El socialista Carlos Martínez Mínguez, alcalde de Soria, se ha hecho protagonista de una parodia de las apariciones papales en las fiestas de Tardelcuende, «bendiciendo» al pueblo subido al techo de un coche con una escobilla de váter a modo de hisopo.
Delante del «papamóvil» que llevaba al alcalde socialista caminaban varios jóvenes vestidos de guardias suizos, seguidos detrás del vehículo por varias personas que se hacían pasar por obispos y cardenales.
El grupo municipal Vox en el Ayuntamiento de Soria solicita, a través de un comunicado, la dimisión de Carlos Martínez tras lo que ha calificado como «verano vergonzoso» por la sucesión de noticias negativas del consistorio acontecidas recientemente. Señalan la sentencia que obliga a la demolición de la quinta planta del edificio Pajaritos II, los retrasos en los pagos a proveedores municipales, la falta de control sobre el patrimonio soriano de la Iglesia de El Mirón, su política de personal y la «última payasada» de Carlos Martínez subido en un Papa móvil.
La edil de Vox, Sara López, afirmó: «Pedimos a Carlos Martínez que presente su dimisión. Él y Luis Rey están convirtiendo al Ayuntamiento de Soria en un ejemplo de desgobierno, irregularidades, deudas impagadas y en un infierno fiscal. Cada día nos despertamos con una noticia negativa del ayuntamiento de Soria peor que la anterior: una sentencia que le exige revertir una ilegalidad urbanística, retrasos en los pagos a proveedores, el personal de la casa clamando que se dé solución a su temporalidad, una negligencia grave en el control de patrimonio soriano, y para colmo payasadas en los medios nacionales».