En el acostumbrado mensaje al pueblo de Dios, al término de la 116 Asamblea ordinaria de la CEM, los obispos de México estimaron como un momento importante la reunión con quienes aspiran a ocupar la presidencia de la República a fin de establecer un diálogo permanente con el futuro gobierno.
Sin embargo, los prelados señalan que es de las mayores preocupaciones, la violencia que continúa causando estragos y dolor, señalan, además, que la Iglesia en México percibe “con tristeza que la impunidad, la corrupción, la injusticia, la pobreza y la constante migración” continúan presente en las diversas realidades; no obstante, “somos muchos los mexicanos que anhelamos un México más unido, más seguro, más justo, más libre y más desarrollado”.
En esencia, y justificado por el “amor a México”, los obispos llaman a una participación responsable el 2 de junio a través del voto como misión de todos, además de emprender la construcción de paz, “esto nos exige tomar medidas colectivas, dejando de lado intereses o proyectos individualistas”.
El mensaje completo puede ser leído a continuación:
AMAR A MÉXICO: ORANDO, PARTICIPANDO Y CONSTRUYENDO JUNTOS LA PAZ