Don Luis Rodríguez: Como en Calanda, sólo la Virgen nos salvará

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Marco Tosatti

Queridos amigos y enemigos de Stilum Curiae, hace unos días encontré una copia de un mensaje del Prof. Ettore Gotti Tedeschi a nuestro Don Luis Eduardo. Y como pueden ver, algo muy hermoso nació para nuestro blog, y afortunadamente, lleno de esperanza para nuestro destino. Feliz lectura.

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“Querido Don Luis Eduardo, ¿por qué no escribe Ud. para Stilum Curiæ, una recomendación para nosotros los católicos, en éste momento?. Un consejo de consuelo y de esperanza del tipo: “¿por qué no hay nadie fuera de María, que nos pueda salvar?…”.

 

Querido Prof. Ettore Gotti Tedeschi,

Le agradezco por ésta sugerencia y trataré de darle una respuesta a través de Ella, LA INMACULADA, VIRGEN, MADRE, ASUNTA Y CORREDENTORA, MARÍA SANTÍSIMA.

Escribo hoy 27 de marzo delante de Nuestro Señor Expuesto en la Adoración. En el 4° aniversario del

Dies Natalis de la Madre Angélica, fundadora de EWTN, el coloso televisivo católico más grande del mundo. Alcanza más de 300 millones de telespectadores, desde el mismo lugar donde inició la religiosa clarisa pagando por horas de transmisión en la entonces naciente tv satelital, realizando sus producciones amateur desde el garage del monasterio.

Incluyo éste video que no tiene mucha calidad, como parte de la respuesta que intento darle. Desde hace diez años lo transmiten cada día: LA CORONILLA DE LA VERDADERA MISERICORDIA DIVINA. Ellos me pidieron realizarla, e hice participar a Jorge Mario Bergoglio, entonces no lo conocía para nada, y sólo por su dignidad como arzobispo de Buenos Aires. No sabía que él siguiese la misericordina ranheriana-kasperiana-kantiana-boffpachamaniana.

Escribo hoy pero en vistas al 29 de marzo, cuando si Dios y el querido genovés Marco Tosatti quieren, será publicado, en el 380° aniversario del MILAGRO DE CALANDA.

La pregunta del Prof. Gotti Tedeschi, y ciertamente él sabe la respuesta, es: “¿por qué no hay nadie fuera de María, que nos pueda salvar?…”.

Fuera del Verdadero y Único Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, no hay nadie entre el Cielo y la tierra como Aquella, la Nueva Eva, que en Cuerpo y Alma vive en Èl, que nos pueda mediar la Salvación.

Todos los santos precedentes a Ella, la esperaban. Todos los santos después de Ella, a través de Ella, al Cielo han ido.

Desde el Pecado Original, la esperaba toda la Creación llorando. Llegada, generó al Nuevo Adán, el Salvador, el Redentor. Dios encarnado Hombre. Verdadero Dios y verdadero Hombre.

El mismo Arcángel San Gabriel que anunció a Zacarías la Voluntad de Dios con su hijo Juan Bautista…que no tuvo dudas de la presencia del Ángel y en qué escenario…pero que dudó con su racionalismo a las indicaciones Celestes.

Con un discurso más corto, el mismo mensajero apareció seis meses después a la Inmaculada en su hogar en Nazaret, y respondió a las preguntas de Aquella que INMACULADA, predestinada desde siempre, Única en toda la Creación, no era diferente de todo el género humano en aquello como Dios nos crea a Él semejantes a todos los seres humanos en toda la Creación: con intelecto, capacidad para razonar y decidir, escoger, etc, en libertad; corazón para los sentimientos, alma destinada a la Vida Eterna.

En Ella como en ninguno: en Su mente, Dios Padre, en Su Corazón Inmaculado, Jesucristo y en Su alma el Espíritu Santo.

Por tanto no como Zacarías, profesor, doctor, sacerdote…y todo para dudar; porque él creía saber más que los planes divinos.

Es así que por su Humildad, Nuestra Señora que no dudó, pero no sabiéndo cómo hacer, preguntó al Divino Anunciante.

Otras muchas veces pasaba lo mismo, pero las respuestas no llegaban rápido, como lo fue en vez la Sombra del Espíritu Santo, cuando fecundó en Ella el Verbo hecho Carne. VERDADERO HOMBRE, VERDADERO DIOS. Y todo lo que no entendía lo conservaba en la memoria de Su Corazón y con paciencia llegaban las respuestas.

