Cada cierto tiempo corren por las redes textos de pobre calidad literaria falsamente atribuidos al Papa Francisco. ¿A qué se debe este fenómeno?
Seguro que ha recibido recientemente un «whatsapp» que comienza con la frase «Os comparto esto del Papa Francisco», y esque para muchos, es una manera infalible de lograr que sus pobres aportaciones lleguen a algún sitio.
El falso texto de la navidad del Papa Francisco
Un ejemplo que ha vuelto a resurgir ante la proximidad del adviento es el siguiente:
«La Navidad suele ser una fiesta ruidosa: nos vendria bien un poco de silencio, para oir la voz del Amor.» Navidad eres tú, cuando decides nacer de nuevo cada día y dejar entrar a Dios en tu alma. El pino de Navidad eres tú, cuando resistes vigoroso a los vientos y dificultades de la vida. Los adornos de Navidad eres tú, cuando tus virtudes son colores que adornan tu vida. La campana de Navidad eres tú, cuando llamas, congregas y buscas unir. Eres también luz de Navidad, cuando iluminas con tu vida el camino de los demás con la bondad, la paciencia, alegría y la generosidad. Los ángeles de Navidad eres tú, cuando cantas al mundo un mensaje de paz, de justicia y de amor. La estrella de Navidad eres tú, cuando conduces a alguien al encuentro con el Señor. Eres también los reyes Magos, cuando das lo mejor que tienes sin importar a quien. La música de Navidad eres tú cuando conquistas la armonía dentro de ti. El regalo de Navidad eres tú, cuando eres de verdad amigo y hermano de todo ser humano. La tarjeta de Navidad eres tú, cuando la bondad está escrita en tus manos. La felicitación de Navidad eres tú, cuando perdonas y reestableces la paz, aun cuando sufras. La cena de Navidad eres tú, cuando sacias de pan y de esperanza al pobre que está a tu lado. Tú eres, sí, la noche de Navidad, cuando humilde y consciente, recibes en el silencio de la noche al Salvador del mundo sin ruidos ni grandes celebraciones; tú eres sonrisa de confianza y de ternura, en la paz interior de una Navidad perenne que establece el Reino dentro de ti. Una muy Feliz Navidad para todos los que se parecen a la Navidad.
El bulo «santos de jeans»
Además, hay un clásico que comparte multitud de personas todos los días en Facebook, y que ya fue falsamente atribuido a Juan Pablo II e incluso a la Madre Teresa. Se llama «santos de jeans».
«Necesitamos santos sin velo, sin sotana. Necesitamos santos de jeans y zapatillas. Necesitamos santos que vayan al cine, escuchen música y paseen con sus amigos. Necesitamos santos que coloquen a Dios en primer lugar y que sobresalgan en la Universidad. Necesitamos santos que busquen tiempo cada día para rezar y que sepan enamorar en la pureza y castidad, o que consagren su castidad. Necesitamos santos modernos, santos del siglo XXI con una espiritualidad insertada en nuestro tiempo. Necesitamos santos comprometidos con los pobres y los necesarios cambios sociales. Necesitamos santos que vivan en el mundo, se santifiquen en el mundo y que no tengan miedo de vivir en el mundo. Necesitamos santos que tomen Coca Cola y coman hot-dogs, que sean internautas, que escuchen iPod. Necesitamos santos que amen la Eucaristía y que no tengan vergüenza de tomar una cerveza o comer pizza el fin de semana con los amigos. Necesitamos santos a los que les guste el cine, el teatro, la música, la danza, el deporte. Necesitamos santos sociables, abiertos, normales, amigos, alegres, compañeros. Necesitamos santos que estén en el mundo y que sepan saborear las cosas puras y buenas del mundo, pero sin ser mundanos».
El ataque de un bloguero cristófobo
El bloguero cristofóbo Shangay Lili también colaboró a difundir por la red unas palabras falsamente atribuidas al Cardenal Bergoglio:
Ayuda a Infovaticana a seguir informando
Con Bergoglio la realidad supera con creces la imaginación. Por ejemplo, ayer dijo:
«¡Es bello pensar esto! Pensar en el cielo. Todos nosotros nos encontraremos allí. Todos, todos, allí, todos. Es bello. ¡Da fuerza al alma! »
Ni Disney tiene esa enfebrecida imaginación.
A mí no me molestan las supuestas palabra del Papa; sino bastantes de las no supuestas sino bien comprobadas.
Cada cual es responsable de o que dice, pero es más grave que le atribuyan cosas que no dice. Siemprees bueno ir a la fuente antes de mandar algo que te llega por las redes
Coincido en que no es problemático las falsas atribuciones a Francisco de palabras como las de los ejemplos. Lo que resulta problemático es sus palabras efectivamente dichas o, peor aún, los silencios que guarda respecto de materias importantes o neurales. Tomemos por ejemplo aquello de sus quejas porque existen parroquias que cuelgan en lugares visibles los aranceles referentes a los sacramentos. Para los católicos alemanes esas palabras son insignificantes si se tiene en cuenta que están obligados a pagar un impuesto que va a la Iglesia, si no lo pagan se ven excluidos de los sacramentos. Eso sí resulta escandaloso para eellos, pero el Papa no dice nada ni hace tampoco nada al respecto. ¿Para qué fijarse en el mosquito y fijarse complaciente con el camello?
Por lo demás, esas falsas frases atribuidas a Francisco, para un católico medianamente formado, resultan inanes.
Digan lo que se les antoje. HAY PARA FRANCISCO PARA RATO. LA REFORMA DE LA IGLESIA SÍ O SÍ, EN MARCHA. ¡VIVA EL PAPA! y una que otra golondrina no hacen verano, en contraste con los Millones y Millones que lo Aman y rezan por su Pontificado. Aleluya!
Que haya Francisco para rato unos lo gozan y no pocos lo temen. División de opiniones. Desconcierto.
El dichoso mensaje navideño no es del Papa Francisco. Cualquiera puede darse cuenta de que ese no es su lenguaje, ni sería capaz de escribir o decir algo así. Su autor es el P. Dennis Doren Legionario de Cristo, y que está sacado de su libro «Sembrando esperanza II»
La parte entrecomillada sí es del Papa Francisco: https://twitter.com/Pontifex_es/status/415065215089123328
Es importante respetar y decir siempre la verdad, no es una mera cuestión de religiosidad sino de honestidad, de claridad, de ser verdaderamente auténtico(a). Si quieres contribuir a mejorar la humanidad es necesario pensar y hacer bien las cosas, porque poner en boca de otra persona tu opinión es deshonesto, injusto y a veces hasta cobarde, porque puedes confundir y ofender a otro(a)s lectore(a)s, que desde luego censuraran y alteraran la opinión que tienen del afectado en este caso SS PAPA FRANCISCO, aunque sean cosas buenas, pensamientos llenos de amor y solidaridad no se debe usar su NOMBRE, recuerden «el fin aunque sea bueno no justifica los medios». Además su Santidad reflexiona, medita cuidadosamente cada expresión como una oración que comunique el verdadero sentido y ejercicio del amor pleno de solidaridad y llena según la necesidad del momento y la historia el «espacio» justo de la familia Cristiana, según el Evangelio, por eso «SUS» expresiones NO necesitan aditamentos externos impropios que le sean atribuidos. Recuerda «Di si cuando es si y no cuando es no …» Paz y Bien