A nadie se le oculta que vivimos sumidos en el caos y que esto promete con continuar por mucho tiempo. Si vemos las cosas desde el punto de vista humano, hemos de reconocer que no se ven muchas salidas a la descomposición sin precedentes que está viviendo la Iglesia Católica. Dios tendrá sus planes que no nos es dado el conocer y en los que confiamos a pesar de los pesares. La decadencia se nota en todos los ámbitos y niveles, deserción de fieles, obispos mediocres en el mejor de los casos, instituciones centenarias que desaparecen y un papado que vive a golpe de entrevista.
Podemos ser muy respetuosos con las posiciones políticas de todo el mundo, podemos entender que el Papa Francisco tenga las suyas y que nombre obispos y cardenales por su sintonía con estas posiciones. No se nos puede pedir es que no lo veamos y no lo contemos, no se nos puede pedir que inclinemos la cabeza, ante posiciones más que opinables que se nos pretenden imponer como únicas y obligatorias. Una de las características del Papa Francisco es su locuacidad sobre todo y de todo, y por eso llaman mucho más la atención sus silencios. De su amigo Zanchetta, condenado y protegido, ni palabra, silencio, prohibido preguntar. De Nicaragua, del amigo Ortega, ni palabra y con la que está cayendo. No entendemos que interés puede tener el Papa Francisco en encubrir con el silencio al despótico gobierno socialista de Ortega y dejar a su Iglesia, la Católica, que, por ahora, parece que lo sigue siendo, sin una contundente defensa. Un padre defiende a sus hijos, si calla es para empezar una traición y un abandono de su oficio, eso del olor a oveja parece que no se aplica a nos nicaraguenses y en este caso, y no solo, ¿China?, ¿Cuba?, gusta el olor a lobo.
Ya son 26 exjefes de Estado y de Gobierno del foro internacional no gubernamental IDEA los que piden al Papa Francisco: «una posición firme en defensa del pueblo nicaragüense y su libertad religiosa», en su condición de «cabeza de la Iglesia católica universal». Exhortan «a la opinión pública a mantener una respuesta de rechazo a este régimen que amenaza la paz», así como alientan «a las diversas confesiones religiosas a manifestar su censura». “La dictadura Ortega-Murillo quiere destruir las raíces culturales y espirituales del pueblo nicaragüense para dejarlo en el anonimato y hacerlo presa fácil de la dominación”.
Su presidente, Asdrúbal Aguiar: “Acabo de enviar a Su Excelencia, Pietro Parolin, Secretario de Estado del Vaticano, una comunicación en la que adjunto la declaración firmada por 26 ex jefes de Estado, miembros del Grupo Idea, Iniciativa Democrática de España y las Américas, haciendo un llamado al Santo Padre, al Papa Francisco, a mostrar sensibilidad ante la tragedia que estamos viviendo los nicaragüenses. En particular, la agravante persecución sufrida por la libertad de conciencia y religión, que terminó con el encarcelamiento o expulsión de obispos, sacerdotes, monjas, e incluso el cierre de la Academia de la Lengua, como si en definitiva la dictadura Ortega-Murillo buscara la deconstrucción cultural. , la ruptura de las raíces culturales y cristianas dentro de esa querida nación centroamericana».
Los expresidentes expresaron su «agravada preocupación» ante «lo que sucede en Nicaragua bajo la dictadura Ortega-Murillo, que tras perseguir y criminalizar a líderes políticos y sociales, así como limitar radicalmente cualquier libertad de expresión y de prensa , avanza ahora hacia la persecución de líderes episcopales católicos, sacerdotes y religiosos, incluso expulsándolos -como en el caso de las emblemáticas Misioneras de la Caridad- del territorio nacional”. «Por lo demás, nos preocupa que la quema de las iglesias y la destrucción salvaje de las imágenes del culto católico avance en una línea de destrucción de las bases sociales y antropológicas que recuerda a la quema de libros judíos, socialistas y pacifistas y todo bibliotecas de los partidarios del régimen nacionalsocialista alemán en 1933”. Advierten que la dictadura Ortega-Murillo pretende “destruir las raíces culturales y espirituales del pueblo nicaragüense para dejarlo en el anonimato y hacerlo presa fácil de la dominación, destruyendo su dignidad y fracturando sus raíces culturales”. Pues todo esto parece más que cierto, los hechos son tercos y los silencios papales también.
