Un grupo de extremistas musulmanes incendió el árbol de Navidad de la parroquia del Santísimo Redentor, situada en Jenin, en Cisjordania, en un nuevo episodio de hostigamiento contra la presencia cristiana en Tierra Santa. El ataque ha sido condenado por Mons. Adolfo Tito Yllana, nuncio apostólico en Israel y delegado apostólico en Jerusalén y Palestina.
El atentado se produjo en la madrugada del lunes 22 y fue denunciado públicamente por la propia parroquia a través de sus cuentas oficiales en Instagram y Facebook, donde se difundieron imágenes del árbol calcinado. «Este es un acto que debe ser condenado, porque no ayuda y no es la primera vez», declaró el nuncio.
Condena de la comunidad cristiana
La agresión provocó una reacción inmediata de rechazo por parte de la comunidad cristiana local. Según informó Vatican News, para la tarde de este martes estaba prevista la visita del vicario general del Patriarcado Latino de Jerusalén, Mons. William Shomali, con el objetivo de inaugurar un nuevo árbol de Navidad junto a las autoridades locales.
El gesto busca reafirmar públicamente la presencia cristiana en la zona y responder al ataque con un signo visible de fe y esperanza.
“Estos actos no favorecen la convivencia”
Durante una visita posterior a Ramala, Mons. Yllana insistió en que este tipo de agresiones «no favorecen la convivencia» y subrayó que no deben atribuirse a comunidades enteras, sino a personas concretas. «Quienes cometen estos actos no ayudan», afirmó.
El nuncio recordó además las dificultades cotidianas que afrontan los cristianos en Cisjordania, donde sus actividades religiosas y sociales se ven con frecuencia restringidas.
Mantener la esperanza en medio del conflicto
Mons. Yllana señaló que, pese a las consecuencias de la guerra en Gaza —que también se han dejado sentir en Cisjordania—, la comunidad cristiana no ha perdido la esperanza. «El árbol quiere anunciar que es nuestra fiesta y que queremos celebrarla. No podemos detenernos», explicó, subrayando el valor simbólico de mantener visibles los signos de la fe cristiana.
«La esperanza no es una palabra; aquí está la vida y el aliento, cada día. Porque no nos hemos rendido», añadió, animando a los fieles a acoger al Niño Jesús para dejarse transformar y dar testimonio público de una fe que «acoge a todos».
Llamado a la reconciliación y a la paz
En ese mismo contexto, el nuncio apostólico invitó a seguir el llamado del Papa León XIV a trabajar por una paz «desarmada y desarmante», dando espacio a la reconciliación, incluso con quienes actúan con hostilidad, al ser todos hijos del mismo Padre.
La respuesta de la parroquia
Por su parte, el párroco del Santísimo Redentor, P. Amer Jubran, condenó enérgicamente el ataque en una publicación en Facebook. Aseguró que se trata de un hecho aislado que no representa ni a la cultura palestina ni a la tradición cristiana local.
Asimismo, exhortó a la población a seguir siendo un modelo vivo de fraternidad, amor y convivencia, arraigado en los valores del respeto mutuo.
Fuente: Aciprensa