27 marzo 2020, he leído: aeropuerto de Madrid, con 1.100 vuelos promedio cada día, en éstos días de coronavirus-19, sólo 100 vuelos. Paralizada España como vuestra Italia, y también Venezuela desde donde escribo, por el mismo motivo, manipulado.

Termina marzo y en éste primer trimestre del año ya han sido asesinados con el aborto en los vientres maternos, nueve millones de niños. En vez muertos, no por el coronavirus-19 sino por graves enfermedades precedentes, especialmente ancianos, a los que ciertamente el virus les ha dado el golpe final, pero no llegan a diez mil en todo el mundo. Seguramente es grande el dolor y todo lo que haga falta para frenar este virus, pero ¿a nadie impresiona los nueve millones de niños asesinados con la ley, de éstos mismos gobiernos perversos?.

Llegamos pues al V Domingo de Cuaresma.  29 marzo 2020 y al 380° aniversario del Milagro de Calanda.

Miguel Juan Pellicer, nacido y Bautizado el 25 marzo 1617 (no 1917), en la Solemnidad del Anuncio de la Encarnación del Salvador, en Aragón, España. A los 19 años quiso dejar la casa paterna, en Calanda, para buscar nuevos horizontes; fue recibido por un tío que lo puso a trabajar en el campo. Cayó de la carreta tirada por los bueyes y la pierna derecha, literalmente quedó triturada debajo de una de las ruedas de hierro. Se necesitaban días para llegar a Zaragoza, entre los primeros hospitales de Europa, la mitad de la pierna ya gangrenada, le fue amputada desde bajo la rodilla.

El joven, por la vergüenza, no quiso regresar a su pueblito. Le permitieron pedir limosnas a la entrada de la Basilica de Nuestra Señora del Pilar.

“Pilar”, un pedazo de una columna de una casa de Zaragoza, cuyo nombre proviene de “Cæsaraugusta” porque entonces era parte del imperio romano, cuando en el año 42, el Apóstol Santiago llegó allí llevando el primer anuncio de la Salvación, con poco fruto inicial.

No fue con un fenómeno de aparición sino de bilocación, porque todavía no había sido Asunta en Cuerpo y Alma a los Cielos, sino que vivía en Éfeso, se le presentó la Inmaculada Virgen Madre de Dios y nuestra, para animarlo. Es así que es lo que recuerda la columna, el pilar, son éstos hechos reales, verdaderos.

Miguel cada día por dos años, antes de pedir limosnas, entraba en el santuario y delante del Pilar con la estatua pequeña de la Virgen, en el rito diario al subir llenas de aceite las lámparas votivas, él primero tocaba con los dedos aquel, ungiéndose el muñón aun no cicatrizado por completo, con devoción. Muchas veces el mismo médico que se la amputó lo regañaba, diciendole que la humedad del aceite no ayudaría a mejorar la pierna. Pero él con Fe insistía.

El párroco de su pequeño pueblo, Calanda, fue a Zaragoza para buscarlo y le imploró de parte de sus padres que regresara a su casa.

Lo convenció y así lo hicieron. Era el 29 de marzo de 1640, jueves antes del Jueves Santo…día que recuerda la Institución de la Sagrada Eucaristía, y por lo mismo, del Sacerdocio.

Por como andaban por entoces los tiempos, pasaban por aquellas regiones pelotones de soldados, y en su casa durmieron esa noche dos de ellos. Grande fue la conmoción con la llegada de Miguel Juan, y en la cena la guerra fue el único argumento; los soldados contaban de los muchos compañeros con cuerpos amputados por las tantas guerras.

Todos se fueron a dormir. Y como normalmente sucede, la última fue la madre. A los soldados los acomodaron en el cuarto de Miguel, y él junto a la cama de sus padres. Porque era muy humilde el hogar.

Ya todos dormían. Entró su madre a la habitación y antes de apagar el candelero vio que del cuerpo extendido sobre el piso, de las mantas salían dos piernas…creyó que hubiese habido una confusión, y que en vez del hijo fuera uno de los soldados. Despertó al esposo, pero comprobaron que se trataba de Miguel.

Trataron con dificultad de despertarlo del profundo sueño…una vez despierto les relató que soñaba viendo Nuestra Señora del Pilar que le había restituído la mitad de la pierna amputada…que fue lo que sucedió verdaderamente en la REALIDAD.

