Ayer ilustramos con una fotografía del Papa Benedicto XVI en silla de ruedas, la de hoy, al fin, es con el Papa Francisco. Los hechos se imponen y es evidente que era absolutamente innecesario el sufrimiento visible del Papa Francisco por sus problemas de movilidad. La ‘humillación’ ha pasado y el sentido común se ha impuesto. El uso de silla de ruedas, las audiencias trasladadas del Palacio Apostólico a Casa Santa Marta, desplazamientos en automóvil o papamóvil, plataformas para evitar las gradas, se han vuelto necesarias ante la prolongada imposibilidad de caminar. El nerviosismo se nota, en los sacros palacios aseguran que «es difícil hacer pronósticos» y que «por ahora se mantienen los programas previstos de la agenda papal». El Papa Francesco ha anunciado varios viajes internacionales para los próximos meses que, de momento, parecen poco viables. En el Vaticano también confirman que las infiltraciones efectivamente se han realizado. Habrá que considerar si se necesitarán más en los próximos días. Todo apunta a que ‘el problema’, ¿solo la rodilla?, debe llevar pronto a una cirugía para la inserción de una prótesis. La intervención implica una rehabilitación que se puede realizar en Santa Marta. El propio Papa Francisco: «La recuperación de los ligamentos es lenta, a esta edad te tienes que conformar con que te digan que estás bien conservado».
La noticia central de hoy es la esperada y larga deposición de Becciu en el proceso Vaticano. Más de dos horas de declaraciones espontáneas ante los jueces en el que reitera “soy inocente”. Becciu es un artista, conoce muy bien el mundo vaticano en el que se mueve. Siempre defenderemos su derecho a defenderse, que él no ha defendido ni respetado cuanto tenía mando en plaza. No tenemos duda alguna sobre su capacidad de manipulación adornada con una elegante terminología: «Señor Presidente, inmediatamente digo que no será fácil para mí, un sacerdote, hablar porque estoy desgarrado por un profundo conflicto interior, por un lado, la búsqueda de la verdad judicial me obliga a decir lo que sé, por otro lado, mi identidad sacerdotal me lleva a perdonar, a no señalar el mal hecho por los demás, a ser rico en misericordia hacia los que se han equivocado, según lo que el Papa Francisco nos recuerda a menudo. Pero, en obediencia al Santo Padre, me dispongo a dar mi contribución a la búsqueda de la verdad». “Aprovecho este momento para agradecer públicamente al Papa que me haya dispensado de respetar el secreto, permitiéndome hablar libremente y defenderme con total transparencia”.
Le recuerdan que: «Los magistrados hicieron la investigación y cuando usted envió el dinero, a la diócesis de Ozieri, estaba la mano de su hermano Tonino que se los llevó». «Hay dinero del Obolo de San Pedro y los magistrados, con la investigación de la Guardia di Finanza, vieron la mano de su hermano que tomó este dinero para ponerlo en su cuenta personal». Becciu centra su defensa buscando acusadores y salvando siempre al Papa Francisco, que a fin de cuentas es el que ya lo ha condenado y sometido a juicio: «Durante más de un año y medio me ha atormentado una pregunta: ¿por qué estas falsas acusaciones se informaron al Santo Padre?». Interrogatorio durante 7 horas ante el fiscal Alessandro Diddi.
Sobre su relación con la Marogna, Lady Becciu, dijo que no le facilitó de ninguna manera la apropiación de sumas de dinero, sino que solo inició una colaboración profesional con ella, apreciando su «experiencia en geopolítica e inteligencia». “Aquí y ahora debo expresar una fuerte y vibrante indignación por cómo esta relación ha sido tergiversada con inferencias ofensivas, de la más baja índole, lesionando mi dignidad sacerdotal”. “La señora propuso una colaboración profesional con la Secretaría de Estado en estos asuntos de su elección”. Por tal motivo se lo envié al Comandante de Gendarmería, Dr. Giani, quien la recibió el mismo, pues, me informó que había sacado buena impresión de la reunión, pero que no había posibilidad inmediata de aceptar su propuesta”.
El acusador mayor es Perlasca, en otro tiempo estrecho cooperador, y Becciu no pierde ocasión para desacreditarlo: «En cuanto al carácter, era irascible y quisquilloso, tal vez incluso celoso de su autonomía y del papel absolutamente directivo que tenía en la Oficina. Cultivó entonces un gran deseo: llegar a ser Nuncio Apostólico». Monseñor terminó «en medio de una profunda soledad» y la «gran amargura» de ser destituido de su cargo en la Secretaría de Estado. Tanto es así que en un dramático mensaje de texto anunció que se quería suicidar tirándose de su habitación. «La única solución posible, según él, para salir de una situación que le dejaba sin posibilidades de demostrar su inocencia». Becciu dijo que siempre había estado junto a su colaborador que le invitó a cenar «para retribuir la atenta asistencia». Esa noche, sin embargo, encontró «un hombre diferente, muy extraño y sensible». «Después de esa cena se alejó de mí». Perlasca, muy enfadado por todo lo depuesto, ha pedido ser parte civil en el juicio.
