| 21 junio, 2017
En la jornada de ayer el Papa Francisco ha visitado la tumba de dos sacerdotes muy conocidos en Italia por su compromiso con la actividad social en los años del concilio. En todas las diócesis, en todos los países, hemos conocido este tipo de sacerdotes que han trabajado en muchas actividades de tipo social. Su situación en la iglesia podemos decir que era tolerada, mal asumida, y en todo caso siempre vigilada.
Con esta visita del Papa Francisco quiere romper con esta visión. Se habla de proceso de canonización, se habla de ejemplo a seguir para otros sacerdotes y de tantas cosas. A raíz de esta visita hemos sabido que estos sacerdotes, como tantos otros, cuentan con inspecciones, investigaciones, por parte de las autoridades vaticanas sobre sus personas y sus actividades. Podemos decir que en otros tiempos eran sacerdotes que olían a herejía, en estos nuevos tiempos ese olor si identifica con el olor a oveja, sin duda los vientos han cambiado y con ellos los olores.
Hemos hecho mención en algunas ocasiones a que estamos en tiempos de muchas palabras y pocos hechos. Hoy recogemos un interesante artículo que analiza la ley en vigor en el estado Ciudad del Vaticano sobre emigración, claramente muy restrictiva con las concesiones de derecho de ciudadanía. No se puede pedir a los otros lo que en tu casa no estás dispuesto a aceptar.
Estamos habituados a oír las opiniones del Papa sobre todas las cuestiones de actualidad. Esta gran presencia mediática del Papa hace mucho más incomprensibles algunos de sus silencios y ausencias . Llama mucho la atención tu falta de respuesta a la petición de los cuatro cardenales sobre cuestiones matrimoniales, incluso a no quererlos recibir, ni tan siquiera hablar con ellos. Da la sensación de que hay temas, que siguiendo la más pura técnica curial e italiana, lo mejor es vivir como si no existiesen y ya se cansaran.
El no enfrentar los problemas hace que estos se complican y que cada vez huelan peor y no precisamente a oveja. Buena lectura
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Este Papa es conflictivo,en vez de arreglar,desarregla;es rojo rojizo y manda a que hagan lío.En el caso de Venezuela y Cuba no toma partido por el pueblo y eso no se entiende.A Colombia va para reforzar a Santos.Muy diferente de Juan Pablo la a quien amamos.
No veo convieniente que un estado minúsculo como el Vaticano dé libremente la ciudadanía a cualquiera. Otra cosa es que el Papa exija a otros estados a acoger millones de falso refugiados. Debería de hablar y actuar con prudencia, una virtud que evidentemente no posee.