede del mismísimo infierno y que me hace ver mas claro que nunca la inmensa maldad de su autor. Parece ser que Bergoglio quiere apresurar estas medidas ante las eventualidades del próximo Sínodo.
8-VIII-2015
Me han gustado muchos de los comentarios de este artículo sobre la agilización de los procesos de nulidad matrimonial en la Iglesia Católica propiciada por Bergoglio. Son una buena señal de que los seres humanos debemos usar un arma poderosa que Dios nos ha dado, inteligencia y sentido común. Pero quisiera resumir lo más importante y dicho sin concesiones a la galería, por la extraordinaria gravedad de la situación en que se halla la humanidad. Esta reforma no es mas que la introducción del “divorcio express” por la propia Iglesia y para mas INRI con el dinero de los cristianos, pues tales procesos no serán gratuitos. Esta es una de las artimañas más diabólicas de Bergoglio, si no la que más, y que intenta justificar como bienhechora y desde una supuesta ortodoxia. Esta medida es de una perfidia que procede del mismísimo infierno y que me hace ver mas claro que nunca la inmensa maldad de su autor. Parece ser que Bergoglio quiere apresurar estas medidas ante las eventualidades del próximo Sínodo.
8-VIII-2015
LO QUE DIOS HA UNIDO LA ROTA LO DECLARA NULO
Es evidente que hoy los tribunales eclesiásticos CONCEDEN la nulidad igual que los tribunales civiles conceden el divorcio. Y que en la iglesia actual existe el divorcio de facto y también, porque no, de jure es algo que todos los católicos sabemos. Por ejemplo, es normal matrimonios con más de 10 años de antigüedad, con hijos de por medio un tribunal eclesiástico decrete la nulidad de ese matrimonio. Y no gente anónima, sino miembros del famoseo en cuyos casos al adulterio se une el escándalo público. Y un caso paradigmático es la nulidad del viejo camilo José cela que para poder casarse eclesialmente con su nueva novia consiguió la nulidad de un matrimonio de 40 años con hijos de por medio. Pero evidentemente no es un caso único:
http://www.vanitatis.elconfidencial.com/multimedia/album/noticias/2014-03-29/10-matrimonios-rotos-por-la-rota_108993/
En fin, que lo que Dios a unido, la rota lo declara nulo y ya está. Por eso, este nuevo escándalo de Bergoglio en realidad no añade nada nuevo, sino simplemente lo simbólico de una nueva burla al sacramento. Todo sea por un Nuevo Orden.
¿Y qué hacemos con los hijos del matrimonio declarado inválido? ¿Son frutos de fornicación? ¿En qué situación quedan con respecto a los hijos de la segunda unión?
Lo dicho, el papa deja con esto zanjada la cuestión de la comunión a los divorciados vueltos a casar, que sabe que no podrá prosperar en el Sínodo. Se adelanta y dice que quienes deseen comulgar que pidan la declaración de nulidad del primer matrimonio. Seguro que la obtienen.
Si alguien especialista puede aclarar que es esto de divorcios que «se han vuelto nulos por motivos graves» o motivos para presentar una demanda de nulidad tales como «la falta de fe que lleva a simular el consenso» en la boda, «la brevedad de la convivencia conyugal», «el aborto para impedir la procreación», «una relación extraconyugal en la época de la boda o inmediatamente sucesiva», «ocultamiento de la esterilidad», de «una enfermedad contagiosa» o de «hijos nacidos de una relación anterior», «un embarazo imprevisto» o «la violencia física para arrancar el consenso», la «falta de uso de razón», etc. El «etc» es sintomático. Pueden estar tranquilos Kasper y Cía, les han dado vía libre, salga lo que salga del futuro sínodo.
como católica pido que renuncie o renuncien al Papa Francisco, por ir contra la doctrina y además tratar de vernos la cara. El «humildito y misericordioso» es un zorro.
Deseamos agradecer a Infovaticana esta crónica de hoy sobre los documentos del Papa Francisco publicados hoy en Roma.
Sabemos que el Papa va directamente a la fuente: al Evangelio en estado puro, tal como lo recibieron los Apóstoles. Y cargado con esa fuerza que viene de lo alto, es cómo lleva adelante el sagrado magisterio para guiar a la Iglesia Católica, que tiene especialmente encomendado desde su elección y aceptación como sucesor de San Pedro.
Por ello confío y espero que todas estas acciones suyas sirvan para revitalizar con una nueva evangelización a la sociedad de nuestro tiempo, tremendamente necesitada de la Salvación que solo puede recibir de Cristo y que viene a curar a los enfermos y no a los sanos.
Recomiendo fe y esperanza y mucha oración para que no le falte al Papa Francisco la fuerza y la sabiduría divina del Espíruitu Santo.
Saludos cordiales.
Parece que con todo esto, se hace más vulnerable la familia, facilitando la ruptura del vínculo del matrimonio, aunque sea teóricamente gratis , pero se supone que pagado con el dinero que se obtiene por ejemplo alquilando la capilla sixtina para los festejos de los multimillonarios o del que iría destinado a los mas necesitados. Sencillamente alucinante y preocupante
Lo mejor de todo es que de un plumazo ha reducido a la mitad los ingresos de los abogados especialistas en nulidades eclesiásticas que son un verdadero cáncer para las parejas que se ven inmersos en ellos.
¡Me encanta este Papa!
Para cuando el divorcio por internet a traves de la plataforma Vaticano 3.0?
Si de lo que se trata es de agilizar los tramites sería lo mas eficiente…
A “palo dado, ni Dios lo quita” dice el refrán.
Después del anuncio de “NULIDAD FASTRACK”, y dadas las condiciones deterioradas de la sociedad actual, se puede anticipar un aumento monumental de las solicitudes de “nulidad express”.
La cantidad de solicitudes vendrá de las parejas casadas que desean separarse por cualquier causa, pues ahora ya es más fácil y de los divorciados en adulterio que nulificarán su primer matrimonio para poder volverse a casar de blanco (no necesariamente para poder volver a recibir la Eucaristía).
La acción que habrá que tomar de inmediato para evitar la eventual “protestantización del catolicismo” es educar con esmero y hasta el cansancio a los jóvenes casaderos para que se casen como se casaban nuestros padres; “ante Dios y en serio; sacramentalmente”.
Finalmente habrá que recordar que la última palabra viene de Dios, de quien nadie se burla.
Carcahunter, los procesos de declaración de nulidad matrimonial existen en la Iglesia para el esclarecimiento de la verdad y la dignificación del matrimonio sacramental. El sr. Bergoglio, en cambio, los quiere utilizar para banalizar el sacramento, y que el alejado de la fe se confirme en sus prejuicios.
Y no se confunda, no hay mal que por bien no venga. Las ocurrencias del sr. Bergoglio sí que están teniendo respuesta firme y sólida por parte de muchos cardenales, obispos, sacerdotes y laicos
Carcahunter, mál asunto si a Vd. no lo queda más argumento que el insulto y la amenaza hacia el católico que se toma en serio su fe.
Y le recuerdo que el esclarecimiento de la verdad sí que corresponde a la Iglesia, como Esposa de Cristo.
Y algo, que probablemente aún le escandalice más aceptar. Mientras el pontificado de Francisco tiene fecha de caducidad, la Santa Iglesia Católica que tanto detesta seguirá hasta el fin de los tiempos.
Y por favor, no utilice a S.S.Benedicto XVI para sus zarandajas ideológicas. Un poco de respeto a la verdad y a las personas.