Seguimos con noticias sobre el proceso Becciu, día que tenemos nueva sesión, día que volvemos a sufrir en descrédito absoluto del sistema judicial imposible que habita en el Vaticano. Recordemos que desde el inicio se ha prescindido de la presunción de inocencia y el Papa Francisco, que acapara los tres poderes tradicionales de todo estado en su persona, ha aplicado la condena previa al juicio. Todos los presuntos imputados, no hicieron otra cosa que obedecer, o resignarse, ante decisiones de la ‘autoridad superior’ ante las que no tenían, ni posibilidad, ni medios para oponerse. La consecuencia inmediata que estamos viviendo es el bajísimo nivel de los actuales superiores del Vaticano, serias responsabilidades son asumidas por personas sin experiencia alguna y con muy escasa formación en las materias que traen entre manos. El papado ha entrado en una fosa de la que será muy largo y complicado salir.
Nos puede caer mejor o peor, Renee Brühlart, durante años el mejor pagado de todo del organigrama del Vaticano, pero es una persona que fue buscada y contratada para el vaticano por su reconocida capacidad. Ocho años como director de la Financial Intelligence Unit (Fiu) de Lichtenstein, experto de la lucha contra el blanqueo de dinero y la financiación del terrorismo y vicepresidente del grupo Egmont. Su sensata reacción ante los peligrosos juegos del Vaticano ha sido poner tierra por medio. Es imposible trabajar con seriedad en medio de esta maraña de intereses en los que las instituciones no se respetan y las competencias se ven suplantadas o anuladas siguiendo el capricho de los discernimientos de la autoridad superior.
Otra entrevista al secretario de Benedicto XVI: «Hay quienes lo atacan, lo injurian y arman polémica con arte para contrastarlo con Bergoglio». «Es débil en lo físico, pero la mente siempre funciona muy bien. Es metódico y sus días no han cambiado en este último periodo. Eso sí, los movimientos son lentos y necesita descansar más. Por la mañana concelebra la misa a las 7.30. Después se queda sentado escuchando la música. Ahora también ha retomado su habitual paseo por los Jardines Vaticanos». Benedicto XVI, que cumplirá 95 años el 16 de abril. «El Papa Benedicto había escrito un texto sobre el sacerdocio católico que contenía también algunas frases sobre el celibato, (…) las controversias son ingeniosamente montadas por aquellos que tienen interés, incluso en la Iglesia, en crear contrastes. También hay quienes me culparon por acoger peregrinaciones antibergoglianas al Mater Ecclesiae. Una acusación ofensiva y ridícula».
El Papa Francisco se ha ofrecido de todas las formas posibles e imposibles como posible mediador en el ‘conflicto’ entre Rusia y Ucrania, ofrecimiento que no ha interesado ni a los presuntos amigos, ni a los presuntos enemigos. Asistimos a gestos papales sobre el tema que pretenden mantener una equidistancia que no parece contentar a nadie. Ayer lo vimos desplegando una bandera en la audiencia e improvisando : «Esta bandera viene de la guerra, de Bucha. Aquí también hay algunos niños. Ucranianos. Tuvieron que huir. No olvidemos a los ucranianos. Es difícil ser desarraigado de la tierra de uno por la guerra «. Los mártires de todo este desatino son los sufridos ucranianos, apaleados por propios y extraños por intereses muy alejados de su vida diaria.
