Empezamos semana, se acercan los idus de mayo, y esto no para. Si la semana pasada fue muy intensa está no promete ser menos. Nuevo llamamiento del Papa Francisco en el Regina Coeli para la liberación de los prisioneros del conflicto entre Rusia y Ucrania. La diplomacia vaticana está trabajando intensamente para lograr un resultado: la liberación de los prisioneros de ambas partes que, además de formar parte de la «misión humanitaria». Las negociaciones están resultando más complejas de lo esperado y no hay resultados.
No ganamos para disgustos: «La Embajada de Israel ante la Santa Sede está indignada y consternada tras conocer que el 11 de mayo, al concluir el Encuentro Mundial sobre la Fraternidad Humana celebrado en el atrio de la Basílica de San Pedro». No encontrarán imágenes de la plaza, la asistencia fue ridícula, menos que el año pasado que ya es decir, ganas de líos para nada. Continúa la embajada: «En un contexto donde el objetivo era, supuestamente, hablar de paz para crear un mundo más humano, se permitió que se produjera un discurso propagandístico lleno de mentiras». Todo se centra en el discurso sobre la intervención militar israelí en Gaza que pronunció el premio Nobel de la Paz yemení Karman Tawakkol. «Hablar de limpieza étnica en Gaza mientras Israel permite que diariamente entren en Gaza grandes cantidades de ayuda humana es orwelliano. También lamentamos que tal discurso haya sido pronunciado sin que nadie sienta el deber moral de intervenir para detener esto. Es una vergüenza. Este episodio es una señal más de cómo el antisemitismo y los prejuicios contra los judíos siguen muy vivos».
Seguimos con la carrera de audiencias, con una con profesores y estudiantes de la Universidad Pontificia Urbaniana. El motivo los 140 años de la Escuela de Paleografía, Diplomacia y Archivística, creada por el Papa León XIII, y los 90 años de la Escuela de Biblioteconomía. “La Biblioteca Apostólica, creada por Nicolás V en 1451, y el Archivo por Pablo V en 1610, son los puentes necesarios que conectan pasado y futuro».
Mattia Spanò escribe sobre la Spes non confundit , la bula papal que anuncia el Jubileo ordinario, fue presentada a la prensa como «el sueño de Francisco«. «El Papa escribe abiertamente que el norte del mundo tendría «una deuda ecológica» con el sur: del texto se desprende claramente que se trata de una deuda que debe ser honrada escrupulosamente. La paradoja es que no se trata de una deuda social, política, financiera, infraestructural o incluso espiritual, sino ecológica». «No me parece que un Papa sea la autoridad adecuada para arrojar luz sobre la oscuridad de este tipo de conceptos, y aparte me parece entender que Dios debe «olvidar» nuestras ofensas mientras los hombres deben pagar hacia otros hombres hasta el último céntimo y más». «El documento es la habitual condensación de palabras vacías: entusiasmo, sueños, inclusión; lleno de autocitas al son de tambores».
La piadosa exposición que hace del «estado del mundo» y del hombre pone todas sus fichas en elementos completamente inconsistentes. No puede haber «buena voluntad» si la voluntad está completamente ausente, o delegada. Las miles de cosas que dice el Papa Francisco son conocidas por todos, pero la unidad de pensamiento y propósito, que son la columna vertebral del catolicismo, está trágicamente ausente». «Persiste la molesta sensación de que Bergoglio ha eliminado el sentimiento de pecado y de deuda hacia Dios, el único verdadero y teleológicamente definido para el católico, traduciéndolo en una especie de vínculo moral transferido a una agenda humana no propensa a descuentos y cancelaciones».
Es noticia hoy que 49 empleados de los Museos Vaticanos, 47 custodios, un restaurador y un librero, de 700 en total, amenazan con llevar al Vaticano a los tribunales, si no mejoran sus condiciones. La asociación de empleados laicos del Vaticano (Adlv): «Hay quienes rechazan cualquier forma de diálogo». «Las condiciones de trabajo perjudican la dignidad y la salud de cada trabajador. La mala gestión es evidente, que sería aún más grave si fuera resultado de la única lógica de obtener mayores ganancias». Han firmado una petición colectiva contra la Gobernatorato del Vaticano, organismo del que dependen los trabajadores de los museos, acusando de falta de protección y el pago irregular de horas y la seguridad del lugar de trabajo. “Es evidente la mala gestión, que sería aún más grave si fuera resultado de la única lógica de obtener mayores ganancias”. Hay treinta días para un intento de conciliación, a falta de lo cual se abrirá un procedimiento judicial. Se han dado incluso casos de empleados que fueron sancionados mientras estaban en la consulta del médico. «Nos tratan como mercancía».
