Manuel Monteiro de Castro es Cardenal de Portugal. Fue Penitenciario Mayor de la Iglesia Católica hasta 2013, uno de los cargos más curiosos del Vaticano.
El Cardenal Manuel Monteiro de Castro, nació el 29 de marzo de 1938 en Santa Eufémia de Prazins, Portugal y fue Penitenciario Mayor de la Iglesia Católica hasta 2013, esto es, el encargado por el Papa de perdonar los pecados especialmente graves.
La formación de Manuel Monteiro de Castro
Después de estudiar filosofía y teología en el Seminario de Braga, fue ordenado sacerdote en 1961. Le enviaron a Roma para completar sus estudios en el año 1964 a la vez que era miembro de los servicios generales del Concilio Vaticano II.
Figura internacional
En 1972 fue enviado a la delegación apostólica en Vietnam y Camboya, donde permaneció hasta 1975. Más tarde trabajó en Australia, Papua Nueva Guinea, Méjico, Bélgica y Luxemburgo hasta el año 1985, cuando Juan Pablo II lo nombró arzobispo titular de Benevento y, al mismo tiempo, el Nuncio Apostólico en Trinidad y Tobago, Bahamas, Barbados, Belice, Dominica, Jamaica y Santa Lucía, así como delegado en otros territorios de las Indias Occidentales.
En agosto de 1990 se le confiaron las nunciaturas de El Salvador y Honduras, donde se mantuvo hasta 1997. Fue una época muy complicada en su trayectoria, ya que estuvo en el momento de plena ofensiva de la guerrilla salvadoreña. De 1998 al año 2000 fue Nuncio Apostólico en Sudáfrica, Namibia, Lesotho, Swazilandia y delegado apostólico en Botswana. Este último año el Papa Juan Pablo II le nombró nuncio de España y el Principado de Andorra donde estuvo hasta 2009.
Su papel como nuncio en España
Tuvo que mediar en las duras relaciones que estableció el gobierno de Rodríguez Zapatero con la Iglesia en España, durante su primera legislatura; tanto, que el cardenal Monteiro de Castro le llegó a ofrecer al presidente tomar “un caldito” en la Nunciatura. Vivió momentos complicados en España, ya que algunos le tachaban de “tibio” y “blando” e incluso se le llegó a insultar desde la radio de los Obispos -cadena COPE- llamándole “masón”, todo esto propiciado por su actuación -o no actuación- ante el gobierno de España que en esa época estaba realizando reformas mal llamadas progresistas.
En 2009 le nombraron Secretario de la Congregación para los Obispos y unos meses después del Colegio de Cardenales. El 5 de enero de 2012 el Papa Benedicto XVI le nombró Penitenciario Mayor de la Iglesia Católica y un mes después, en el consistorio de febrero de 2012 le creó Cardenal con el título “Santo Domingo de Guzmán”.
El Papa Francisco aceptó su renuncia por motivos de edad el 21 de Septiembre de 2013.