Entra en escena la Putignani, Lady Perlasca, que afirmó ser una ex agente del Servicio Secreto y lo amenazó: «Si no hace todo lo posible para restaurar el honor y el empleo de Perlasca, perderá su capelo cardenalicio». Y le anunció a un hermano de Becciu «que se preparara para visitarme en la cárcel». “El 10 de septiembre dijo que entre el 15 y el 30 del mes perdería mi cardenalato. Lo perdí el 24 de septiembre”.
No ha quedado fuera el caso Pell: “Durante más de un año he estado expuesto a una presión pública insoportable, con la vergonzosa acusación de haber financiado incluso falsos testimonios en perjuicio de un cohermano, el cardenal Pell, con dinero de la Secretaría de Estado”. “Mi amargura es aún más profunda al saber, de la lectura de la correspondencia que presento, que el mismo cardenal Pell autorizó el pago de esta suma, con una carta fechada el 11 de septiembre de 2015 «. Esperaremos las reacciones que seguro las hay.
Becciu aclaró su vinculación con Carlino, también acusado: para él siempre y sólo un secretario. Mientras que definió las relaciones con el ex Auditor General, Libero Milone, «muy amables». Sobre el «destino» del Auditor, que cesó en su cargo en el Vaticano en 2017 , el cardenal Becciu no quiso responder «por amor al Santo Padre».
Otro aspecto que aparece en la sesión de juicio de ayer, que puede dar mucho que hablar, es que la Secretaría de Estado del Vaticano hizo inversiones en bonos de la Federación Rusa y el financiero Raffaele Mincione tenía relaciones comerciales con Gazprombank.
La gendarmería del Vaticano siempre ha sido muy cuestionada por sus actividades en suelo italiano. En las declaraciones de Becciu aparecen episodios, con la ley en la mano, delictivos, y que parecen apuntar maneras muy arraigadas en la forma de proceder de la policía del Vaticano. Becciu ataca ante los presuntos espionajes: «deberíamos preguntarnos ¿por qué la actitud de los Promotores de Justicia cambia en un determinado momento? ¿Será acaso porque Perlasca acudió al restaurante Lo Scarpone de Roma haciéndole al cardenal Becciu las preguntas que escuchaba la gendarmería mientras grababa? ¿A quién se refería Perlasca? ¿Quién es él? Si este hombre habla de registro, habrá registro. O el Juzgado ordena un informe psiquiátrico sobre este hombre antes de admitir la demanda de parte civil, porque lo que dice no es por tanto fidedigno. (…)
Horas de deposiciones, interrogatorios, intervenciones de abogados caracterizadas por una fuerte tensión entre el Promotor y los abogados defensores, hasta el punto de impacientar a Pignatone, que exclama: “¡Basta! Estoy cansado de sus riñas” y pidió un descanso de cinco minutos “para calmar a todos”. El interrogatorio a Becciu continúa en la próxima audiencia, fijada por Pignatone, el 18 de mayo.
La “Praedicate Evangelium” es una morma general y ahora hay que adaptar el «Reglamento General de la Curia Romana para que “corresponda no sólo a las Normas sino también a los Principios que inspiran el texto constitucional”. Seis personas forman la comisión interdicasterial que «hará uso de la colaboración de expertos y funcionarios de la Curia romana, que tengan competencia y experiencia».
Vivimos en un eterno presente en el que nos pretenden vender con grandes reformas y revoluciones lo que solamente es un cambio de maquillaje. Juan Pablo II crea en 1996 la Fundación Domus Sanctae Martha, en 1999 instituyó la Domus Romana Sacerdotalis y la Domus Internationalis Paulus VI. En 2008 el Papa Benedicto XVI instituyó la Fundación Casa San Benedetto, para ofrecer residencia adecuada al personal jubilado que ha servido a la Santa Sede en las Representaciones Pontificias. Todo esto confluirá en la Domus Vaticanae, con un matiz, nada indiferente, que parece en centro de toda está operación: «el patrimonio de estas fundaciones será donado a la Administración del patrimonio de la Sede Apostólica. La nueva institución “seguirá persiguiendo los fines de las cuatro fundaciones anteriores”.
Ha empezado la campaña en territorio OTAN contra el monaguillo de Putin. No tenemos datos para verificar o no la información. Los que vemos publicado es que Kirill tendría un patrimonio estimado de más de cuatro mil millones de dólares y que la Union Europea piensa sancionarlo.
Son momentos en los que parecen que todos los demonios andan sueltos, por si faltaba alguno, entra en escena Madonna, la cantante. Pide al Papa Francisco una reunión para tratar de su propia excomunión: “¿Sería posible reunirnos algún día para discutir algunas cosas importantes? He sido excomulgada tres veces. No me parece justo «. Se considera una» buena católica «, condición, en este caso, mucho más aplicable al estar que al ser, mientras admite que no se ha confesado en algunas décadas. No hay constancia documental de las tres excomuniones y está muy molesta con el trato recibido cuando a otras irreverentes, Lady Gaga, no les recriminan nada.
«El que come mi carne y bebe mi sangre tiene vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día».
Buena lectura.