El copríncipe episcopal de Urgell, Mn. Josep-Lluís Serrano Pentinat, presidió este domingo la oración por los difuntos en la capilla del Hospital Nuestra Señora de Meritxell, acompañado por los sacerdotes Jaume Soy y Toni Elvira. Según informó La Veu Lliure, durante la ceremonia, ante un grupo de fieles, el prelado pronunció unas palabras que cobran un significado especial en medio del debate sobre la despenalización del aborto:
“Estamos entregados a vivir; esta vida no depende de nosotros. La vida se nos ha dado para siempre. Toda nuestra existencia es un sí a la vida.”
Estas palabras llegan tras un prolongado silencio del copríncipe sobre la cuestión. A comienzos de octubre, cuando fue consultado por los medios, Serrano Pentinat había dicho: “No me compete a mí tomar decisiones ni hablar al respecto. La entrevista para mí ha sido la oración.”
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Aunque el copríncipe no habló directamente del aborto, su frase —“Toda nuestra existencia es un sí a la vida”— ha sido recibida como una reafirmación de la enseñanza católica sobre la sacralidad de la vida. En un país donde la autoridad episcopal comparte la jefatura de Estado, sus palabras tienen un peso moral ineludible.
El mensaje de Serrano Pentinat, pronunciado desde un altar y no desde un despacho, recuerda que “la vida no depende de nosotros”. En una sociedad que enfrenta presiones políticas y culturales para legislar contra la ley natural, su voz se levanta como un recordatorio pastoral: la existencia humana es don, no decisión.
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