El Consejo de Iglesias y Organizaciones Religiosas de Ucrania, del que forma parte la Iglesia católica, ha emitido un comunicado en apoyo a las iniciativas del presidente de Ucrania para llevar a las autoridades rusas ante la justicia.
Desde el Consejo de Iglesias, sostienen que «los constantes ataques de artillería, misiles y bombas contra los hogares de civiles, escuelas, jardines de infancia, iglesias, mezquitas y sinagogas, la destrucción de ciudades y pueblos, la destrucción deliberada del patrimonio histórico, cultural y espiritual de Ucrania, el asesinato de mujeres y niños, ejecuciones, torturas, secuestros, burlas al derecho internacional, chantaje nuclear, todo esto no puede ni debe quedar impune».
Así mismo, «reconociendo la escala del dolor que Rusia ha infligido a nuestros creyentes y a todo el pueblo ucraniano, conscientes de la amenaza que el imperialismo ruso representa para los pueblos de Europa, y basados en nuestros principios religiosos, creencias personales y el llamado de nuestra conciencia», desde este organismo muestran su «apoyo incondicional a la creación de un Tribunal Internacional que enjuiciaría a las autoridades rusas por el crimen de agresión, es decir, por la guerra iniciada contra Ucrania».
«Estamos a favor del rápido establecimiento y funcionamiento del Tribunal Internacional en el que están trabajando los países líderes y el castigo de quienes iniciaron la guerra de agresión contra Ucrania. Hacemos un llamado a todos los Estados, así como a la Cámara de Representantes de los EE. UU, al Senado de los EE. UU. y al Departamento de Estado de los EE. UU, para que apoyen la creación de un Tribunal basado en el modelo internacional», se lee en el escrito.
Además, también condenan y muestran su repulsa ante la práctica de «la deportación forzada ilegal e inhumana de niños ucranianos a Rusia y su posterior adopción forzosa. Hacemos un llamado a la ONU, UNICEF y la Cruz Roja para que presionen a Rusia con la demanda de devolver a los niños ucranianos deportados al país y reunirlos con sus padres y familiares».
También aplauden la investigación de la Corte Penal Internacional «contra las autoridades rusas y los criminales de guerra. Un juicio justo es uno de los principios fundamentales necesarios para la existencia y el desarrollo de la humanidad». «Hacemos un llamado a la comunidad internacional para que apoye un mecanismo de compensación que facilite el reembolso de las pérdidas que Rusia causó al estado y la sociedad ucranianos», concluye el comunicado.