Obispo emérito de Tarazona. Eusebio Hernández Sola nació el 29 de julio de 1944 en Cárcar, Navarra.
Ingresó en el seminario menor de la Orden de Agustinos Recoletos, en Lodosa, Navarra, el 12 de septiembre de 1955, pasando, en 1958, al colegio de Fuenterrabía, Guipúzcoa, donde completó los cursos de humanidades y los estudios filosóficos. A continuación, en 1964, ingresó en el noviciado de Monteagudo, Navarra, donde hizo la primera profesión el 30 de agosto de 1964, pasando posteriormente a Marcilla, Navarra, donde cursó los estudios teológicos de 1964 a 1968. Aquí hizo la profesión solemne (1967); fue ordenado diácono (1967) y presbítero el 7 de julio de 1968.
Su primer oficio pastoral fue el de asistente en la parroquia de Santa Rita de Madrid, comenzando al mismo tiempo sus estudios de Derecho Canónico en la Universidad de Comillas, de la Compañía de Jesús, en Madrid.
En 1969 fue traslado a la residencia universitaria Augustinus, que la orden tenía en aquella ciudad. Se le confió la misión de director espiritual de sus universitarios -unos 160-, continuó sus estudios de derecho canónico, que concluyó con el doctorado en 1971, e inició los de Derecho en la Universidad Complutense de Madrid (1969-1974).
Durante el curso 1974-75 hizo prácticas jurídicas en la universidad y en los tribunales de Madrid. El 3 de noviembre de 1975 inició su trabajo en la Congregación para los Institutos de vida consagrada y Sociedades de vida apostólica.
Desde 1976 fue el director del departamento de formación y animación de la vida religiosa, siendo el responsable de la elaboración y publicación de los documentos de la Congregación. Además dirigió una escuela bienal de teología y derecho de la vida consagrada, en la que formaba equipo con algunos de los principales teólogos de la especialidad. Desde 1995 fue jefe de oficina del mismo Dicasterio.
Por razones de trabajo, los superiores de la Congregación le confiaron multitud de misiones en numerosos países del mundo. También ha sido notable su aportación en la organización de las distintas asambleas plenarias de la Congregación, así como en los últimos documentos emanados de la Congregación.
El 29 de enero de 2011 fue publicado su nombramiento por el papa Benedicto XVI como obispo de Tarazona. Fue consagrado como tal el 29 de marzo del mismo año en el Monasterio de Santa María de Veruela por Manuel Monteiro de Castro, secretario para la Congregación de Obispos, acompañado por el cardenal Francisco Álvarez Martínez y por el nuncio apostólico en España, Renzo Fratini.
El 29 de enero de 2011 fue publicado su nombramiento por el papa Benedicto XVI como obispo de Tarazona. Fue consagrado como tal el 29 de marzo del mismo año en el Monasterio de Santa María de Veruela por Manuel Monteiro de Castro, secretario para la Congregación de Obispos, acompañado por el cardenal Francisco Álvarez Martínez y por el nuncio apostólico en España, Renzo Fratini.
La diócesis turiasonense remonta sus orígenes a la Hispania romana, sin que se pueda precisar con exactitud su inicio cronológico. Varios de sus pastores firmaron actas de los concilios toledanos del siglo V. Entre los antecesores de monseñor Hernández hay que dstacar a san Prudencio, san Gaudioso, fray Diego de Yepes, confesor de santa Teresa, y el que durante la Guerra Civil española (1936-39) sería arzobispo primado de Toledo, don Isidro Gomá y Tomás.
El territorio tradicional de la diócesis de Tarazona incluía parte de las actuales provincias de Zaragoza, Navarra, Soria y La Rioja. Los límites diocesanos de Tarazona se modificaron en 1956. Entonces quedó reducida a la zona noroeste de la provincia civil de Zaragoza. Tiene una extensión de 4.514 km2, y una población de unos 80.000 habitantes.
Pertenece a la provincia eclesiástica de Aragón, junto con Zaragoza, Huesca, Barbastro y Teruel y Albarracín. Pastoralmente, se distribuye en 140 parroquias, con un contingente variable de feligreses. Abundan los puebles de menos de 300 habitantes. Para su atención cuenta con 80 sacerdotes en activo y 17 jubilados. Otros 23 residen fuera de la diócesis. Hay también 18 comunidades de religiosas y 6 monasterios de clausura. Los seminaristas mayores son 8 y unos 380 los catequistas.
Sobre el fundamentalismo religioso dijo en una ocasión “El fundamentalismo es lo contrario al diálogo interreligioso. Es la utilización de la religión por razones egoístas, de poder, para conseguir objetivos económicos. Los fariseos eran fundamentalistas hipócritas ya que utilizaban la religión con fines políticos, económicos, de prestigio”.
El 28 de junio del 2022 pasó a ser obispo emérito de Tarazona.