La comisión parlamentaria de investigación del caso Orlandi ya ha publicado el acta de su primera sesión. “Intervienen la hermana de Mirella Gregori, Maria Antonietta Gregori, las hermanas de Emanuela Orlandi, Federica Orlandi, Maria Cristina Orlandi y Natalina Orlandi, y el hermano de Emanuela Orlandi, Pietro Orlandi”. El presidente, Andrea De Priamo, aclara «que los entrevistados son responsables de las opiniones expresadas y de las declaraciones hechas y que pueden en cualquier momento solicitar a la Comisión que cancele la transmisión de audio y video y el secreto de la audiencia o de parte de ella, cuando crean que están informando hechos o circunstancias que no necesitan ser divulgados». Además, «la Comisión, a solicitud del Presidente o de dos miembros, podrá decidir reunirse en sesión secreta cuando lo estime conveniente». La Comisión se reunirá nuevamente el miércoles 15 de mayo a las 8.30 horas para escuchar a algunos periodistas que cubrieron los hechos objeto de la investigación.
Pietro Orlandi propone a los comisarios tres pistas: la supuesta negociación entre el magistrado Giancarlo Capaldo y el Vaticano con motivo de la apertura de la tumba de Renatino De Pedis en la basílica de Sant’ Apolinar; una investigación sobre unos presuntos mensajes de Whatsapp, no verificados, que presuntamente intercambiaron la Chaouqui y monseñor Vallejo Balda; y un documento publicado, de muy dudosa autenticidad y procedencia, que el propio Vaticano tachó de falso. Existe la convicción de que todos estos documentos podrían ser una falsificación creada deliberadamente.
Muy interesante Gotti Tedeschi en La Verità: «Sobre los Estados Generales de Natalidad». El colapso de la tasa de natalidad en Occidente es el origen principal y directo de «todos» los problemas del mundo. El problema de la natalidad, sin embargo, es tanto escatológico como socioeconómico. Dado que llevo más de 40 años tratando este tema, analizándolo inicialmente desde un punto de vista económico y financiero, me propongo hacer una contribución. En primer lugar les pediría que reflexionen sobre el hecho de que el origen de casi todos los problemas que sufre Occidente se deben al colapso de la natalidad, atención, colapso de la natalidad exclusivamente en los «ricos y eruditos».
«Hace unos 50 años en el mundo (valores redondeados para simplificar) había 4 mil millones de criaturas. Hoy se han duplicado: 8 mil millones. Pero ojo, hace 50 años de 4 mil millones, 1 mil millones estaban en Occidente y 3 mil millones en el resto del mundo. Hoy en día, de 8 mil millones de personas, todavía hay 1 mil millones de personas en Occidente y 7 mil millones en el resto del mundo. Ahora miremos la economía: hace 50 años Occidente, con el 25% de la población, controlaba alrededor del 90% del PIB mundial. Hoy, con un 12,5% controla cerca de la mitad, y el resto se le ha escapado de las manos».
«Cada año leemos las propuestas para frenar la caída, pero siempre las mismas y siempre de carácter socioeconómico. Y, muy raramente, alguien se ha preguntado sobre las causas del declive sólo en Occidente. ¿Somos demasiado cultos y sabios? ¿Somos responsables del nacimiento de la civilización cristiana? ¿Somos demasiado conscientes del impacto ambiental de la población? ¿O sobre todo hemos perdido el verdadero sentido de la vida?» «Muy raramente, nos hemos detenido a recordar que el colapso de la natalidad se produce siempre y sólo en el (ex?) Occidente rico y (ex?) culto, que ha perdido el liderazgo lo intenta compensar inventando un nuevo capitalismo sostenible e inclusivo.
«Es inevitable constatar que, en Occidente, se ha perdido la visión del sentido de la vida y de su valor, y las reacciones (y resultados) a los estímulos socioeconómicos son, por tanto, mínimas». «El problema, intentemos reflexionar, es espiritual y afecta a toda la Civilización Occidental, que era cristiana. Si una civilización no reconoce que existen «valores no negociables» que deben protegerse y si esta civilización los «entierra», reemplazándolos por otros más inmanentes, apreciados por aquellos que probablemente no tienen noción de «valor», ¿qué pasará?, ¿hemos comprendido lo que significa el colapso de la civilización occidental para el mundo entero?». «El problema de la natalidad no es (sólo) cultural o económico, es también (o sobre todo) espiritual, escatológico. ¿Demasiado complejo? ¿Demasiado tarde? Por supuesto, tomará mucho tiempo, quizás tanto como el que se necesita para restaurar la Fe después del fin de los tiempos».
