Los repetidos rumores de consistorio antes de fin de año se han cumplido y ya tenemos 21 nuevos cardenales, sorpresas pocas, en el más puro estilo ‘francisquista’. El ocaso del pontificado nos trae tracas finales, esta es una de las esperadas. En las viejas diócesis, cada vez más viejas, suele ser costumbre que cuando un obispo se jubila o es trasladado, coloca a sus fieles en canonjías inamovibles, esto huele a final y hay que ir amarrando las cosas. Todos son conscientes que otro ‘francisco’ es imposible y que venga lo que venga, que incluso puede ser peor, pondrá a los suyos. Las fidelidades francisquistas se terminaran con el fin de francisco, vendrán otras, pero olvidemos que «a la corta o a la larga, para bien viene cuanto pasa».
El consistorio se celebrará el 8 de diciembre de 2024, es el décimo del pontificado. Los predecesores de Francisco, especialmente san Juan Pablo II, convocaron varios consistorios extraordinarios, Juan Pablo II hasta 6. El Pontífice en ejercicio nunca utilizó este instrumento, sino que optó por recurrir a un «Consejo del Rey», compuesto por 9 cardenales. En consistorios anteriores el Pontífice creó 142 cardenales de los cuales 113 eran electores. Los nombre están en todos los medios: Repole , arzobispo de Turín; Baldassare Reina , nuevo vicario general de la Diócesis de Roma; Rolandas Makrickas , arcipreste coadjutor de la Basílica de Santa María la Mayor; Angelo Acerbi , Prelado Emérito de la Soberana Orden Militar de Malta; Timothy Peter Joseph Radcliffe OP, maestro de la Orden de Predicadores de 1992 a 2001; Fabio Baggio CS, subsecretario del Dicasterio para el servicio del desarrollo humano integral; George Jacob Koovakad , funcionario de la Secretaría de Estado; Carlos Gustavo Castillo Mattasoglio , Arzobispo Metropolitano de Lima; Vicente Bokalic Iglic CM, arzobispo de Santiago del Estero y primado de Argentina; Luis Gerardo Cabrera Herrera OFM, arzobispo metropolitano de Guayaquil; Fernando Natalio Chomalí Garib , Arzobispo Metropolitano de Santiago, Chile; Tarcisius Isao Kikuchi SVD, arzobispo de Tokio; Pablo Virgilio Siongco David , obispo de Kalookan; László Német SVD, arzobispo metropolitano de Belgrado; Jaime Spengler OFM, arzobispo de Porto Alegre; Ignace Bessi Dogbo , arzobispo metropolitano de Abiyán; Jean-Paul Vesco OP, arzobispo de Argel; Paskalis Bruno Syukur OFM, obispo de Bogor; Dominique Joseph Mathieu OFM Conv., arzobispo de Teherán-Ispahan; Frank Leo , arzobispo de Toronto y Mykola Byčok , C.SS.R., eparca de la Eparquía de los santos Pedro y Pablo de Melbourne de los Ucranianos.
Aparte de cuatro italianos, sólo dos de los nuevos cardenales –el predicador dominico Timothy Radcliffe, ex maestro general de la orden dominica, y el arzobispo Francis Leo de Toronto– vienen de Occidente. Son individuos que han sido aliados clave en su papado, entre ellos Radcliffe; el padre Fabio Baggio, subsecretario de la Sección de Migrantes y Refugiados del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral; y monseñor George Koovakad de la India, quien está a cargo de organizar los viajes papales y Carlos Castillo de Lima. Actualmente hay 236 cardenales, de los cuales 122 tienen menos de 80 años y, por tanto, son elegibles y pueden votar en el próximo cónclave, dos llegarán los 80 antes de fin de año: Porras Cardoz, ex arzobispo de Caracas y Oswald Gracias, de Bombay
Zuppi sale raudo y veloz: «Agradecemos al Papa Francisco por haber llamado a cuatro hermanos, hijos de las Iglesias en Italia, para ayudarlo en el servicio de la Iglesia universal, para el bien de la humanidad. Este don es un signo más de comunión y anima a nuestras comunidades a ser misioneras sin fronteras». «Encomendamos a los nuevos cardenales al Señor y los acompañamos con la oración, deseando que cada uno responda a esta llamada con humildad, misericordia, capacidad de profecía, llegando a las mujeres y hombres de nuestro tiempo, al estilo de la proximidad. Renovamos a todos la amistad y el afecto del Episcopado italiano» .
