El Vaticano seguirá consensuando con la dictadura china el nombramiento de obispos otros cuatro años más

Papa católicos chinos

La Santa Sede y el Gobierno de China han hecho público la renovación de los ‘pactos secretos’ entre ambos Estados.

El comunicado oficial que informa de la noticia explica la decisión, tomada «tras las oportunas consultas y evaluaciones», gracias al «consenso alcanzado para una fructífera aplicación» del Acuerdo sobre el nombramiento de obispos, y precisa que la «parte vaticana mantiene la intención de continuar el diálogo respetuoso y constructivo con la parte china, para el desarrollo de las relaciones bilaterales en vista del bien de la Iglesia católica en el país y de todo el pueblo chino».

Se trata de la tercera renovación de un acuerdo que con su firma el 22 de septiembre de 2018 había abierto una página histórica en las relaciones entre la Santa Sede y dictadura comunista de China, y dentro de la propia Iglesia del gran país oriental, permitiendo a todos los obispos estar en plena comunión jerárquica con el Papa.

A pesar de este acuerdo, en los últimos años Pekín se ha saltado a la torera estos acuerdos nombrando obispos por su cuenta sin haberlo consensuado con Roma quienes finalmente terminaban reconociendo los nombramientos de los obispos controlados por el gobierno chino. Además, en 2022 el cardenal chino Joseph Zen fue detenido por las autoridades chinas en el marco de una operación contra varios activistas católicos.

A pesar de los continuos desplantes por parte del Gobierno chino a Parolín y al Papa Francisco, la Santa Sede vuelve a hacer una excepción con los comunistas para seguir consensuando con el equipo de Xi Jinping los nombramientos de los obispos. Cabe recordar que el pasado agosto, la Sede Apostólica celebró el reconocimiento de Melchiorre Shi Hongzhen como obispo de la diócesis de Tianjin, tras un nombramiento realizado por el papa hace cinco años que no había sido aprobado por las autoridades chinas.

Por su parte, el ministro de exteriores de China, Lin Jian, aseguró que «a través de consultas amistosas, ambas partes han decidido extender el acuerdo cuatro años más».

La relación entre el Vaticano y China se rompió hace más de siete décadas, tras la llegada del Partido Comunista al poder. Los 12 millones de católicos que se estima que hay en el país se dividen entre una Iglesia reconocida por el Estado y otra clandestina que se mantuvo leal a Roma.