Va a Misa y lo matan en el templo

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El comerciante de 35 años Fernando Padilla Toro fue asesinado a balazos el pasado martes 22 de noviembre en una iglesia en la ciudad colombiana de Cali, durante la Misa que presidía el Arzobispo de esa ciudad.

Situaciones así son habituales en tierras americanas. Algo impensable en España a pesar de los duros años que estamos padeciendo de persecuciones físicas, morales, activas y pasivas. Las personas que acuden a Misa es lo que menos esperan: morir a balazos dentro de un templo.

Sin embargo, la cruz y la muerte nos acechan en todos partes. El ciudadano colombiano ha entregado su vida a Dios. Descanse en paz y el Señor lo acoja con la bondad propia de Padre a un hijo.

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