El día de la Inmaculada no tendría que ser un día con noticias, los nuevos medios hacen que los periodistas no tienen que estar en sus despachos para poder publicar y sus artículos pueden nacer incluso en sus lugares de descanso. El mundo está revuelto, lleva tiempo revuelto, y se está revolviendo mucho más. Estamos gobernados, o desgobernados, por una pandilla de incompetentes que piensan que controlando los medios son capaces de controlar a toda la sociedad. Los medios tradicionales están en manos de los nuevos órdenes que imponen sus relatos a golpe de millones y de esclavos bien pagados. Estamos ante un espejismo que necesita combustible para seguir vivo, para hacernos creer que son muchos y que los que no estamos alineados somos una minoría a extinguir.
Es una forma de actuar que no es nueva aunque tenga nuevas formas. Cuando Juan Pablo II realiza su primer viaje a su amada Polonia provoca una asistencia masiva que se propaga boca a boca. Los polacos no tenían otra información que la de los medios oficiales y empezaron a poner sus televisores encendidos mirando a la calle en sus ventanas. Esto no era un delito tipificado y a nadie se le puede detener por esto, era una forma de manifestar que no se creían nada del discurso oficial. Las grandes concentraciones, inesperadas, hicieron ver que los contrarios al régimen no eran tan pocos y manifestaron al mundo la debilidad de unos gobernantes, pocos y corrompidos, que estaban esclavizando a todo su pueblo.
Lo que estamos viviendo no es menor. Los grandes medios, bien regados por enormes cantidades de dineros, nos venden los nuevos órdenes y nos van recortando el ámbito de libertades hasta límites intolerables. Esto también sucede en la iglesia y lo sufrimos cada día. La encarnación de espíritu del concilio se está muriendo, está muerta y sus defensores van desapareciendo, no tienen sucesión. Vemos como nos van imponiendo obispos de un nivel humano y teológico ínfimo, encarnan una única virtud, la de obedecer ciegamente a quien deben todo lo que son. Incluso en los buenos católicos vemos un alejamiento de toda esta peligrosa e inútil clase aducida. Buscan, y todavía encuentran, sacerdotes que tienen las ideas claras y los intereses libres, en los que encuentran los sacramentos y la tranquilidad para vivir su fe. Estamos asistiendo a la aparición de una iglesia de las catacumbas, perseguida por los que en teoría son sus hermanos, es la semilla del evangelio para tiempos futuros.
Nuestros dirigentes están llenos de grietas de origen y sus habilidades son claramente visibles. Una de las tácticas más utilizadas es destruir todo lo anterior presentándose como la cima de la historia. Pretenden que olvidemos a Benedicto XVI, a Juan Pablo II… nos lo quieren presentar como cómplices de todos los males que nos afectan, es imposible, pero lo intentan cada día con persistencia. Tenemos una serie de artículos sobre la lucha de Juan Pablo II contra los abusos sexuales de menores o personas vulnerables en la Iglesia, nunca se trató de encubrir y lo que hoy se puede hacer se debe a sus normas radicales para tratar este tipo de delitos en la Iglesia: “en el sacerdocio y en la vida religiosa no hay lugar para los que hacen daño a los jóvenes”.
Después de la visita ad limina en 1993 de los obispos americanos, puso el dedo en la llaga que nadie quiere ver: «su problema es que no aplican la ley y borran la distinción que es necesaria para vivir en toda comunidad, y más aún en la vida de la Iglesia, oscurecéis el concepto del bien y del mal. Las malas acciones son neutralizadas por las relaciones públicas y nadie rinde cuentas”. En 1994, Juan Pablo II cambió la ley y extendió la edad de protección legal de las personas a los 18 años cuando se trata de abuso sexual, a 10 años después de que la víctima cumpla 18 años y recordó a los obispos estadounidenses que tenían que aplicar esta ley. Presiones hubo y muchas, hoy sabemos con claridad quienes las provocaron defendiéndose a sí mismos. El entonces cardenal Ratzinger dijo: «El otro bando ha ganado».
Hoy vemos en todos los medios las imágenes de las lágrimas del Papa Francisco en la Plaza de España. Las lágrimas, como las de San Pedro, son un hecho, los motivos apuntan a que fueron por Ucrania. “Virgen Inmaculada, hoy me hubiera gustado llevarte la acción de gracias del pueblo ucraniano, por la paz que desde hace tiempo le pedimos al Señor”. Su posibilidad, tan deseada, de mediación, de pasar a la historia como ‘el pacificador’, se desvanece. Sus amigos del ‘foro de Sao Paulo’ se van desmoronando por ladrones y golpistas, veremos cómo evoluciona la cosa, o es fácil y esperemos que no tengamos finales violentos. Dentro de la iglesia las cosas no están mucho mejor, sus desiciones nos ha llevado a una división insuperable que hace que tengamos dos iglesias, por lo menos. Motivos para llorar que le tocan de cerca hay muchos, Pedro lloró por su traición a Cristo, por su negación, sabemos el origen de sus lágrimas. ¿Por qué caen las lágrimas del Papa Francisco? Las lágrimas caer, caen, el porqué es otro cantar.
