Mientras algunos en la Iglesia están a verlas venir con resignación y otros aún con la venda puesta, los lobistas que buscan protestantizar la Iglesia católica llevan todo el mes de octubre sacando toda la artillería sin disimulo.
Ya no son solo artículos en prensa o declaraciones controvertidas de sus herejes portavoces eclesiásticos o el organizar un evento al que asisten cuatro gatos para hablar sobre las bondades de ser un católico que vive abiertamente en contra de la ley de Dios y de la naturaleza creada por Él y que dejó innata en nosotros. Estos grupos han dado un paso más y han pasado a la acción en las calles no solo de Roma sino del mismísimo Vaticano.
Y es que hasta medios vinculados a diócesis concretas dan a conocer las tropelías de estos grupos. El pasado domingo un grupo reformista llamado “Somos Iglesia” entró en la plaza de san Pedro durante el Ángelus del Papa con una pancarta en la que pedían «igualdad» para que los homosexuales puedan casarse por la Iglesia.
Tras desplegar la polémica pancarta, intervino la policía italiana, responsable de la plaza de San Pedro según el Tratado de Letrán. “Exigieron que se volviera a enrollar la pancarta”, informa Marlies Prinz, estudiante de teología de Enns, que se encontraba en Roma como representante juvenil del heterodoxo grupo “Somos Iglesia” y que presenció el incidente. La policía también retuvo sus documentos de identidad y llevó a varias personas a la comisaría cercana. Según el citado medio diocesano austriaco, una pareja involucrada en “Somos Iglesia” incluso fue llevada esposada al carecer de documentación.