Se anuncia el viaje del Papa Francisco a Myanmar, también conocida por Birmania, y a Bangladesh. No cabe duda que una viaje de frontera en dos países de minoría católica, porcentajes siempre menores del 4%. Myanmar es de tradición mayoritariamente Budista y Bangladesh esta creado por ser de mayoría musulmana, países muy poblados como sucede en oriente, entre los dos suman más de 200 millones de habitantes. Dejando aparte otras polémicas, el futuro inmediato de Europa está marcado por el Islam y la gran influencia de oriente en donde está la mayor parte de la población del mundo. Son además dos países vecinos de la gran China lo que añade un gran interés a este viaje.
Muy pocos saben que San Francisco de Asís tenía los ojos puestos en la conversión, de la llamada en sus tiempos, la secta mahometana. El mismo peregrina a los santos lugares y «dialoga» con el sultán del Cairo, podemos decir que no tenía ni miedo y límites. Los primeros obispos de China son Franciscanos y sus primeros hermanos mártires se producen en Ceuta por predicar delante de una mezquita. La Europa de San Francisco está sometida a una situación terrible, los musulmanes llegan a Asís, cercanos a Viena, y con España y el sur de Francia en sus manos. La cristiandad llena de herejías, sobre todo Cátaros y Valdeses, pero no sólo. Cuando se ven estas cosas es legítimo pensar que no estamos tan mal. San Francisco muere con poco más de cuarenta años y lloraba pensando los almas que se perdían por no conocer el evangelio. El desafío dentro y fuera de la Iglesia tiene hoy colores distintos, la historia no se repite jamás, pero nos tenemos que hacer cada día la pregunta de qué estamos haciendo además de cantar lamentaciones.
Socci se enfada y dice que el Papa sólo tiene palabras buenas para los musulmanes. En la confusión presente, se mira a Juan Pablo II y su preocupación por controlar los flujos de inmigrantes. Polémica por una niña cristiana que es adoptada por una familia musulmana y será educada como tal. Interesante artículo sobre el sentido de la visita del Papa Francisco a Egipto hecho por un intelectual del país.
El cierre de comunidades religiosas está llegando a Italia con fuerza, la cosa no da para más, aquí la peculiaridad es que los alcaldes de dirigen al Papa Francisco para que no se cierren. Los obispos de Sierra Leona piden una «conversión ecológica» , no sabemos qué pensaría San Francisco pero no es difícil imaginar que tendría otras prioridades.
Desde estas líneas nos gustaría crear optimismo. San Agustín escribe la Ciudad de Dios para consolar a los cristianos de su tiempo ante la destrucción total de la ciudad visible con la caída del imperio. Estamos seguros que de esta salimos, Dios sabrá cómo, pero salimos y seguro que con mucha más fuerza.
Francesco in Myanmar e Bangladesh dal 27 novembre al 2 dicembre 2017
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¿Para qué viaja allí Francisco? ¿Para informarles del Cambio Climático? ¿Para decirles que sigan rezando a sus ídolos, que cualquier religión es buena para salvarse? Igualito que San Pablo.