El hecho extraordinario fue verificado y para colmos en los tribunales de Zaragoza. Resultando uno de los milagros con mayores pruebas: con todos los testigos que intervinieron en la amputación, los que lo conocían porque lo veían en la Basílica del Pilar, etc.

Pero si Usted va a España, no digo hoy, porque no encontrará vuelos aéreos, y pregunta por “El Milagro de Calanda”, cuando mucho le responderá un anciano, y le dirá “¡Eso como el milagro de Calanda!”…como decir: una cosa inventada, falsa.

En la fiesta de N.S. del Pilar el 12 octubre de 1492 el genovés Cristóbal Colón llegó a nuestra América, de la que todas sus riquezas materiales en estos cinco siglos, no pagarían el tesoro que nos mandó Dios a través de Santa Isabel La Católica, iniciando la Evangelización de éste continente.

Y porque la mayoría de los católicos del mundo se encuentra aquí, no por casualidad el demonio en los últimos decenios (y cierto desde entonces) ha infiltrado virus peores que el actual de la China, tipo boff-pachamania.

Y también necesitó de uno como su amigo Bergoglio, que odia la Evangelización hecha por Dios iniciándo con Santa Isabel, que la única pasión que la movió hacia el proyecto presentado por Colón, y que primero fue rechazado por otras coronas como la de Portugal, fue la Salvación de las almas.

También como el Milagro de Calanda que hoy las mayorías ni conocen, y algunos desprecian, se inventó una leyenda negra sobre ella y la verdadera Evangelización en América…N. S. DE GUADALUPE DIXIT.

Hace dos meses tuve la extraordinaria Gracia de rezar y celebrar Santos Sacrificios en España, donde viví por años…en nuestra “Madre Patria”…justamente entre otros, en Zaragoza, ante Nuestra Señora del Pilar. Regresé en uno de aquellos

1.100 vuelos diarios pero que hoy son sólo 100 por el coronavirus-19. También en aquellos días la que dice ser vice-presidente de mi país, aterrizó sin permiso con un avión privado, en Madrid, pues tiene prohibición de entrada en la Unión Europea. Pero se reunió con compinches de Pedro Sánchez, entre otras, entregando ilegítimamente maletas, aseguran, llenas de nuestro oro…que luego es procesado en Turquía.

Es así profesor, que sólo Nuestra Madre que vive en Cuerpo y Alma en el Cielo, y que nunca nos ha dejado de guiar, socorrer en cada generación, y que llora mucho más por los millones de sus hijos abortados que por el coronavirus, sea en Su vida terrena, como cuando socorrió al Apóstol Santiago en Cæsaraugusta, sea hace 380 años restituyendo la pierna a Miguel Juan Pellicer…( y les invito a profundizar si no conocen éste prodigio, ya que el resto de la pierna fue sepultada, puesto entonces se tenía en alto la dignidad del cuerpo en vistas a la resurrección; pero no encontraron los restos, porque exáctamente le fue restituida la suya perdída). Sea hoy con ésta situación con la que han aterrorizado a los pueblos con los mass media y este virus, SÓLO ELLA -PORQUE ESTÁ EN LA SANTÍSIMA TRINIDAD- NOS PUEDE SALVAR, y donar la salud de mente y corazón. De nuestra parte solo espera que tengamos FE. El resto se dará por añadidura.

Luis Eduardo Rodrìguez Rodríguez.

(Dios me es Testigo que, al terminar de corregir éste escrito, me asomé a una de las ventanas de esta amadísima parroquia, y frente estaba éste joven parroquiano sin la pierna izquierda; y pido para él, para todos mis parroquianos, para todos nosotros en el mundo entero, la restitución de la FE, aquella nunca habida, aquella para muchos perdída, aquella para muchos debilitada, el milagro más importante y seguramente el más difícil…).

 

 

Comentarios
1 comentarios en “Don Luis Rodríguez: Como en Calanda, sólo la Virgen nos salvará
  1. Gracias por tarer este recuerdo de un milagro de los milagros der nuestra Madre la Virgen del Pilar, solo un imbecil, puede decir que este milagro es una utopia o que es falso, no creo que haya ningun otro milagro que haya sido mas estudiado e investigado que este, el cuadfro que se encuentra en el pilar y que sale al principio del video es de Sor Isabel Guerrra, la monja pintora, una monja de clausura que pintó a instancias de los canonogos este cuadro Un saludo desde Zaragoza

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