«Los Benedictinos de la Inmaculada son un Instituto de Vida Consagrada, fundado en 2008. Siguen la vida monástica tradicional, según la Regla de San Benito, y su vida litúrgica se desarrolla según el Rito Romano Tradicional.
El 21 de diciembre, los benedictinos publicaron un comunicado comentando su fidelidad a la liturgia tradicional, incluso después del motu proprio Traditionis Custodes y la respuesta a la ‘Dubia’. El Superior del Monasterio, Père Jehan de Belleville, concedió una entrevista a Présent sobre estos temas. Aquí hay algunos extractos de él:
P. Jehan de Belleville – No se equivoquen, tanto el motu proprio como la respuesta a los ‘dubia’ muestran un deseo de abolir el uso del Rito Antiguo tarde o temprano. La posición de las comunidades no se debilitará tanto por las violentas disposiciones romanas, sino por la falta de firmeza en la fe expresada por la doctrina tradicional y el culto de la Iglesia. Esta constancia puede exigir el rechazo de órdenes gravemente injustas de miembros de la jerarquía eclesiástica, porque la fe es lo primero.
Présent – Por vuestros estatutos, ¿a quién debéis obediencia – dentro de la Iglesia militante – en cuanto a la Liturgia?
P. Jehan de Belleville – La competencia pertenece a la Congregación para el Culto Divino, pero no tiene poder absoluto, como declaró Benedicto XVI: “Lo que fue sagrado para las generaciones anteriores sigue siendo grande y sagrado para nosotros, y no puede ser prohibido totalmente de repente, o incluso considerado dañino».
Presente – Cuando dices, en tu mensaje del 21 de diciembre, que permanecerás fiel a la Liturgia Tradicional «cueste lo que cueste», ¿qué crees que podría pasar?
P. Jehan de Belleville – Si – ¡Dios no lo quiera! – Roma nos obliga a ir en contra de nuestras Constituciones, ¿debemos elegir: ser obedientes a Roma y por lo tanto renegados, o ser fieles a nuestros votos y ser condenados como «desobedientes»? ¡La respuesta es clara!
Es Interesante ver qué el arraigo a la liturgia tradicional no es solo por capricho, es porque dentro de sus gestos, acciones y oraciones se expresa más fiel el Signum Fidei (Signo de la fé) en contraposición de la nueva misa.
¿Cuál será el camino que tomé la comunidad monástica benedictina para el futuro cuando el momento de realmente de tomar la decisión llegue?
Santa María Madre de la Iglesia, Rogad por nosotros.
San José, Santo patrono de la iglesia, Rogad por nosotros.»
Pues ahí queda eso