Max Weber en el estudio que realiza del capitalismo y la ética protestante (Die protestantishe Ethik und der Geist des Kapitalismus) dice, refiriéndose al Calvinismo, que hay una forma religiosa que considera el éxito profesional como marca de elección divina y glorificación a Dios. Hoy en día, estamos hablando que esta obra se publico en 1904-05, la idea de predilección divina ha ido desapareciendo por el continuo proceso de secularización de la sociedad. Sin embargo, esta muy metido en la sociedad también en la vida eclesiástica, este modo de vivir resultadista y se aprecia en los diferentes extractos sociales. Se premia al que tiene éxito independientemente de los medios con los que haya conseguido. Por ejemplo se premia al que logra una buena cuenta de resultados aunque haya sido a costa de una financiación irregular. Se considera que uno ha triunfado aunque para ello haya tenido que sobornar a un político, etc. Es decir, lo que se premia son los resultados y no los esfuerzos. Da igual, por consiguiente, que una persona saque una buena nota porque ha estudiado mucho o porque ha copiado muy bien. Se castiga al que suspende y se premia al que aprueba, sin examinar los medios que se han puesto para poder conseguirlo. Una sociedad con ese modo de vivir se hace esclava de lo que es útil o eficaz dejando de lado todo aquello que puede arruinar un triunfo profesional. Es lo que tantas veces ha denunciado el Papa Francisco con la llamada política del descarte. La solución se encuentra en educar no en el éxito sino en el esfuerzo y que este tiene una recompensa independientemente del resultado que se obtenga. La solución pasa por formar en ser mejor y no en tener más.
Somos muy calvinistas
| 16 marzo, 2015
Muy interesante el artículo
Digno de ser reflexionado
Gracias
Muy calvinistas no, muy ladrones y sin ningún cargo de conciencia. La misma actitud de las que abortan sin mayor remordimiento. Cuando se insiste, una y otra vez, en la necesidad de la formación se da entender que la creencia es sólo una actualización de la psiqué. Es la fe que nace de abajo en búsqueda de lo Alto. La Fe cristiana no es así. La Fe cristiana es la respuesta de Dios ante la súplica sincera del Hombre.