Coincidiendo con la Jornada Mundial de las Misiones, la Agencia Fides ha publicado las estadísticas anuales de la Iglesia católica. Los datos ofrecen una panorámica reveladora: mientras el número de católicos aumenta en todo el mundo —con especial fuerza en África y América—, el clero y las vocaciones siguen disminuyendo en Europa y América, confirmando una tendencia de décadas.
Crecimiento de fieles y contraste por continentes
La población mundial alcanzó en 2023 los 7.914 millones de habitantes, de los cuales 1.405 millones son católicos. Esto representa el 17,8 % de la población, un ligero aumento respecto al año anterior. África fue el continente que más creció, con 8,3 millones de católicos adicionales, seguido por América (+5,6 millones). Incluso Europa, tras años de retrocesos, registró un leve aumento (+740.000).
Más católicos, menos sacerdotes
El contraste más llamativo es la relación entre fieles y sacerdotes. El número de católicos por sacerdote subió a 3.453, mientras que el de habitantes por sacerdote alcanzó casi 16.000. La explicación está en la caída del clero: el número total de sacerdotes bajó a 406.996, lo que supone 734 menos que el año anterior. Europa perdió más de 2.400 sacerdotes, América casi 800, y Oceanía 44. En cambio, África (+1.451) y Asia (+1.145) sí aumentaron.
Vocaciones en declive
El panorama vocacional también preocupa. Los seminaristas mayores (diocesanos y religiosos) descendieron a 106.495 en todo el mundo, casi 2.000 menos que el año anterior. Solo África creció en este campo (+383), mientras América, Asia y Europa experimentaron fuertes caídas. Lo mismo sucede con los seminaristas menores, que bajaron a 95.021 globalmente.
El papel creciente de laicos y catequistas
Frente al descenso clerical, se observa un aumento significativo de misioneros laicos y catequistas. En 2023 se contabilizaron 444.606 misioneros laicos (+31.320) y casi 2,9 millones de catequistas, con un crecimiento marcado en América y Asia. Este dato confirma que la vida de la Iglesia en muchos lugares depende cada vez más de laicos comprometidos ante la falta de sacerdotes.
Una Iglesia que crece en número, pero no en estructuras
La paradoja es evidente: los católicos aumentan, sobre todo en África y América, pero la Iglesia cuenta con menos sacerdotes, menos religiosas y menos seminaristas. El peso de Europa sigue cayendo, no tanto en número de fieles como en vocaciones, lo que muestra el agotamiento de un continente que fue durante siglos el corazón misionero.
Más allá de los números, los datos de la Agencia Fides plantean una cuestión crítica: ¿puede sostenerse la vitalidad de la Iglesia con más católicos y menos clero? En este contexto, los datos no son solo un llamado a la reflexión, sino también a la oración: recemos por nuestros sacerdotes y por las vocaciones a la vida religiosa, y para que la Iglesia no falte nunca de obreros en la mies del Señor.
Oración por las vocaciones sacerdotales
Divino Jesús, que quieres que pidamos al
Señor de la mies
que envíe a ella buenos operarios,
dígnate suscitar en tu Iglesia y en particular
en esta diócesis muchos y santos
sacerdotes,
que siéndolo en todo según tu Corazón,
procuren celosamente por su sagrado
ministerio
la gloria de tu Padre Celestial y la salvación
de las almas
redimidas por tu Sangre preciosa.
Amén.