Llega el esperado libro de Marco Tosatti, con presentación de Viganò e introducción de Maike Hickson, titulado ‘Galleria neovaticana’. Tosatti es el decano de los vaticanistas, sus opiniones, compartidas o no, son siempre esperadas con gran respeto. No está en edad de buscar méritos humanos y sí de ofrecernos obras de madurez. Sí el título es sugerente lo es mucho más el subtítulo de Neovatican Gallery: ‘Modernismo, vicios innombrables y corrupción en la época de Bergoglio’. Hoy tenemos la nota editorial que abre el volumen: «Se necesita valentía para afrontar, de frente y sin adornos tranquilizadores ni sofismas hipnóticos, la crisis terrible e incapacitante que atraviesa la construcción histórica y social de la Iglesia. No una fase crítica, no un período de retraimiento e involución, de aquellos con los que la historia está llena, sino una crisis única y subversiva que vacía su contenido salvífico desde dentro y reduce drásticamente su capacidad apostólica, una crisis de doctrinas heréticas y una crisis impía, de prácticas ahora débiles, ahora perversas, crisis de los hombres. En definitiva, se trata de una crisis de fe que tiene su origen en el renacimiento del modernismo, entronizado bajo las retorcidas columnas del baldaquino de San Pedro por Roncalli y Montini». «Jorge Mario Bergoglio es un fiel discípulo, tardío seguidor, eco renovado. Nada más y nada menos». «Con coraje y realismo, non recusamus laborem, no retrocedemos ante la carga de publicarlo, no rehuimos temas y argumentos que ciertamente son sangrientos y repulsivos, pero que pueden brindar a nuestros lectores otro ángulo desde el cual observar la milenaria crisis doctrinal que atraviesa la estructura eclesial».
Hoy tenemos varios artículos centrados en la entrevista al Papa Benedicto XVI publicada ayer: «Es cierto que Ratzinger dice que no hay dos papas, el papa es solo uno. Pero no dice quién es. ¿Se estaba refiriendo a sí mismo?». «Su Santidad, ¿todavía se siente Papa?» A lo que Benedicto XVI responde: «El Papa es uno solo …». Entrevistar al primer Papa Emérito de 94 años es una empresa difícil y se nota la lucha por entender la pregunta, por recordar, por reflexionar sobre la respuesta más adecuada que debe dar un Papa emérito, porque sus respuestas entrarán en la historia. Antonio Socci también insiste en esta misma idea: «El Papa es uno solo». Pero lo viene repitiendo desde hace años y todos estamos convencidos … Habría sido una primicia si hubiera dicho: «El único Papa es Bergoglio y yo ya no soy Papa». Pero esto Benedicto XVI no lo dijo. Nunca ha dicho eso en todos estos ocho años. Me pregunto porque. Deberían haberle preguntado: Santo Padre, ¿qué es usted actualmente? ¿Y por qué se viste de blanco si solo hay un Papa? ¿Y por qué todavía imparte la Bendición Apostólica que pertenece únicamente al Papa?»
La crisis de los medios de comunicación en el Vaticano no tiene fin, pero siguen queriéndonos vender la mercancía averiada. Hoy nos ofrecen la carnaza de lo mucho que estamos ahorrando con la maravillosa reforma, 16,6 millones de euros en cinco años. Sumamos cinco años para que parezca algo porque en este periodo, de 2015 al 2019, antes de la epidemia, los medios vaticanos han costado más de 250 millones de euros, casi todos de pérdidas, que ya es perder, bien está el ahorro y sea bienvenido, si cerramos ahorramos mucho más y no lo íbamos a notar mucho. No estaría de más una investigación para saber dónde terminan los dineros de los fieles, porque de ellos son, ¡todos!
Suiza ha entregado los documentos bancarios a la Santa Sede del caso de Londres y la conclusión que nos quieren vender es que el financiero Mincione es el que «sin duda más se benefició» de la operación, que provocó un daño «considerable» al patrimonio de la Santa Sede y que se cuantificó en «nada menos que 300 millones de euros». Esto también son dineros de los fieles, todos. Estamos ante otro caso en que no se investigará nada y se culpabiliza al intermediario. Sabemos que el Papa Francisco sabía, que el desaparecido amigo Edgar pagó y complicó todo, que el destituido Becciu no será juzgado por miedo a que hable demasiado, que todos sabían y que todos callaban, menos Parolin que simplemente no habla nunca. El Papa Francisco nos quiere vender que en este caso la investigación ha salido de dentro, pero sin publicación previa, como siempre, no se habría hecho nada, como de hecho no se ha hecho en años en este caso y en tantos otros.
Boticcelli, Alessandro Filipepi, nació en Florencia el 1 de marzo de 1445 y tan solo salió de Florencia para trabajar en la capilla Sixtina por encargo del papa Sixto IV, nuestra imagen de hoy nos acerca a la belleza desconcertante que tanto nos acerca a Dios y que estamos olvidando es estos tiempos inundados de fealdad demoníaca.
«…pero no hagáis lo que ellos hacen, porque ellos dicen, pero no hacen».
Buena lectura.
Galleria Neovaticana. Modernismo, Vizi Innominabili e Corruzione.
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Creo que no hay que buscar tres pies al gato: es evidente que para Benedicto XVI el papa es Francisco, de lo contrario no habría renunciado.
Pues…me queda la impresión de que a veces hay cosas que usted, articulista, no quiere ver. Le gusta presionar siempre la misma tecla; parece un T.O.C.. Vea: es necesario realmente que Benedicto XVI dijera en 8 años el Papa no es él. Por que la obsesión con una declaración tan prístina? Nuestro amado Ratzinger ya lo dijo de varias formas: dijo que la renuncia fue un acto muy difícil de tomar, habló contra las teorías de la conspiración de sus amigos «fanáticos» porque, según él, tomó la decisión sin presiones. En diversas ocasiones, siempre remitió todo al Papa Francisco, casi nunca se cruzó el camino de Bergoglio (aunque sí unas pocas veces a través de escritos). Renunciar y quedarse enclausurado en el Vaticano es ya una actitud tácita declarada que el Papa en actividad no él. Es emérito, aunque suene rarísima esta figura. Hubo un conclave y gustemos o no, el hombre vestido de blanco en la terraza era Francisco. El brazo derecho y secretario del Papa siempre quedó bajo fuego y siempre se subordinó a Francisco. En fin, la lista es larga y puede seguir. Claro que si llegáramos al punto de decir que el Conclave no fue válido por esto o porque aquello, que Francisco es un Papa ilegítimo y cosas por estilo, ahí vamos hacia un sendero sombrío. Benedicto XVI jamás desde la renuncia ha reclamado para sí cualquier prerrogativa pontifícia, excepto su nombre y algún costumbrismo más como la sotana blanca. O sea, ya es hora de soltar el hueso. No hace falta alguna que Benedicto XVI afirme que el Papa no es él. Ya lo dijo con sus palabras y gestos de muchas formas y repito…el problema es suyo porque no quiere aceptarlo. Ni siquiera la renuncia sin presiones proferida por Ratzinger sirve, porque prefieren creer que él miente o que habla presionado. Así no hay nada más que hacer. .
Y otro jesuita, no santo precisamente, condenado a 7 años y medio por abusar de una menor. Todavía sigue en la orden y no ha pasado proceso canónico.
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