La abadía trapense de Snowmass, situada en el estado estadounidense de Colorado, ha sido vendida por 120 millones de dólares, según informó CNA. La operación, realizada de forma privada poco antes de Navidad, tendría como comprador a Alex Karp, cofundador y director ejecutivo de la empresa tecnológica Palantir, de acuerdo con datos publicados por The Wall Street Journal.
El monasterio, oficialmente denominado abadía de San Benito, pertenecía a la Orden Cisterciense de la Estricta Observancia (Trapenses) y se asienta en una extensa propiedad de alrededor de 1.500 hectáreas en la meseta de Snowmass, cerca de Aspen.
Origen de la comunidad monástica en Colorado
La presencia trapense en Snowmass se remonta a finales de la década de 1950. Tras un rápido crecimiento de la comunidad en la abadía de San José de Spencer (Massachusetts), los monjes consideraron necesaria una nueva fundación que permitiera mantener el estilo de vida monástico que buscaban. En 1958, un grupo de religiosos fue enviado a Colorado, donde adquirieron una antigua ranchería y comenzaron la construcción del nuevo monasterio.
Ese mismo año, el 21 de noviembre de 1958, llegaron los primeros 35 monjes procedentes de Spencer. La comunidad se dedicó a la vida contemplativa propia de los trapenses, combinando la oración con el trabajo manual en un entorno marcado por la altitud, cercana a los 2.400 metros.
Actividades económicas y dificultades
Para sostenerse económicamente, los monjes intentaron diversas actividades productivas. En una primera etapa, incursionaron en la elaboración de dulces, iniciativa que fracasó debido a los efectos de la altitud en los productos. Posteriormente, la comunidad probó con la ganadería, aunque las exigencias físicas llevaron finalmente a abandonar esta actividad.
A partir de 1967, el monasterio mantuvo durante casi dos décadas una granja avícola, vendiendo huevos a restaurantes de la zona, lo que permitió complementar los ingresos de la comunidad.
Declive tras el Concilio Vaticano II
En 1970, el monasterio fue elevado a la categoría de abadía, pero poco después comenzaron a manifestarse los efectos de los profundos cambios vividos por muchas comunidades religiosas tras el Concilio Vaticano II. La comunidad de Snowmass no fue ajena a esta crisis: a lo largo de los años se produjo un notable descenso en el número de monjes, hasta quedar reducida a siete religiosos en 1978.
La progresiva disminución de vocaciones y el envejecimiento de los miembros llevaron finalmente a la decisión de cerrar y vender el monasterio. Inicialmente, la propiedad fue puesta a la venta por 150 millones de dólares, aunque el precio final se fijó en 120 millones.
El comprador y el cierre definitivo
Según CNA, el comprador sería Alex Karp, empresario tecnológico con un patrimonio estimado en 18.000 millones de dólares, cuya compañía mantiene vínculos con el ejército y los servicios de inteligencia de Estados Unidos. El destino futuro del complejo monástico no ha sido detallado públicamente.
Con la venta, los trapenses abandonan Snowmass tras casi 70 años de presencia. El último superior de la comunidad, el antiguo abad Dom Damian Carr, ha anunciado que la última liturgia pública en la abadía de San Benito se celebrará el 11 de enero de 2026, poniendo fin a la vida monástica en este enclave de Colorado.