En L’Osservatore Romano , el 19 de septiembre de 2024 aparece un artículo de nuevo cardenal Radcliffe OP que visto ahora suena a campaña. «En 1986, mi comunidad dominicana en Oxford organizó una conferencia sobre la Iglesia y el SIDA. Me conmovió el amor, el coraje y la resistencia con que los católicos homosexuales respondieron a esta crisis y los maravillosos dones que aportan a la Iglesia. Unos años más tarde, me invitaron a presidir algunas misas para católicos homosexuales y lesbianas en Londres». «El desafío para las personas homosexuales, como para todos, es aprender a expresar el amor de manera apropiada, respetando la dignidad de cada uno como hijos de Dios». «Mi intuición me dice que la mayoría de los católicos homosexuales que tienen relaciones maduras y comprometidas suelen ir más allá del interés por el sexo. Lo que más buscan es “amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre y dominio propio. Contra tales cosas no hay ley” (Gal 5:22-23). «En algunos sectores de la Iglesia, la acogida de los homosexuales se considera una prueba de la decadencia occidental, pero la Iglesia debe luchar por la vida y la dignidad de los homosexuales, que todavía están expuestos a la pena capital en diez países y a un proceso penal en setenta. Tienen derecho a vivir».
Oración en Santa María la Mayor, ora en voz alta por todos los libaneses, “especialmente por los habitantes del sur que se ven obligados a abandonar sus aldeas». “Todas las naciones tienen el derecho de existir en paz y seguridad, y sus territorios no deben ser atacados ni invadidos. La soberanía debe ser respetada y garantizada por la paz».
Siguen las críticas al Papa Francisco por sus afirmaciones sobre las mujeres y le vienen del lado mas ‘progre’ que no está nada contento con sus últimas emanaciones. «¿Pero cómo evaluar lo que el Papa ha dicho (y continúa diciendo) sobre las mujeres, los roles de género y la igualdad? ¿“Antropología vulgar”, tal vez? “La mujer es acogida fecunda, atención, dedicación vital», y de nuevo «es malo cuando una mujer quiere ser hombre» . En lo que respecta a las consignas tragicómicas , como las proclamadas en Bélgica, Francisco debe ser considerado un reincidente. En repetidas ocasiones se ha pronunciado contra el “machismo con faldas” y ha descrito la “ideología de género” como el “peor peligro de nuestro tiempo”, una declaración voluble que puede pasar a la catástrofe climática y las guerras. La concepción que tiene el Papa de las «cuestiones de género» es simplista, estereotipada, prejuiciosa y descaradamente basada en una posición de supuesta superioridad. La teóloga Ursula Nothelle-Wildfeuer recordó algunos pasajes de la encíclica “Fratelli tutti” de Francisco de 2020 que parecían ir en otra dirección. El Papa lamentó entonces que las sociedades en todo el mundo estén «todavía lejos de estar organizadas de manera que reflejen claramente el hecho de que las mujeres tienen exactamente la misma dignidad y los mismos derechos que los hombres» . “¡Es difícil pensar que el Papa no se dé cuenta de esta evidente contradicción!” Lo que el Papa dice o piensa sobre el feminismo y la lucha por los derechos de las mujeres no puede ser nuestro criterio para evaluar la realidad y sus cambios: ni siquiera cuando los hombres del Vaticano intentan resumirla y darle un «vestido» teológico con un próximo documento sobre la «naturaleza de la mujer» y su papel en la Iglesia.
Otra obsesión del Papa Francisco que hoy se recuerda e contra quienes prefieren vivir con un perro o un gato antes que tener un hijo. Los datos dicen que hay más perros y los gatos en familias con niños que en las casas de los solteros o las parejas sin herederos. El tema entra en contradicción, otra más, con lo que el mismo afirma en la Exhortación Apostólica Laudate Deum: «nos vemos obligados a reconocer que la vida humana es incomprensible e insostenible sin otras criaturas (…) formamos una especie de familia universal, una comunión sublime que nos empuja a un lugar sagrado, amoroso y humilde respeto” .
Hace años que no vemos al Papa Francisco celebrar Misa, a lo más concelebrar. El Papa Francisco también crea confusión en el ámbito litúrgico. No celebra la Eucaristía en público, pero la preside. ¿Qué significa? No pronuncia las palabras de consagración. Esto escandaliza a muchos fieles – también a los sacerdotes- especialmente a aquellos que vieron celebrar a san Juan Pablo II en condiciones mucho peores que aquellas en las que se encuentra Francisco. La razón que el Papa siempre ha dicho a sus colaboradores y a la Oficina de Prensa es que con el dolor en la rodilla no puede mantenerse en pie. Está claro que no existen normas que lo prohíban ¿Pero es apropiado? Si el Papa tiene fuerzas para estar de pie ante el altar, ¿por qué no puede celebrar él mismo y hacer concelebrar a los demás? Mientras que con Benedicto XVI la liturgia era ejemplar para que todos pudieran imitarla, hoy la liturgia papal se convierte en el ejemplo a no imitar en absoluto.