Nos ofrecen una serie titulada ‘la revolución del Vaticano II en imágenes’ que llega a su capítulo 53 con unos bailarines budistas en la catedral de Nápoles, el 15 de agosto de 2020, fiesta de la Asunción de la Virgen. La danza de Kandy es una celebración pagana que forma parte de un ritual budista para invocar a las deidades. Estas deidades adoradas por el budismo de Sri Lanka son demonios llamados Yakshas. Así, hasta 53, por ahora, una colección sin fin de barbaridades, con mucho espíritu conciliar, pero barbaridades.
El caso Rupnik sigue escribiendo nuevos capítulos. Hoy es Hans Zollner, también SJ, de doctrina de la fe que dice que el Dicasterio de la Fe, en el que trabaja “debe responder sobre las interrogantes que rodean el caso del P. Marko Rupnik, miembro de la Compañía de Jesús acusado de abusos». Asegura que desde la Compañía de Jesús, a la que él pertenece, “han dicho lo que podían decir y, por lo que veo, las explicaciones sobre a qué llegaron con la sentencia las debe dar el Dicasterio”. “Ellos son los que han determinado que los hechos han prescrito. No lo puede hacer la Compañía de Jesús, es competencia del Dicasterio”. Gianfranco Matarazzo, ex Provincial de la Provincia Euro-Mediterránea de la Compañía de Jesús dice que » hoy con el caso Rupnik nos aferramos a la prescripción y a esperar que todo pueda detenerse ahí». No faltan los que piensan que el “caso Rupnik” es “un tsunami de injusticia, falta de transparencia, gestión cuestionable, actividad disfuncional, trabajo personalizado, comunidad apostólica sacrificada al líder y trato desigual”.
Tenemos el memorial de Marco Fassoni Accetti, su texto completo, sobre el caso Orlandi, publicado de nuevo ante el interés suscitado por la serie sobre el caso. «El informe de interrogatorio de Marco Accetti: el polémico fotógrafo, explica cómo «Renatino», apodado «el empresario», participó en la desaparición de la ciudadana del Vaticano el 22 de junio de 1983″. Un código de silencio generalizado imposibilita las investigaciones fuera del Vaticano, no olvidemos que el actual juez único del estado Vaticano, Piganotone, es el que cierra el caso en Italia.
En el lenguaje coloquial ‘armar el belén’ tiene un sentido de armar un buen lio. En el Vaticano, pude ser una imagen de estos tiempos, tenemos cien belenes, pocos parecen para ilustrar los líos. Es una exposición que reúne obras creadas por artistas de todo el mundo, promovida por el «Dicasterio para la Evangelización», bajo el lado izquierdo del columnato de la Plaza de San Pedro. Se exponen belenes ambientados en zonas de guerra, como el realizado en Ucrania por sor Teodosia Polotniuk y la Natividad recreada en el sótano de la planta metalúrgica de Azovstal’, en Mariupol. No puede falta el cambio climático y la tragedia de la inmigración en el Mediterráneo.
Hoy nos unimos a nuestros amigos mexicanos en las vísperas de la Virgen de Guadalupe, celebrando la fiesta de Juan Diego.
«¿A quién compararé esta generación?»
Buena lectura.
Hay diversas Iglesias…
Los sedevacantistas, que van de Pablo VI en adelante y otros de Francisco en adelante…
Los liturgismos, que van desde antes de la reforma de la misa tradicional en 1955 por Pío XII, los que aceptan esta reforma, y los partidarios excluyentes de la Misa Nueva.
En fe y moral, como mínimo, el luteranismo del Camino Sinodal alemán, los progres moderados y los tradicionalistas, como mínimo…
Es un pequeñito fin de un mundo y de un tiempo, los obsoletos y caducos 1950 y 1960…
Lágrimas- de cocodrilo-
en plaza de España ,leo…
Con regusto a fariseo;
de La Plata, no del Nilo…
En ese falsario llanto
que-cual actor-,improvisa.
..,
la guerra sólo divisa
y no el aborto,¡que es tanto!
Esas trincheras feroces
de carne en que,masacrados,
mueren vilmente abortados
con mecanismos atroces…
El histrión de aquellos lares
en vano hace su comedia.
Pues hoy la mayor tragedia
se vive en nuestros hogares.
Que deje de ver la paja
en un mundo harto remoto,
cuando el nuestro anda tan roto
que a sus propios hijos raja…
Chronos comiendo a sus hijos
preludiaba nuestros días:
Nuestras pérfidas sangrías …
Nuestros nuevos crucifijos…
«Paz» de opereta y de samba,
que quiere ocultar su sangre
con una impostada hambre
de justicia…¡en las quimbambas!.