Este 5 de julio, los obispos han permitido, financiado y legitimado con su firma sonora un editorial (artículos que no llevan firma pero que definen la postura de la empresa) que llora la decadencia del socialismo europeo, en tono nostálgico.
Un artículo que recuerda los días gloriosos de Felipe González, Mario Soares, Willy Brandt y Mitterrand. Y lo hacen con tono de lamento porque, ¡ay!, ya no hay socialistas “que contribuyan a una Europa más justa”. Como si los millones de muertos por aborto, eugenesia, desmantelamiento familiar y corrosión moral promovidos por esos mismos líderes no fueran suficientes para cerrar el capítulo con asco y arrepentimiento.
Mientras el PSOE se empeña en destruir España y su convivencia, desenterrando muertos y liquidando libertades COPE se lamenta de la crisis del PSOE, y echa de menos el «PSOE bueno» del divorcio y el aborto.
¿Quién redacta esta apología vergonzante?
¿Quién ha dado el visto bueno?
¿Quién dirige editorialmente COPE?
Más aún: ¿quién preside la Conferencia Episcopal que la sostiene con nuestros donativos?
Hay dos nombres inevitables: Barriocanal y Argüello.
Texto íntegro de la Línea Editorial de COPE – 5 de julio de 2025
Los partidos socialistas arrastran una significativa crisis en toda Europa. El pasado mes de junio se produjo una estrepitosa derrota del socialismo portugués que se convirtió en la tercera fuerza del país por detrás de la formación de derecha radical Chega. Los socialistas franceses llevan años intentando refundarse, divididos en varias familias antagónicas. En el caso de Italia, el socialismo está desde hace décadas desaparecido. En Alemania, los líderes del SPD han reconocido recientemente que su partido es demasiado aburrido. En las últimas elecciones se quedó también en tercera posición y no llegó al 17 por ciento de los votos.
Hubo un tiempo en el que socialistas como Felipe González en España, Mario Soares en Portugal, Bettino Craxi en Italia, Willy Brandt y Helmut Schmidt en Alemania, Olaf Palme en Suecia o Mitterrand en Francia, contribuían a la construcción de una Europa más próspera y más justa. Esos nombres se antojan ahora gigantes ante los líderes socialistas. El hueco dejado por la crisis del socialismo se reparte entre opciones radicales de izquierdas, formaciones liberales o incluso opciones radicales de derecha.
En teoría, el Comité Federal del PSOE que se celebra hoy servirá para cerrar la crisis que ha provocado en el partido el informe de la UCO sobre Cerdán que ha acabado en la cárcel. Es un cierre en falso de Sánchez que puede tener consecuencias severas para el socialismo español. El experimento fallido de Podemos y la irrelevancia de Sumar son una ventaja, pero los socialistas se juegan la posibilidad de acabar como otros compañeros europeos. Y eso no sería bueno para la estabilidad política de España.