Día de los santos inocentes, día de las bromas en España y muchos países de tradición española. En Italia es el 1 de abril, los peces de abril. Ayer tuvimos audiencia, media aula, la cosa no da para más ni en festivo y con Roma muy llena de turisteo de fin de año. La situación de la salud del Papa Francisco sigue siendo noticia y un especialista, Ferrara, nos da su opinión: «visto por alguien que no es su médico personal, el pontífice parece anciano, pero con capacidades cognitivas y en parte motoras, camina con ayudas satisfactorias«. » Ciertamente, el personal médico-sanitario de alto perfil que está junto al Papa Francisco tiene un papel importante para mantener las actuaciones de nuestro pontífice». El Papa Francisco inició un nuevo ciclo de catequesis dedicado a los vicios y las virtudes. «Nunca se debe hablar con el diablo», «nunca se debe discutir con el diablo. Es astuto e inteligente. Para tentar a Jesús utilizó incluso citas bíblicas». «Reconoce el límite, no te sientas dueño de todo, porque la soberbia es el principio de todos los males».
No está el horno para bollos, ni el día para bromas, el rebaño está desorientado, buscadamente desorientado y los más ilustrados, hartos de que nos tomen el pelo. El blog hermano de ‘de profesión, cura’, lo explica muy bien y evitamos entrar en repeticiones: «Cada cual tenemos nuestras ideas que, equivocadas o no, son nuestras y punto final. Lo que a un servidor le molesta no son las discrepancias, sino la sensación de que alguien te está tomando el pelo. Esta sensación, por partida doble, la tengo en este momento». El contenido se refiere a dos tomaduras de pelo actuales, ejemplos hay en todo tiempo y momento: las ‘tuchadas’ y la manipulación de los datos.
La realidad es tozuda y, por mucho que el amigo Tucho se empeñe, todos hemos entendido, urbi et orbi, a los que va su “Fiducia supplicans”. Tanto los diestros como los siniestros de forma universal no entienden lo que el dice que tenemos que entender y todos lo entienden en la misma y única disección posible, sin fisura alguna. Los unos encantados por ser bendecidos y elevándolo a la categoría más que sacramental y los otros viendo que es así. Nuestro Tucho se lo debe hacer mirar por uno bueno, en Roma los tiene, y cuanto antes lo haga, antes evitará meter a su protector en estas ciénagas que siempre que se revuelven emiten muy desagradables olores y pueden alertar demasiado a los buenistas desprevenidos. Siguen es cascada las declaraciones de muchos obispos sobre la monumental metedura de pata del Tucho.
Y tenemos recogida de firmas para que el Papa Francisco retire la “Fiducia Supplicans”. «A pesar de la falta de valor jurídico y moral de la declaración en cuestión, reconocen su fuerte impacto mediático y, en consecuencia, están seriamente preocupados por los motivos que se enumeran a continuación». «No es en absoluto lícito abusar del santísimo Nombre de Dios para aprobar públicamente, con un acto litúrgico, lo que Él condena». «La dignidad de la Iglesia católica, columna y fundamento de la verdad (1 Tim 3, 15), es vulnerada de manera intolerable a los ojos de los no católicos, no cristianos y no creyentes». «Muchos los católicos, clérigos y laicos, se sienten confundidos o desviados en conciencia por el hecho de que ministros sagrados estén autorizados a impartir bendiciones a personas que viven permanentemente en manifiesto pecado mortal». «En varios países del mundo, los sacerdotes que se niegan a impartir las bendiciones autorizadas por la declaración Fiducia supplicans pueden ser procesados por la justicia civil e incluso correr el riesgo de prisión». «Apelamos al Romano Pontífice para que retire o corrija la declaración Fiducia supplicans».
De Mattei analiza las consecuencias de la Fiducia supplicans de cara al próximo cónclave. «El documento está firmado ex audientia por el Papa Francisco, para que sea definitivo. Normalmente, el documento debería ser expresión del Magisterio ordinario de la Iglesia, pero no lo es, precisamente porque, al alejarse de la enseñanza de la Iglesia, pierde todo carácter de «magisterialidad». Fiducia supplicans constituye un verdadero «manifiesto bergogliano», debido a una característica específica, que ya formaba parte del modernismo: afirma la fidelidad al Magisterio de la Iglesia, mientras que con una acrobacia intelectual sin escrúpulos lo derriba».
«Fiducia supplicans niega que una relación homosexual pueda jamás equipararse al matrimonio, pero al autorizar la posibilidad de bendecir esa relación, la aprueba, contradiciendo en este punto al Magisterio, que siempre ha condenado el pecado contra natura. Afirma, en un tono tranquilizador, que la bendición es extralitúrgica, pero como sólo puede ser bendecido (bien dicho) lo que es bueno en sí mismo, admite con ello la bondad intrínseca de la relación homosexual. Niega bendecir la relación homosexual como tal, pero como lo que se bendice no es una sola persona, sino la supuesta “pareja”, a la que no se le pide que ponga fin a la relación ilícita, bendice el vínculo que une a los dos. Los “socios” son pecadores».
«Se podría decir que es una minoría los obispos que la rechazan, y en realidad lo es, pero los obispos que se han adherido explícitamente a la Declaración son una minoría aún menor. La gran mayoría de obispos y cardenales no se expresaron o, cuando lo hicieron, sugirieron interpretar Fiducia supplicans en una línea de coherencia, y no de discontinuidad, con el Catecismo de la Iglesia Católica y con el anterior Responsum. Todo puede reforzar el llamado «Tercer Partido» oscilante entre las dos minorías que se enfrentarán en el próximo cónclave: por un lado, el polo fiel a la enseñanza de la Iglesia, por otro, es el polo fiel al “nuevo paradigma”. El choque se producirá en una situación de «sede vacante», cuando el Papa Francisco ya habrá abandonado el lugar, los medios de comunicación guardarán silencio y cada elector se encontrará solo ante Dios y su propia conciencia. Lo suficiente como para hacernos pensar que el próximo cónclave será complicado, contrastado, nada corto y quizás no exento de giros».
