No deseo entrar en la vida privada ni de partido de la senadora Rita Barberá fallecida en la mañana de hoy.
Me limito solamente a contar cómo una hija de un famoso periodista valenciano, estudió periodismo, y lo practicó a lo largo de su vida, sobre todo cuando alcanzó la alcaldía de la ciudad del Turia. Creó una concejalía de relación con los medios de comunicación, algo inexistente en aquel concejo municipal. Mantuvo con conocimiento de causa la información que emanaba del ayuntamiento, cuya jefa de prensa era ella misma, sabiendo entrar en los medios de comunicación con valentía dando titulares sabrosos a diario. No es extraño obtener mayorías absolutas en política, cuando se conoce el mundo de la información.
En el ocaso de su vida, han sido otros medios informativos, valencianos y madrileños, los que le han pegado un linchamiento indigno e inmoral.
Descanse en paz Rita Barberá, que vivió en los medios y ellos le han conducido a la muerte.
Y su propio partido que la abandonó, la hizo «dimitir» y la arrinconó en el grupo mixto. Ahora se escuchan muchas declaraciones hipócritas de su propio partido, aparte de la abominación de los podemitas.