Una vez más en total coincidencia con el maestro.
Tanta que os dejo con lo que hace un tiempo yo mismo escribí sobre esta antigualla que hoy no interesa a nadie y que es Celso Alcaina:
«Celso Alcaina, otra pieza arqueológica de Atrio»
Iniciaba una carrera eclesial brillante que él mismo la tiró por la borda. Y hoy ya nadie sabe quien es. Ni la gran parte de los lectores de esos coleccionistas de naderías muertas. En el caso del exclérigo, ya cadáver insepulto de la actualidad religiosa, aunque existencialmente todavía pulule por no se sabe donde sin que nadie se entere, ni falta que hace, el maestro le pone en el lugar que le corresponde.
Sic transit gloria mundi.
Lo que también es una exageración porque gloria este individuo hace ya más de medios siglo o casi que no sabe lo que es. Y es verdad que el chiquito prometía. No era un Aradillas. Pero la vida es así. Y hoy la nada del extremeño es más conocida que la superioridad neuronal del gallego cosa que descompondrá a Alcaina. Que siempre presumió de sus pasados y marchitos laureles.
Lean el artículo de Aberasturi que dice muchas más cosas que el poner a un ya nadie en su lugar. Y a más.
Y si alguien conoce personalmente, ya sé que es difícil, al tal Celso, y nos quisiera informar si a sus 86 años se mantiene sin una cana pues nos permitiría saber más del personaje y de la potencia capilar de sus genes. O del toma del frasco, Carrasco.