El Papa Francisco dijo que estaba «profundamente entristecido» por las víctimas del incendio que devastó la Iglesia Copta en Giza, Egipto, hace cuatro días. En un telegrama enviado a Tawadros II expresó sus «condolencias» y aseguró «cercanía espiritual a los heridos y afectados por esta tragedia»: “Su Santidad encomienda las víctimas y sus familiares al amor misericordioso de Dios Todopoderoso e invoca sobre ellos el consuelo y la fortaleza del Señor”. Se teme que la cifra de muertos se agrave en las próximas horas, cuando la entrada al lugar de culto sea posible.
El Sacro Colegio no se puede permitir la sangría de acusaciones sobre sus miembros, ya tenemos en el aire a todos lo macarristas y ahora se suma Ouellet, esto hay que cortarlo. El Director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, declaró en una nota oficial que: “la investigación preliminar encomendada por el Papa al P. Jacques Servais, S.I. , cuya conclusión fue que no hay elementos para iniciar un juicio contra el cardenal Ouellet por agresión sexual, habiendo consultado nuevamente al P. Servais y habiendo recibido confirmación de que ‘No hay condiciones para abrir una’ investigación sobre la agresión sexual de la persona F. por el cardenal Sr. Ouellet Ni en su informe escrito y enviado al Santo Padre, ni en el testimonio vía Zoom que recopilé posteriormente en presencia de un miembro del comité diocesano ad hoc, esta persona ha presentado una alegación de que habría proporcionado material para tal investigación'». «Después de más consultas relevantes, el Papa Francisco declara que no hay elementos suficientes para abrir una investigación canónica por agresión sexual por parte del Cardenal Ouellet contra la persona F.”.
El arzobispo de Milán, Delpini, publicó una nota en el sitio diocesano sobre la misa celebrada sobre una colchoneta flotante en el mar de Calabria el pasado 24 de julio por don Mattia Bernasconi, sacerdote de su diócesis. Una vez más, estas intervenciones son porque: «La resonancia pública que ha tenido el relato del s. Misa celebrada por don Mattia Bernasconi a la orilla del mar me llevan a hacer pública mi opinión». Reconoce que ha recibido una avalancha de mensajes sobre el caso tanto en el Dicasterio del Culto Divino como en la Curia Arzobispal de Milán: «algunos expresaron el sincero y profundo desconcierto de los fieles, otros elaboraron reflexiones, teorías desproporcionadas, evaluaciones sistemáticas, otros simplemente me han insultado a mí ya mis colaboradores, sin mencionar los interminables debates que tuvieron lugar en diferentes lugares».
«Lamento el desconcierto y el sufrimiento que han herido la sensibilidad de los fieles sabios y devotos. Creo que la forma de celebrar de Don Mattia es una tontería sin justificación. Don Mattia también lo reconoce en la carta que escribió para disculparse. Será un deber de don Mattia retomar con seriedad una formación litúrgica que nos permita comprender cómo fue posible este comportamiento y evitar que vuelva a ocurrir”. Pues que quiere que le digamos, que esto no sirve para nada y cabrea más a los confundidos fieles, si el tal Don Mattia hubiera celebrado el rito tradicional, hoy estaría suspendido o excomulgado y no se hablaría de ‘una tontería’. Las tonterías de los ‘don Matias’ pueden causar malestar, pero es mucho peor el mensaje del Delpini, tarde, presionado por los fieles y de un contenido mucho más escandaloso que la ‘tontería’ de la colchoneta. Para esto no hace falta un obispo en Milán.
«Maestro, ¿cuál es el mandamiento principal de la Ley?»
Buena lectura.
No deja de meter su sucio pie en ningun charco
El arzobispo de Milán, Delpini, debía haber dicho esto:
1. Abro juicio canónico de suspensión al cura de la colchoneta en juicio público, sujeto a las garantías legales, con derecho de defensa y prueba.
2. Cautelarmente el cura de la colchoneta queda suspendido hasta la sentencia.
3. Promulgaré un decreto que tenga todas las provisiones para evitar este ridículo sacrilegio blasfemo en el futuro, no sea que me hagan una misa en parapente o con escafandras.
4. No existe el punto 4.
Se promulga y publica en esta data, y entra en vigor y ejecución inmediatamente.
…
Cómo se enredan los obispos para eludir sus funciones martiriales de apóstoles de Jesús…