Entrevista, la tercera de Fernández, en defensa de la declaración: «Si el texto se lee serenamente, puede advertirse que sostiene con mucha claridad y sencillez la enseñanza católica de siempre sobre el matrimonio y la sexualidad. ¿Por qué plantean reparos a esta bendición? «Lo que plantean es la inconveniencia de realizar en sus contextos regionales bendiciones que fácilmente se confundirían con una legitimación de una unión irregular. A esto se agrega que en África hay legislaciones que penalizan con la cárcel el solo hecho de declararse gay, imagine usted una bendición. En realidad, es propio de cada obispo local hacer ese discernimiento en su diócesis o en todo caso dar ulteriores orientaciones».
«El tema central del documento es el valor de las bendiciones «no litúrgicas», «no ritualizadas», que no son un casamiento, ni siquiera son un «visto bueno» ni una ratificación de nada. Son solo la respuesta de un pastor a dos personas que piden la ayuda de Dios. Y en ese caso el pastor no pone condiciones». Algunas personas lo han celebrado, como un primer paso hacia la legitimación doctrinal del divorcio o del matrimonio entre personas del mismo sexo. ¿Es correcta esta percepción? «Es totalmente incorrecta esa percepción, y quien lo dice o no ha leído el texto o tiene «mala leche», permítame la expresión. La declaración afirma claramente y hasta el cansancio que se trata de bendiciones no ritualizadas, de manera que no se interpreten como un matrimonio».
A algunos les parece muy fluido el amigo Zuppi en sus declaraciones: «El Evangelio no es una destilación de la verdad». Si el matrimonio estorba, y también el sacerdocio, no puede ser menos el texto del Evangelio revelado. El superior de los jesuitas, el padre Sosa, nos advirtió hace un tiempo: «En tiempos de Jesús no había grabadora». La catofluidez nos va invadiendo y cada de vez que nos intentemos fundamentar nuestra fe en el evangelio nos dirán: ¿Pero realmente dijo eso? . El caso Casarini y las afirmaciones d Zuppi siguen causando polémica. «Casarini ha presentado una denuncia contra sus acusadores. Veremos cómo termina». «La justicia aclarará las cosas». No suenan como las palabras de un sacerdote, suenan como las palabras de un abogado. «Los católicos no están nada entusiasmados con esta Iglesia que es indiferente a la persona y a la palabra de Cristo: en misa ahora sólo veo cabezas blancas y seminarios vacíos, leo que están en subasta». «Este último escándalo del dinero católico utilizado para financiar la islamización (más desembarcos, más mezquitas, en perspectiva) no aumentará el importe de la ofrenda dominical. Pero Zuppi no ve el peligro de disgustar a otros fieles y beatifica a Casarini contra todo y contra todos».
La Fraternidad Sociedad San Pío X cuenta en la actualidad con 3 obispos: Fellay, de 65 años, Tissier de Mallerais, de 78 años, y Galarreta, de 66 años. «El Superior General nos pidió preparar a los fieles para la consagración de nuevos obispos, sin precisar la fecha. De hecho, nuestros prelados están envejeciendo y su ministerio se está expandiendo por todo el mundo». «Por tanto, debemos prepararnos para esta nueva persecución, que puede ser beneficiosa porque nos obligará a profundizar en los motivos de nuestra batalla. […] Está claro que es el Papa quien tiene jurisdicción universal sobre todos los cristianos, y es por tanto él quien confía una parte del rebaño a cada obispo, quedando responsable ante Dios, y esto es de derecho divino. Pero la elección de los obispos es de derecho eclesiástico […). «El rechazo de los obispos a la Tradición pertenece al derecho humano, mientras que la salvación de las almas pertenece al derecho divino. De ello se deduce que en caso de grave necesidad para las almas del mundo entero, se puede e incluso se debe ir contra una ley humana para salvaguardar la ley divina».
Todas las monjas de la Comunidad de Loyola, cofundada por Rupnik y por Ivanka Hosta y recientemente disuelta por el Vaticano, volverán al estado laico. Una especie de confirmación de que nunca ha existido un carisma auténtico, que según los votos tomados no tiene validez reconocida. Los detalles de la medida, que no han sido publicados, el comisario de la Comunidad de Loyola, el obispo auxiliar de Roma Daniele Bibbiari, dice que se establecerá un fondo para ayudar a las mujeres que pertenecían a la comunidad en el momento de su disolución. Hasta la fecha no hay ni rastro de juicios, sentencias o condenas contra Rupnik, a pesar de que el Papa Francisco decidió suspender la prescripción de los presuntos abusos sexuales denunciados, posibilitando así un juicio.
Y terminamos con la noticia de la presencia de Monseñor Georg Ganswein , ex secretario privado de Benedicto XVI y ex prefecto de la Casa Pontificia, en Italia. Tras la orden del Papa Francisco , tuvo que abandonar el Vaticano y regresar a su diócesis natal de Friburgo sin deberes pastorales específicos. Regresará a Italia para el primer aniversario del fallecimiento de Benedicto XVI, fallecido el pasado 31 de diciembre. Para la fiesta de la Epifanía se le espera en Bérgamo, en la parroquia del Sagrado Corazón, por invitación del párroco, don Daniel Boscaglia . La fecha coincidirá con el undécimo aniversario de la ordenación episcopal de Mons. Ganswein.
«Levántate, coge al niño y a su madre y huye a Egipto…»
Buena lectura.