
La noticia me parece tan asquerosa y tan impresentable que sería no como para bajarse en la próxima parada sino para tirar ya de la alarma y abandonar inmediatamente este repugnante autobús.
En esta sociedad descerebrada en la que por desgracia nos ha tocado vivir se produce un escándalo monumental ante el abuso de un menor hace cincuenta años e incluso para quien no reaccionó ante ese abuso del modo que hoy se piensa que se debe reaccionar y se reclama se elimine la prescripción de esos hechos y se mira a otro lado por muchos ante lo que está pasando hoy, con menores hoy y menores en teoría tutelados cuando lo que parece es que están prostituidos por quienes tenían encomendada la tutela.
Creo que tenían que estar ya en prisión todos los que abusaron y los que permitieron con lucro que otros abusaran. Y si son funcionarios, peor. Y los que debiendo enterarse por obligación de cargo no ejercieron la vigilancia debida al puesto y al sueldo, como poco, la destitución.
Unos menores, en teoría tutelados, arrojados a la prostitución por quienes tienen encomendada la tutela de esos pobres desgraciados y ante la indiferencia de la sociedad me parece simplemente asqueroso. Y no sólo por los abusadores.
¿A ver si lo de hace cuatro o cinco décadas hay que perseguirlo si el actor fue un cura y precisamente por eso? ¿Y como en lo de las Baleares de hoy no hay curas pues para qué vamos a indignarnos?