En Medjugorje se puede rezar oficialmente, peor de los que no hay dudas es de que algo sobrenatural sigue atrayendo a millones de personas: «La Virgen habla, está hablando». La Santísima Virgen nos espera para la oración, como estaba previsto, en el monte Crnica, en la localidad de Podbrdo, donde se apareció por primera vez y donde se encuentra su estatua. Aquí, en Medjugorje vienes porque tres de los seis videntes todavía ven y escuchan a la Virgen , nos hablan todos los días, y esto nos permite a todos sentirnos, de alguna manera, dentro del acontecimiento, también y quizás sobre todo en una secreta esperanza, como sucedió hace un tiempo». La gente va a pie hasta la montaña donde se apareció la Virgen, hasta los ancianos suben a pie, y hasta los que llevan muletas lo intentan, todos los más de 50 millones de fieles que han llegado hasta ahora en peregrinación han subido. sudando e invocando la ayuda de Dios : un cuarto de hora para cruzar este pequeño pueblo de Bosnia-Herzegovina , casas bajas con tejados rojos y luego hoteles, restaurantes y tiendas de souvenirs con la imagen de la Virgen, y luego unos veinte minutos para subir , porque no hay camino, sólo piedras afiladas y cantos rodados, entre los abetos. Allí arriba, en el centro de un pequeño claro, alrededor de las seis de la tarde del 24 de junio de 1981, seis jóvenes de la parroquia local vieron aparecer una figura femenina de reflejos blanquecinos con un niño en brazos. Oraron con ella y hablaron con ella y, con el tiempo, continuaron.
Las cosas no tenían buena pinta en Lepanto, tampoco ahora, y el Papa San Pío V se daba cuenta de que la Santa Liga necesitaba gran ayuda espiritual para esa batalla, por lo que solicitó a todos los fieles que rezaran el Rosario para obtener la victoria. La noche antes de la famosa batalla, los marineros rezaron el Rosario de rodillas. El 7 de octubre de 1571, la flota cristiana fue a la batalla con un estandarte bendecido por el Papa, también llevaban una imagen enviada al Rey de España desde México donde se veía la imagen milagrosa conocida como Nuestra Señora de Guadalupe. La Santa Liga se enfrentó a la flota otomana desplegada en forma de medialuna, símbolo del Islam. Los barcos de la Liga se acomodaron en forma de cruz. Había, entre ambas fuerzas, más de cuatrocientas naves, una de las batallas navales más numerosas de la historia. Tras cinco horas de combate, la Santa Liga resultó victoriosa. Debido a que el imperio otomano fue derrotado por la Santa Liga en la batalla de Lepanto, los turcos no avanzaron hacia Europa. Muchos historiadores consideran que esa batalla es de las más significativas de la historia. El Papa San Pío V sabía que la Virgen había intercedido por la Santa Liga, asegurándoles la victoria, el 7 de octubre de 1571, fecha de la batalla de Lepanto, él vio a la Santísima Madre en una visión en la que le reveló la victoria. Como ofrenda de agradecimiento, el Papa declaró ese día fiesta de Nuestra Señora de la Victoria, conocida más tarde como Nuestra Señora del Rosario.
«Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.»
Buena lectura.
Esperando la próxima e inmediata dimisión de Francisco (que parece querer tener inmunidad postmandato con tales nombramientos), el próximo Papa se va a encontrar de frente con los efectos eclesiocatastróficos de la terrible Edad Hiemal de la Iglesia con el jesuita argentino, según dicen los metereólogos y paleoclimatólogos de prestigio.
Sólo hablaré de tres aspectos:
1. IGLESIA DOMÉSTICA
Integrado por familias y matrimonios, es su verdadero desplome total y completo, acelerado cada año, es la típica pescadilla que se muerde la cola: los fieles no se casan, si se casan tiene pocos hijos, hay pocos bautismos, no hay niños, colapsa la demografía eclesial, no hay ingresos en primera comunión y catequesis (se quedan sin nadie), no hay catequistas, no hay confirmaciones, no hay seminaristas y novicios en las diócesis y monasterios, no hay ordenaciones sacerdotales y ni profesiones religiosas, decae la asistencia a la misa y confesión, caen los ingresos económicos, la Fé se desmorona y desprestigia, Amoris laetitia y Fiducia supplicans le han dado el remate al dar derechos sacramentales a actos intrinsece malum como adúlteros, homosexuales y concubinos, derogando de facto el sexto mandamiento y el sacramento del matrimonio, la eucaristía y la confesión…
2. DIÓCESIS
Es también el hundimiento en vocaciones, ordenaciones, número y juventud de sacerdotes y parroquias abiertas. En España y Europa, hay cientos de diócesis que en 15 años, sólo, van a quedarse sin ningún tipo de sacerdote, pues los que queden serán pocos, ancianos y discapacitados. Colapso de provincias eclesiales y conferencias episcopales enteras, no sólo está el caso de la apostática conferencia episcopal alemana. Añadir el colapso financiero, que implica vender las parroquias, algunas patrimonio cultural.
