En un videomensaje por el segundo domingo de adviento, el arzobispo de Morelia, Carlos Garfias Merlos, agradece la cercanía de los fieles de la arquidiócesis quienes han seguido la evolución de su salud.
En mejores condiciones, Garfias mencionó estar aún en proceso de recuperación sintiendo, de forma especial, la cercanía de la Virgen, la Inmaculada Concepción, bajo la advocación Nuestra Señora de la Salud, venerada especialmente en la arquidiócesis de Morelia. Dirigió la invitación al cardenal Alberto Suarez Inda, a los obispos auxiliares, presbiterio y fieles, para unirse a la acción de gracias a la Santísima Virgen de la Salud este 8 de diciembre con un saludo especial dirigido a las parroquias bajo el patronazgo de la Inmaculada Concepción a las cuales Garfias Merlos invitó a unirse de forma especial a la acción de gracias convocada por ser la patrona de la arquidiócesis de Morelia
Al referirse a la proximidad de las fiestas guadalupanas, quien fuera vicepresidente de la Conferencia del Episcopado Mexicano acentuó le significado especial que tiene esta solemnidad para todos los mexicanos: “Ella, quien estivo en el origen de la evangelización de nuestros pueblos, está también con una presencia muy importante. Celebremos a nuestra Señora de Guadalupe ya con las procesiones y todo lo que se tiene tradicionalmente programado. Hagamos que Nuestra Señora de Guadalupe siga bendiciéndonos y siga llenándonos de la presencia de Su Hijo, Jesús, a través de las circunstancias que vayamos teniendo en nuestra vida”.
Flanqueado con una imagen del Venerable Tata Vasco y de Santa María de Guadalupe, el arzobispo remarcó la importancia de Santa María quien nos prepara en el adviento a recibir a Cristo en la Navidad. “Vivamos este adviento con mucha esperanza y dejémonos acompañar y sentir la ternura de la Santísima Virgen María”.
Al concluir este segundo mensaje después de su ausencia por el covid-19, el arzobispo agradeció las oraciones “expresando diferentes maneras de acompañamiento en estos días de rehabilitación y recuperación de mi enfermedad”.
Como en muchas partes de México, la arquidiócesis de Morelia venera a la Virgen Inmaculada bajo la advocación de Nuestra Señora de la Salud, imagen que fue introducida por Vasco de Quiroga en 1539, ocho años después del hecho guadalupano de 1531.