Mientras que los obispos del norte de Europa, sobre todos algunos alemanes, luchan por la abolición del celibato sacerdotal, en África ocurre lo contrario. La conferencia episcopal del Congo ha tomado medidas enérgicas recordando a los sacerdotes que han tenido hijos y a menudo viven con concubinas, situación más extendida de lo que uno podría imaginar, a dejar el sacerdocio inmediatamente. Quien ha dado a luz hijos, rompiendo el vínculo de castidad, debe dejarlo inmediatamente, sobre la base de la «necesidad de comportamiento responsable frente a los hijos nacidos de la relación entre una mujer y un sacerdote». Se sienten orgullosos de que «muchísimos sacerdotes viven fielmente sus compromisos sacerdotales», que «la castidad es un don de sí mismo para la fecundidad espiritual (…) y que «el celibato es el signo de la libertad con vistas al servicio». La obligación de dimitir se aplica a los propios obispos para respetar los derechos de los niños y mujeres obligados a vivir en la clandestinidad: “Tenemos la obligación moral de reconocer que estas personas existen y sufren en silencio y piden reconocimiento y acompañamiento». «El sacerdote padre necesita tanto la misericordia como el oprobio de la Iglesia” y en el caso de que el sacerdote con hijos oponga resistencia y no quiera pedir la dispensa de las obligaciones clericales, “el obispo debe presentar el caso a la Santa Sede para su reducción al estado laico”. No podemos ni imaginar lo que pensaran con los inclinados a otros gustos más coloridos.
Carta abierta de Courage International, una asociación católica comprometida con la asistencia espiritual de las personas homosexuales, al cardenal Hollerich y al cardenal Marx. «Sus Eminencias, como sacerdote comprometido durante muchos años en el cuidado pastoral de las personas que experimentan atracción por personas del mismo sexo, he leído sus recientes comentarios públicos sobre la enseñanza católica de los actos homosexuales con gran preocupación, usted ha sugerido, cardenal Hollerich, que el fundamento sociológico-científico de la doctrina católica según el cual los actos homosexuales son inmorales «ya no es correcto» y ha pedido «una revisión fundamental de la enseñanza de la Iglesia» y «un cambio de doctrina»
“El cardenal Marx tomó la misma posición sobre este tema y justificó su posición al señalar que el Catecismo no está escrito en piedra y que uno también puede preguntarse qué dice sobre esta importante enseñanza moral. Sin embargo, el párrafo del Catecismo al que te refieres presenta esta enseñanza de una manera extraordinariamente firme. En otras palabras, señala que la enseñanza está claramente basada en la Sagrada Escritura y constantemente enseñada por la tradición de la Iglesia”. “Eminencias, por favor, sean fieles a su juramento sobre esta enseñanza, romperlo haría un gran daño a las personas a las que sinceramente quiero ayudar al reforzar el malentendido del orden divino de la sexualidad, los alienta a buscar la felicidad en relaciones que finalmente no pueden satisfacer, en lugar de buscar realización en las amistades castas”.
El Papa Francisco ha realizado nombramientos episcopales peculiares desde el inicio de su pontificado, empezando por el del lamentable amigo Zanchetta. En Italia hay muchas pequeñas diócesis que se van uniendo en la persona del obispo, pero hay otras de grandes dimensiones para las que se ha nombrado obispos sin ninguna experiencia y que de modo casi inmediato se enfrentan a problemas originados, en su mayoría, por su falta de capacidad de gobierno. Veremos como termina el caso de Turín, hoy son los curas de Génova los que dejan muy claro su malestar y no ha hecho más que empezar, pronto empezamos.
Ha pasado un año del viaje del Papa Francisco a Irak. Muchos sacerdotes han regresado y las iglesias están siendo restauradas, pero los cristianos no regresan. Los fundamentalistas del autoproclamado Califato Negro destruyeron y vandalizaron decenas de iglesias y monasterios caldeos, algunos ya no podrán volver a levantarse. En los primeros años de este siglo vivían en Irak un millón y medio de cristianos, en una población de 25 millones, se estima que hoy quedan unos 400.000, de una población que ha crecido a 40 millones.
«Entonces cogieron piedras para tirárselas, pero Jesús se escondió y salió del templo».
Buena lectura.
Con todo respeto y con referencia al ofrecimiento de ser «mediador», hay un requisito esencial ineludible para ser mediador y propuesto o aceptado por las partes en conflicto.
El mediador debe ser «confiable», debe generar confianza previa y conocida capacidad de «finalizar» lo que se le encomienda, poner fin al conflicto objeto de la mediación.
Es más que difícil que alguien que aconseja «hacer lío», que deja los temas sin resolver (dubias) y demás situaciones cotidianas conocidas, sea mediador.