El viernes pasado, Cáritas Luxemburgo confirmó haber presentado una denuncia por malversación de fondos el 16 de julio. El importe se estima en 60 millones de euros.
Desde la organización caritativa de la Iglesia se aseguró que «a lo largo de la investigación, cooperará plenamente con el sistema judicial para aclarar la situación rápidamente. Esto respetando el secreto de la investigación».
«A pesar de esta situación, continúa dedicándose con calma y de lleno a cumplir su misión, apoyando a las personas más desfavorecidas», dijo Cáritas en Luxemburgo.
Según información del periódico «Luxemburger Wort», la fiscalía anunció inicialmente el viernes que se había abierto una investigación por malversación de 61 millones de euros por parte de un empleado de Cáritas. Una persona fue detenida el lunes tras entregarse a la policía.
El escándalo es de tal calibre en este pequeño país europeo que hasta el Primer Ministro Luc Frieden ha opinado sobre este asunto para resaltar que el Estado no pagará por el momento “ni un euro” a Cáritas.
Tras el anuncio el viernes pasado de la presentación de la denuncia por malversación por un importe estimado en 61 millones de euros, Cáritas Luxemburgo «recibió numerosos mensajes de solidaridad y apoyo de instituciones, empresas privadas y particulares». La asociación, ha elaborado así una lista de prioridades y la primera de ellas se refiere a los empleados de Cáritas Luxemburgo.
Auditoría y negociación con bancos y con el Gobierno
En una nota difundida esta semana por la organización, los miembros del consejo de administración y de la dirección general mandaron un mensaje para «tranquilizar a nuestro personal, que está muy conmocionado por estos recientes anuncios». «Hemos implementado soluciones de apoyo psicológico para los miembros que deseen beneficiarse de ellas durante este período. Cáritas Internationalis y Cáritas Europa también nos han ofrecido su apoyo en este contexto”, anuncia Marc Crochet, director general.
Cáritas Luxemburgo ha informado que contará con el apoyo de una empresa de auditoría que se ha ofrecido voluntariamente para controlar los procedimientos financieros, detectar y corregir lo que, a nivel técnico y/o humano, pueda haber fallado. «Elementos que sin duda nos permitirán comprender mejor cómo fue posible un desvío de esta escala y durante un período de casi seis meses. Porque las pérdidas financieras incluyen tanto las transferencias realizadas desde las cuentas y reservas de Cáritas Luxemburgo, como también las líneas de crédito, es decir, fondos que en realidad no tenía», se lee en el comunicado.
Por ello, subrayan que se han iniciado conversaciones con los bancos y con el Gobierno luxemburgués. «Esto implicará negociar con los bancos para satisfacer las necesidades financieras de Cáritas Luxemburgo a corto plazo, a la espera de soluciones más globales. El Gobierno, que ha condenado enérgicamente la malversación de fondos, intenta encontrar soluciones que puedan garantizar la continuidad de las actividades en favor de las personas más necesitadas de Luxemburgo», agrega Cáritas Luxemburgo.
A pesar del escándalo, la organización confirma que las actividades llevadas a cabo por Cáritas Luxemburgo continuarán y las personas necesitadas, que dependen de la ayuda de la organización, podrán seguir contando con su apoyo.