El obispo Athanasius Schneider ha elogiado la declaración del expresidente Donald Trump de que Estados Unidos reconoce únicamente dos sexos, calificándola como una «victoria del sentido común».
En declaraciones al diario italiano Il Messaggero el 22 de enero, monseñor Schneider, obispo auxiliar de Astaná, Kazajistán, destacó la importancia de esta proclamación realizada durante el discurso inaugural de Trump.
“El anuncio del presidente norteamericano, sobre el hecho de que sólo existen dos sexos, es decir, masculino y femenino, es simplemente una victoria del sentido común, de la lógica elemental y del reconocimiento de la realidad”, afirmó Schneider.
La declaración de Trump, realizada el 20 de enero, estableció que la política oficial del gobierno de Estados Unidos reconocería únicamente los géneros masculino y femenino. Además, el expresidente se comprometió a «poner fin a la política gubernamental de ingeniería social de la raza y el género en todos los aspectos de la vida pública y privada».
Mientras la comunidad LGBT criticaba la declaración de Trump, Schneider la celebró como un paso importante en una sociedad que, según él, ha adoptado la ideología de género en detrimento de los valores tradicionales.
“En el contexto de la promoción e imposición opresiva de la llamada ideología de ‘género’ a nivel casi global por parte del establishment político y social, la afirmación del líder político más poderoso del mundo representa una esperanza para un proceso de verdadera liberación de una gran parte de la humanidad que está ideológicamente esclavizada por el totalitarismo ideológico», señaló el prelado kazajo.
Schneider también subrayó que la Iglesia lleva defendiendo la ley natural y la moral revelada durante dos mil años, y que vivir conforme a la voluntad de Dios respecto a la sexualidad es esencial para la verdadera felicidad humana y el progreso moral de la sociedad.
“Sólo cuando el hombre acepte y, con la ayuda de Dios, viva la sexualidad según la sabia voluntad de Dios, será verdaderamente feliz y la sociedad humana tendrá un verdadero progreso moral y social, digno del hombre”, concluyó.