Hoy las noticias son muchas y salimos con una ‘Specola de la sera’. En la audiencia del miércoles, Francesco Tarantino saludo al Papa Francisco. Nació con una patología rara, la enfermedad de Hirschsprung, que afecta a uno de cada 5.000 niños. A lo largo de los años se ha enfrentado varias hospitalizaciones y cirugías: «Es por eso que ahora, en el hospital, quiero volver como un ‘superhéroe’, para dar fuerza y consuelo a los que aún enfrentan su camino». Hemos visto a Libero Milone , el ex auditor , primero y casi último del Vaticano, defenestrado y casi arrestado, acercarse al tribunal del Vaticano con sus abogados. No vemos nada publicado, veremos los próximos días.
Uno de los elementos que más me llama la atención en este período es el desprecio soberano del método científico por parte de quienes lo proponen como defensores. Lo hemos visto con el Covid-19 y con las mascarillas. Desde hace treinta años la temperatura baja, pero los interesados gritan el calentamiento global sin escuchar lo que dicen los científicos honestos. Estamos ante una religión, con sus grandes sacerdotes, sus vestales, la multitud asustada y adoradora, los chivos expiatorios a los que sacrificar.
Comentario de Gotti Tedeschi en La verità sobre «los riesgos del progresivismo». «Ha estallado una guerra universal contra el “no progresismo sostenible”, se desconfía de quien no es un progresista sostenible y se le “castiga” como enemigo de la humanidad. Incluso son castigadas naciones calificadas como no progresistas». «Y por eso, como son principalmente los católicos los que señalan esta contradicción, son ellos los que sufren los castigos previstos». «El progresismo al que quiero referirme en esta reflexión es aquel que pretende imponer un sistema socio-económico-político-moral perfecto, o al menos el mejor posible, mediante la aplicación de una serie de políticas reformistas e innovadoras basadas en el progreso científico-técnico (sostenible), que sin duda favorecerían la condición humana (en forma sostenible).
En este sentido, el progresismo se convierte progresivamente en una ideología modernista, inmanente y sostenible, pero que debe negar lo trascendente, porque es insostenible por definición». «Los enemigos combatidos por el progresismo son, pues, el libre albedrío (subjetivo e irracional), la visión antropológica cristiana y lo trascendente». «La religión que se opone al progresismo proponiendo la Revelación, la búsqueda de la Salvación, la dignidad sagrada de la criatura humana, las Verdades eternas, etc., debería entonces ser reducida a una “secta” peligrosa e “insostenible” y puesta bajo control».
“El Club de Roma representa la estructura de mando de los Illuminati.». «El Club de Roma moderno no es más que una sucesión continua e ininterrumpida de sociedades secretas cuyo objetivo es la destrucción de la libertad». Es un organismo dedicado al establecimiento del Nuevo Orden Mundial en el que gobernarán los llamados pocos privilegiados, el Comité de los 300. El libro del Dr. Coleman «La Jerarquía de los Conspiradores: El Comité de los 300» (1991), nombra a los «miembros pasados y presentes del Comité de los 300». La religión básica seguida por el Club de Roma es el gnosticismo y el culto de los bogomilos y cátaros. «Los miembros de la monarquía británica creen firmemente en estas «religiones» y, en términos generales, es justo decir que ciertamente los miembros de la familia real no son cristianos».
No sabemos si el rey Carlos, el de Inglaterra es masón o no lo es, hacemos referencia a lo que vemos publicado y parece que oficialmente no lo es, pero, sin duda, está muy a favor de los nuevos órdenes, y posiblemente, si no lo estuviera, ya le habrían montado una abdicación, cosas mayores hemos visto. La historia de la familia real británica y la visión de Carlos sobre «The Great Reset» es poco conocida. La eugenesia es un conjunto de creencias y prácticas que tienen como objetivo «mejorar» la calidad genética de una población humana. La aplicación más conocida de la eugenesia se produjo en la Alemania nazi en el período previo a la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto. Después de la Segunda Guerra Mundial, la noción de eugenesia fue ampliamente considerada como repugnante, pero no ha desaparecido, sólo ha cambiado de nombre. El nuevo camino de la eugenesia es el transhumanismo, que es un intento de manipular la conciencia y la memoria y también está relacionado con la despoblación. El ex oficial de inteligencia y autor de varios libros, el Dr. John Coleman, llegó al corazón de la agenda transhumanista y la describió como satánica.
Interesante entrevista a Diego Fusaro, realizada por Miguel Angel Quintana Paz, interesante por el entrevistado y por el entrevistador. Es uno de los pensadores italianos más polémicos de la actualidad. Heterodoxo y ecléctico, anticapitalista y defensor del soberanismo, contrario a la globalización, a la Unión Europea, al relativismo y a las teorías de género. Fusaro argumenta en la entrevista que la Iglesia católica, bajo la dirección del Papa Francisco, ha olvidado el valor de la verdad y de la trascendencia -en contraposición a su antecesor, Benedicto XVI, defensor de la tradición y de lo sagrado-, y corre el peligro de disolverse en la civilización de los mercados y de la cultura liberal-progresista. Afirma que la apertura al mundo emprendida por Bergoglio acabará destruyendo a la Iglesia «como la perestroika de Gorbachov acabó con el comunismo».
«A mi juicio, el buen cristiano en la nueva iglesia liberal progresista de Bergoglio es el buen consumidor. La de Bergoglio y la nueva iglesia liberal progresista es una fe de bajo coste. Para ser un buen cristiano debes creer en la globalización capitalista, debes estar en contra del soberanismo y del populismo, debes estar a favor de los puertos abiertos a la inmigración masiva. Es decir, es el mismo mensaje de la globalización neoliberal, pero situado en el ámbito teológico. Así, la iglesia de Bergoglio se convierte en un megáfono del pensamiento único, política y teológicamente correcto».