3. ÓRDENES Y CONGREGACIONES RELIGIOSAS
El cónclave hereda una comunidad de órdenes y congregaciones religiosas en estado catastrófico, divididas en muchas órdenes en decadencia hasta la extinción, más de 100 (caso jesuitas), y las pocas destinadas a crecer por seguir la tradición y el carisma del fundador.
Las 7 grandes órdenes y congregaciones religiosas de la Iglesia están en decadencia y declive irreparables año tras año.
Durante y justo después del Concilio Vaticano II, comenzó un marcado declive de muchas órdenes religiosas que, con algunas excepciones, continúa hasta la actualidad, 2023: el punto en el que comienza este declive generalmente varía entre 1963 y 1967, y se demuestra por el número de miembros.
Alrededor del 32% de las congregaciones católicas, que representan en ese momento a 118.907 religiosos (incluyendo a los Franciscanos Menores, Capuchinos, Dominicos, Redentoristas y Benedictinos), alcanzaron su máximo histórico registrado estadísticamente en 1963.
Alrededor del 9%, que representan a 60.289 religiosos (incluyendo a los Jesuitas y la Sociedad del Verbo Divino), alcanzaron su máximo en 1966 según estadísticas.
Aproximadamente el 55% de las congregaciones, que incluyen a los Salesianos, y representan a 102.548 religiosos, alcanzaron este máximo de membresía en 1967.
Solo unas pocas congregaciones católicas (el 5%) se observó que alcanzaron su máximo de membresía a principios de la década de los 1970.
La gran mayoría de los religiosos de la Vida Consagrada experimentaron este rápido declive vocacional durante la primera década después del Concilio, es decir, entre de 1965-1975, y durante 50-60 años, han estado en declive permanente, sin interrupción.
Las 7 instituciones más grandes (Jesuitas, Franciscanos, Salesianos, Capuchinos, Benedictinos, Dominicos y Redentoristas) representaron aproximadamente el 39.5% de todos los religiosos en 2014.
Debido al gran número de religiosos representados por estas 7 instituciones, sus tendencias influyen fuertemente en los resultados promedio de los cálculos generales.
Mientras que el declive promedio de 110 Institutos de Vida Consagrada es del 37,2%, se estima que el declive promedio de estas 7 grandes instituciones es de alrededor del 43%, y el declive de los JESUITAS y los FRANCISCANOS es del 52,8% y el 48,2% respectivamente, y habrá aumentado más en este 2023.
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Todos los datos actualizados y exactos no los dan en público el Vaticano, es decir, diócesis a diócesis, orden y congregación individualizadamente, dividido en sus demarcaciones territoriales (casas, provincias y comunidades) sino que hay que ir tomándolos uno por uno de todos los sitios, lo cual hace la tarea imposible.
Todos los datos, pues, los saben (deberían de saberlos) los obispos y cardenales, pues cada dicasterio (obispos, sacerdotes, religiosos) tienen sus fuentes estadísticas actualizadas a día de hoy, 7 de octubre, en seminaristas, ordenados, presbíteros, diáconos, obispos, novicios, profesos, religiosos, conventos, monasterios, casas, comunidades…
……….
Lo cierto es que las cifras indican unos hechos objetivos:
1. Francisco es un pontificado fracasado y acabado irreversiblemente en grado de multinivel completo y total (presbíterios y religiosos, seminaristas y novicios, ordenados y profesos, diócesis, parroquias, conventos, monasterios, comunidades, provincias, casas; doctrinal, litúrgico, moral, eclesiológico, autoridad, legitimidad, competencia y capacidad, fidelidad, virtud, carisma, gracia, unción…)
Son ya casi 13 años de mandato (justo el promedio de mandato de los últimos papas), con una edad de casi 88 años (Benedicto XVI murió a los 95 y dimitió con 85 años) y sin perspectivas ya de iniciar un proyecto a largo plazo de unos 15 años (es anciano, débil y enfermo, y ya no puede celebrar misas ni puede arrodillarse ante el Santísimo ni caminar trecho, es de dominio público y notorio).
2. La Iglesia francisquista está totalmente colapsada y encaminada hacia la desaparición y extinción entre 15-30 años. Un Francisco II sólo agravará la crisis de manera definitiva, quizás acelerándose hacia un cisma.
3. El próximo Papa deberá de intervenir a casi todos los gobiernos de las órdenes y congregaciones, y a cientos y cientos de diócesis europeas y de los EEUU, para evitar la desaparición definitiva de diócesis y congregaciones que han durado milenios o siglos.