Las primeras ordenaciones del Papa León en San Pedreo marcaron también a la Iglesia católica de México con la ordenación de cuatro diáconos. Este evento, celebrado en el marco del Jubileo del Clero, no solo representa un hito para la Iglesia de México, también para la arquidiócesis de San Luis Potosí y la diócesis de Linares que es el culmen de un camino vocacional marcado por el servicio y un profundo compromiso con las comunidades católicas de esas iglesias particulares.
En los servicios informativos, se compartió quiénes son los nuevos presbíterios, tres de la arquidiócesis de San Luis Potosí y uno más de la diócesis de Linares. Este último Uno de ellos fue Jorge Antonio Escobedo Rosales nació el 18 de marzo de 1998 en San Nicolás de los Garza, creció en Doctor Arroyo, un municipio rural de Nuevo León. Su vocación tiene raíces profundas en la fe de sus abuelos maternos, quienes le inculcaron el amor por la oración y la comunidad eclesial. Jorge se sintió atraído por la vida religiosa, participando activamente en la parroquia. A los 14 años, ingresó al Seminario de Linares, en 2012
En redes sociales, el neosacerdote compartió que sus abuelos fueron pilares fundamentales en su camino vocacional y tiene en su familia a un baluarte en su camino al sacerdocio relató Escobedo en una entrevista difundida en partes por la diócesis de Linares.
Según relató el padre Jorge Antonio Escobedo Rosales, quien también estuvo acompañado de su obispo, el chihuahuense César Alfonso Ortega Díaz, su elección fue gracias a la convocatoria general hecha a los obispos de la Conferencia del Episcopado Mexicanos quienes, a través de un sorteo nacional, obtuvieron a quien sería el diácono que llevaría la representación de México para ser ordenado por la imposición de manos del Papa León. Así formó parte del grupo de los 32 diáconos de 23 países ordenados por el obispo de Roma el 27 de junio, solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús.
De la arquidiócesis de San Luis Potosí, Israel Sánchez Ramírez, Pedro Pablo Ruiz Baltazar y Jiergue Stanley Augustin, nacido en Haití pero residente de San Luis Potosí, fueron los otros tres diáconos transitorios quienes también fueron acompañados por el arzobispo de origen regiomontano Alberto Cavazos Arizpe
El Jubileo del Clero, convocado para reflexionar sobre la vocación sacerdotal, brindó el marco perfecto para esta ordenación internacional en el Vaticano. La diócesis de Linares celebró esta oportunidad como una bendición destacando que “un hijo” de esa diócesis sea ordenado en Roma. La ceremonia, transmitida en vivo por Vatican News, permitió a los fieles de Linares y de San Luis Potosí atestiguar
En la misa de ordenación, el Papa León XIV dirigió una homilía centrada en la caridad pastoral, instando a los nuevos sacerdotes a ser santos: “Te tengan presentes aquellas «maravillosas figuras de santidad sacerdotal, sacerdotes, mártires, apóstoles incansables, misioneros y campeones de la caridad… Atesoren tanta riqueza: interésense por sus historias, estudien sus vidas y sus obras, imiten sus virtudes, déjense encender por su celo e invoquen con frecuencia y con insistencia su intercesión…
“Hoy vuelvo a compartirlo con todos ustedes: reconciliados, unidos y transformados por el amor que brota abundantemente del Corazón de Cristo, caminemos juntos tras sus huellas, humildes y decididos, firmes en la fe y abiertos a todos en la caridad, llevemos al mundo la paz del Resucitado, con esa libertad que nace de sabernos amados, elegidos y enviados por el Padre”
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