Los obispos españoles han dado luz verde en la Asamblea plenaria extraordinaria celebrada en Añastro al plan de reparación integral a víctimas de abusos en el seno de la Iglesia.
Una vez presentadas las líneas de trabajo a los obispos de la Plenaria, ha comenzado un diálogo entre los asistentes con diversas aportaciones y propuestas. Al finalizar el diálogo, el documento con las Líneas de trabajo, que incluyen el PRIVA, se han sometido a votación estos dos documentos junto con un tercer documento que se refiere a los Criterios orientadores para la reparación integral para las víctimas de abusos sexuales a menores de edad o adultos equiparados en derecho. Los tres documentos han sido aprobados sin ningún voto en contra.
El presidente de la Conferencia Episcopal Española, Luis Argüello, ha sido el encargado de comparecer ante los medios de comunicación para dar reporte de lo aprobado en esta mañana.
El arzobispo de Valladolid ha resaltado que este trabajo «no ha empezado hoy ni termina hoy» y ha calificado el encuentro entre los obispos españoles como «un pequeño humilde ejercicio de comunión juntos».
Mayoría de víctimas que no pertenecen a ninguna asociación
A lo largo de la rueda de prensa, monseñor Luis Argüello ha remarcado en varias ocasiones que la mayoría de víctimas de abusos no pertenecen a ninguna asociación y que en muchas ocasiones piden «discreción y lealtad». Resulta especialmente llamativo las veces que Argüello ha repetido que la mayoría de víctimas no están bajo la tutela de nadie. Ni de la asociación del ex diputado socialista Juan Cuatrecasas ni de ningún otra que no se sabe a cuántas víctimas representan y que pretenden marcarle el paso a los obispos españoles.
Algunas de esas asociaciones que tanto se quejaban porque los obispos no las recibían, hoy han decidido no acudir a la invitación de Argüello a participar en la Asamblea plenaria extraordinaria.
Monseñor Argüello ha confirmado que el pasado día 21 de junio se reunieron con 12 asociaciones de las cuales 6 son de víctimas de abusos y otras 6 que ofrecen acompañamiento. El presidente del episcopado español hacía hincapié en que como Iglesia tienen una obligación moral y subsidiaria con las víctimas.
Además, aunque el plan aprobado no es de obligado cumplimiento para las diócesis y congregaciones, Argüello ha incidido en que «siempre habrá una puerta común abierta«. Es la manera que el prelado vallisoletano ha encontrado para trasladar a las víctimas que en caso de que algún obispo o líder religioso le cierre las puertas pueden acudir a la CEE.
Respuesta de Argüello al Gobierno
Luis Argüello, fiel a su estilo de cuando ejercía como secretario general de la Conferencia Episcopal, no se ha achantado ante el embiste del ministro Bolaños que amenazaba casi con intervenir a la Iglesia para supervisar el plan de reparación a las víctimas de abusos. Argüello ha sacado pecho y ha respondido a Bolaños diciendo que «claro que sí hemos actuado unilateralmente, de motu propio y por iniciativa propia».
El líder del episcopado español hacia estas declaraciones para resaltar que ellos no tenían obligación de hacer todo esto (pero sí un deber moral) y por eso se han lanzado a desarrollar este plan sin pedir permiso al Gobierno que nada pinta en esta historia. «Aunque pueda parecer un reproche es un reconocimiento porque hemos decidido abrir una puerta» aseguraba Argüello.
Además, insistía en señalar que el plan aprobado es para responder a las víctimas y no al Gobierno a quien le piden una «leal colaboración» desde el respeto a las responsabilidades de cada uno. Argüello ha recordado al Gobierno de Pedro Sánchez que «deben respetar las reglas del juego» ya que «una Institución tiene derecho y deber de organizarse».
Las víctimas de abusos de laicos vinculados a la Iglesia
Por otro lado, el presidente de la Conferencia Episcopal ha confirmado que dentro de este plan no solo se contempla los abusos que puedan cometer sacerdotes y religiosos sino también los laicos vinculados a la Iglesia. Argüello, a la pregunta de este medio, aseguraba que profesores de colegios religiosos, catequistas o persona de Cáritas entran bajo estos parámetros por los que la Iglesia ahora puede juzgar a un laico. Argüello ha resaltado que ahora los laicos «son contemplados en función de su situación ministerial».
El arzobispo de Valladolid ha eludido responder directamente si considera un exceso en sus funciones que la Iglesia juzgue a un laico al ser preguntado por el conocido ‘Caso Gaztelueta’ por el cual la Iglesia juzga por primera vez a un laico y cuyo juez, José Antonio Satué, aguardaba cómodamente en un sofá de Añastro mientras revisaba su móvil.
Ayuda a Infovaticana a seguir informando