Los frailes franciscanos de la Tercera Orden Regular (TOR) en Gotemburgo, Suecia, han anunciado la suspensión temporal de la celebración de la Misa tradicional en latín conforme al Misal Romano de 1962, invocando preocupaciones por posibles tensiones entre los fieles.
La decisión fue comunicada el 28 de julio por el superior local, el padre Ludvig Ludvigsen, a través de un aviso difundido en sus sitio web y difundido por la periodista Diane Montagna, quien hace poco publicó partes del informe final del Dicasterio para la Doctrina de la Fe en relación al Summorum Pontificum. Según el comunicado, la medida entrará en vigor el próximo 10 de agosto y se tomó tras consultar al obispo de la diócesis, el cardenal Anders Arborelius, y con el consentimiento del Ministro General de la orden.
Una tradición en Gotemburgo
Desde septiembre de 2007, los frailes celebraban la Misa tradicional cada domingo en Franciskusgården, el convento franciscano de Gotemburgo, como una opción adicional a la Misa en la forma ordinaria. Sin embargo, el comunicado advierte que podrían haberse producido “tensiones o malentendidos entre los fieles cristianos en la diócesis” en relación con la celebración de algunos sacramentos de la Iglesia en sus distintas formas.
El texto institucional, firmado por la comunidad de la Delegación de San Juan Bautista de la Tercera Orden Regular, cita el Catecismo de la Iglesia Católica (n. 1206): “La diversidad litúrgica puede ser una fuente de enriquecimiento, pero también puede provocar tensiones, malentendidos e incluso divisiones”. Y subraya que “la diversidad no debe dañar la unidad”.
Una medida para preservar la unidad
Por este motivo, los franciscanos TOR anunciaron que cesarán “temporalmente” la celebración de la Misa según el Misal de 1962 “pendiente de nuevas orientaciones sobre cómo abordar estas tensiones o malentendidos”.
No obstante, aclararon que continuarán celebrando la liturgia en la forma ordinaria y que la última Misa tradicional será el 10 de agosto. Añadieron también que, si en el futuro hubiera necesidad de celebrar nuevamente la Misa del mediodía en la forma ordinaria, estarían dispuestos a hacerlo.
Una más de Traditionis Custodes
La medida se inscribe en un contexto más amplio de restricciones a la celebración de la liturgia tradicional tras la entrada en vigor del motu proprio Traditionis custodes y sus posteriores aplicaciones. La suspensión en Suecia podría interpretarse como una señal de las tensiones que aún persisten dentro de la Iglesia respecto a la coexistencia de las dos formas del rito romano.