El sábado 6 de septiembre de 2025 concluyó el XXVI Congreso Mariológico Mariano Internacional, organizado por la Pontificia Academia Mariana Internationalis (PAMI), tras reunirse desde el 3 de septiembre en Roma con la participación de cerca de 600 estudiosos de la mariología provenientes de todos los continentes. El encuentro giró en torno al tema “Jubileo y sinodalidad: una Iglesia con rostro y práctica mariana”.
En la solemne audiencia final, presidida por el cardenal Rolandas Makrickas, enviado del Papa, se dirigió a los participantes una reflexión centrada en el papel de María como figura emblemática tanto del jubileo como de la sinodalidad.
María como mujer “jubilar” y “sinodal”
Las jornadas del congreso subrayaron que María encarna el rostro de una Iglesia jubilar —centrada en la misericordia, la reconciliación y la esperanza— y al mismo tiempo una mujer sinodal, que acompaña a la comunidad creyente desde su humildad y apertura al Espíritu.
Los ponentes destacaron cómo María, con su ejemplo, enseña a la Iglesia a acoger, a inculturar la Palabra de Dios y a caminar junto a todos sin exclusión. Se reafirmó que su experiencia constituye el camino para una evangelización renovada, profundamente bíblica y humana.
Natividad de la Virgen María
Hoy, 8 de septiembre, celebramos la Natividad de la Virgen María, una festividad que recuerda el nacimiento de Aquella que fue llamada a ser Madre de Dios. Este día adquiere un significado especial tras el congreso, pues resuena en el corazón del mensaje: María, desde su nacimiento, es modelo de la Iglesia jubilar y sinodal que escucha, acoge y evangeliza desde lo sencillo y lo cotidiano.