Y terminamos con el siempre refrescante Benedicto XVI, un artículo de hoy nos recuerda la Spe Salvi. «El mito había perdido su credibilidad; la religión estatal romana se había fosilizado en un simple ceremonial que se realizaba escrupulosamente, pero ahora era sólo «religión política». El racionalismo filosófico había confinado a los dioses al reino de la irrealidad. Lo Divino era visto de diversas maneras en las fuerzas cósmicas, pero no existía un Dios al que se pudiera rezar. Pablo ilustra con precisión el problema esencial de la religión de aquella época cuando opone la vida «según Cristo» a la vida bajo el dominio de los «espíritus elementales del universo» (Col 2, 8).
«No son los espíritus elementales del universo, las leyes de la materia, los que en última instancia gobiernan el mundo y al hombre, sino que es un Dios personal quien gobierna las estrellas, es decir, el universo. No son las leyes de la materia y de la evolución las que tienen la última palabra, sino la razón, la voluntad, el amor, la Persona. Y si conocemos a esta Persona y él nos conoce, entonces, en efecto, el poder inexorable de los elementos materiales ya no tiene la última palabra. No somos esclavos del universo y sus leyes, somos libres. En la antigüedad, las mentes honestas e inquisitivas eran conscientes de esto. El cielo no está vacío, la vida no es un simple producto de las leyes y el azar de la materia, sino que dentro de todo y al mismo tiempo por encima de todo, hay una voluntad personal, hay un Espíritu que en Jesús se reveló como Amor».
«En el mundo tendréis tribulación. Pero ¡ánimo!: yo he vencido al mundo».
Buena lectura.
Estimado Specola,
En lo relativo a la escasa natalidad de occidente acierta a medias.
Debe usted considerar los condicionantes vinculados al desempeño laboral en todas las sociedades occidentales, que por otro lado son el modelo de referencia para otros países menos desarrollados.
Es cierto que esta condición del desarrollo social en algunos países como los de cultura musulmana no parece que pueda afectarles pero no es así. Compruebe como los actuales descendientes de musulmanes de generaciones inmigrantes en occidente comienzan a tener tasas de natalidad similares a los europeos naturales.
En mi opinión esto debe analizarse en profundidad. La cultura occidental en general ha desembocado, por muchos factores, en una llamada sociedad del bienestar pero como indica un buen amigo mío, quizá ésta no sea una buena sociedad.
Y no lo será si el hecho familiar y la organización social está por debajo de las perspectivas de progreso económico que todo lo abarca, tanto en la sociedad occidental y como en nuestro sentir personal.
Nos convendría parar y reflexionar. Pero con perspectiva personal y más profundamente que lo que expreso en estas breves líneas.
Necesitamos una re-conversión, que no revolución.
Por otro lado, debe revisar sus cálculos de redistribución población-riqueza de hace 50 años y actuales: bajo la tendencia que describe la riqueza se está distribuyendo proporcionalmente en el tiempo. En otros 50 años cada 1% de población poseerá el 1% de riqueza… Pues casi el reino de Dios instaurado en la tierra… Y usted y yo sabemos que eso no es así…
Tranquilo, no se lo tengo en cuenta, me he acostumbrado a sus razonamientos sofistas tan personalistas.
Ruego a los lectores que disculpen la redacción, es tarde ya y me levanto temprano para trabajar y estoy cansado. Espero que sea legible.
Como en otras ocasiones me despido de usted felicitándolo por su pseudónimo.
Specola es objetiva y sólo transmite lo qu encuentra, lo sé y agradezco enormemente. Pero, las declaraciones israelíes sobre el genocidio de Gaza, enojadas con el Vaticano, ¿no entran casi en lo ridículo? ¿Son tan buenos que dejan entrar «ayuda humanitaria» para curar o dar de comer a una población desesperada, con cientos de miles de heridos, para enterrar a los 40000 muertos, de los cuales 15.000 son niños? ¿Es «owelliano» criticar esta realidad?