Según ha podido saber InfoVaticana, la terna enviada a Roma para la sede de Barcelona estaría integrada por Florencio Roselló, José Ángel Saiz Meneses y Enrique Benavent Vidal.
Florencio Roselló, actual arzobispo de Pamplona y Tudela, es religioso mercedario y desarrolló buena parte de su vida pastoral en el ámbito penitenciario. Su nombramiento para Pamplona fue recibido con sorpresa en amplios sectores eclesiales, que consideran que carece de la formación y el perfil necesarios para una sede de primera línea, y recuerdan sus bochornosas intervenciones en la Conferencia Episcopal Española, que lo habrían descalificado para responsabilidades mayores.
José Ángel Saiz Meneses, arzobispo de Sevilla y antiguo obispo de Terrassa, es considerado el mejor candidato para Barcelona. Conoce bien la realidad eclesial catalana, combina prudencia y firmeza doctrinal, y goza del respeto de una parte significativa del episcopado español. Sería, según diversas fuentes, el nombre más idóneo para una diócesis que exige equilibrio, claridad y experiencia.
El tercer nombre, Enrique Benavent Vidal, actual arzobispo de Valencia, representa un perfil más teológico y moderado, aunque su gestión en Valencia ha suscitado críticas por una política de nombramientos considerada demasiado continuista con etapas anteriores.
Por otra parte, fuentes cercanas al entorno romano aseguran que Jordi Bertomeu, sacerdote catalán que trabaja en el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, estaría intentando abrirse paso para ser incluido en la terna y eventualmente aspirar a la sede barcelonesa. Sobre su figura y sus recientes movimientos en Roma, InfoVaticana informará próximamente.