«Creo que la iglesia de Bergoglio se está suicidando en la sociedad de consumo. La de Ratzinger, en cambio, se convierte hoy en un pequeño rebaño casi semiclandestino, que se organiza, no cede. En Italia hay varios movimientos que se oponen a la nueva iglesia de Bergoglio y, por tanto, el cristianismo verdadero, el de Ratzinger, hoy se encuentra en la oposición al poder financiero y liberal progresista. Ratzinger ya lo teorizó hace años».
«En los discursos de Bergoglio realmente no hay nada trascendente, si lo escuchas hablar parece o el exponente de un partido liberal progresista que habla de puertos abiertos y de apertura comercial, o el operador de una ONG que habla de cómo acoger a los inmigrantes. Y el capitalismo no quiere acoger, lo que quiere es explotar a los recién llegados como Marx ya había entendido…». «Claro, la nueva iglesia liberal progresista de Bergoglio es una iglesia líquida, es una iglesia fluida, es una iglesia que se modela a la manera de las demandas del mercado». » Bergoglio quiere hacer una perestroika de la Iglesia, abrirla al mundo, hacerla progresar, pero haciéndolo así la destruye como Gorbachov hizo con el comunismo».
Y terminamos nuestra ‘Specola de la Sera’ en Roma, en el «Regina Mundi», donde se conserva la camiseta empapada de sangre que llevaba San Juan Pablo II el 13 de mayo de 1981. La Casa «Regina Mundi», es la antigua Casa Provincial de las Hermanas de la Caridad, entre el Vaticano y el Gemelli. Esta particular reliquia la recibieron en el año 2000 de manos de Anna Stanghellini, enfermera del Policlínico Gemelli. En 1964, cuando era joven, Anna Stanghellini vino aquí al noviciado y se quedó cuatro meses. Al principio pensó en convertirse en Hija de la Caridad, pero luego se dio cuenta de que ese no era su camino. No se casó y tomó un pequeño apartamento cercano. Cuando se retiró se encontró completamente sola y en 1996, pidió vivir su vejez con nosotras. Trajo consigo sus pocas pertenencias, incluido un paquete de toallas que guardaba en su casa desde el día del intento de asesinato de Juan Pablo II. Una noche, en marzo de 2000, me pidió que la acompañara a su habitación, sacó del armario un pequeño bulto blanco con un sobre y me dijo: «Aquí está la camisa que llevaba Juan Pablo II el día del atentado».
Para no perder un tiempo precioso, la camiseta de algodón de Wojtyła fue cortada y tirada al suelo junto con la gasa empapada en sangre. Anna no tenía ganas de tirar la camiseta: primero la envolvió en una gasa limpia, luego en una toalla blanca y la metió en su casillero, sin decir nada a nadie. Lo conservó hasta que decidió dármelo en el año 2000. Decidimos conservarla mejor, así que pusimos la camiseta en un lugar seguro: en un marco sellado, protegida por un vidrio. Tenemos la declaración escrita de Stanghellini certificando la autenticidad de la prenda. Yo también escribí una declaración donde conté todo lo que me pasó. Tras la muerte de Anna en 2004 y la desaparición de Juan Pablo II, decidí mostrar la memoria del Papa en el Vaticano para obtener un certificado de autenticidad. Al final decidí ir al Vaticano, a ver al Arzobispo Piero Marini, Maestro de ceremonias litúrgicas pontificias. Monseñor me pidió que dejara la camisa, agregando que ese objeto no nos pertenecía. No estuve de acuerdo con él y respondí: «Este objeto ha sido guardado y entregado aquí». Pero al final lo dejé con un gran dolor, porque estaba convencida de que jamás recuperaría ese preciado recuerdo. Unos días después, el Maestro de Ceremonias me llamó para pedirme que recogiera la camisa papal. Corrí al Vaticano para recuperarla.
«Como el Padre me ha amado, así os he amado yo; permaneced en mi amor.»
Buena lectura.
Cuando todo está perdido…;
Cuando lo humano enloquece…;
Cuando la hierba no crece…;
Cuando el mundo anda podrido…,
con un esfuerzo infinito
-por titánico y postrero-
hay que afirmar Lo Primero
que el corazón lleva inscrito.
Y a destiempo,hora tras hora,
gritar a los cuatro vientos
que no habemos más Cimientos
que el Dios que dentro nos Mora…
Nuestra nada se compensa
tan sólo con Quien Es SER.
Nuestro sucio acontecer,
con Quien Es Pureza Inmensa.
Nuestra tristeza irredenta,
con Quien Es Suma Alegría.
Nuestra maldad a porfía,
con Quien jamás Hace afrenta.
Nuestra precaria salud,
con Quien Es Salubridad.
Nuestro final en la cruz,
con Quien Es La Eternidad…
Muchísimas gracias,querido Specola,por dar cancha en tu leidisimo escaparate a Diego Fusaro,un «chavalín » que está siendo como el última eslabón de esa estupenda cadena filosófica que se inició con los griegos.Da gusto escucharle,y verle,como razona y se enfrenta en estudios radiotelevisivos a toda una caterva de vejestorios que podrían ser sus «nonos»,a los que desarma y enfurece con su implacable e irrebatible uso de la razón.
Pero seguir a ese crío conlleva conocer también a algún que otro jovenzuelo italiano también brillantisimo; como Andrea Cioncci,o incluso Alexandro Minutella(algo más taĺludito.
Prometedores ejemplares de una generación que, tal vze por estar de vuelta de todo,llega pisando fuerte.