Efe El Congreso ha dado este martes luz verde al proyecto de Ley de Jurisdicción Voluntaria que permite a los notarios y a los secretarios judiciales la tramitación de bodas y divorcios y eleva la edad mínima para casarse de 14 a 16 años. El texto abre las puertas a que los notarios puedan, previo pago de una cantidad, casar o divorciar, en este último caso la condición de que sean de mutuo acuerdo y sin que haya ni menores a cargo ni personas con discapacidad en el proceso. [En noviembre de 2013 el Foro Español de la Familia ya habló contra este uso de los notarios, porque banaliza y debilita aún más la maltrecha institución del matrimonio en España. Nota de ReL] Acaben el resto de la noticia, en Religión en Libertad, haciendo clic en el enlace: http://www.religionenlibertad.com/el-pp-impulsa-en-el-congreso-bodas-y-divorcios-aun-mas-42102.htm
Los notarios casarán y divorciarán a toda pastilla
| 28 abril, 2015
Señores, la doctrina católica es norma de conducta para aquellos que somos católicos y nos declaramos como parte de la Iglesia.
La ley civil ni debe ni en el fondo puede elevar a la categoría de norma legal, comportamientos que pertenecen al ámbito de la moral de una u otra religión,
Sería como si el hecho de que como los «Testículos de Jehova» no admiten las transfusiones de sangre, a mi en caso de accidente no me transfundieran porque esos señores lo consideran pecado.
Nos guste o no nos guste (que ya se que hay mucho nostálgico) España es un país no confesional y sus ley no puede privilegiar la postura de ninguna religión.
Es verdad que la vanalización de compromisos como el matrimonio, al que los católicos denominamos sacramento debido a lo importante que es para nosotros, es causa (en mi modesta opinión) de muchos de los males que aquejan al mundo occidental, pero eso no es justificación para que el ordenamiento jurídico tenga que someterse a nuestro particular criterio.
No pasa lo mismo con el aborto, donde se destruye la vida (derecho fundamental) de un ser indefenso y al igual que se pena el asesinato, debe ser penado el aborto; pero en cuestiones como el divorcio no podemos imponer nuestra forma de vida a quien no desea vivirla, por mucho que sepamos que la «razón» corre de nuestra parte.
Otra cosa es que nosotros eduquemos a nuestros hijos en lo importante que es tomar algunas decisiones de manera responsable y moral y que tratemos de vivir nuestro matrimonio de la manera más responsable y, fundamentalmente, llena de amor posible; pero eso es lo único que sepuede hacer: predicar y dar ejemplo.
Y quien tenga oídos que oiga.
Legalmente pueden hacerlo,don Tomás. El problema no está en ellos,reconozcámoslo,sino en que muchas parejas casadas por la Iglesia sólo lo hacen porque queda bonito.
Demos ejemplo de fe y de familia y Dios proveerá.
Un abrazo,pater.
Esta vez no estoy de acuerdo con el Foro de la Familia, tan benemérito siempre. Una vez que el matrimonio ha perdido –para quien así lo quiere– su carácter sacramental y ha quedado reducido a un contrato civil, resulta lógico que se firme donde se firman todos los contratos de esta naturaleza, y no ante jueces o alcaldes, que tienen otras cosas que hacer. Otro día hablamos de que no sólo se ha quedado en contrato civil, sino que es, además, el más débil del ordenamiento jurídico, porque es el único que se puede rescindir por voluntad de una sola de las partes y sin invocar causa alguna. Para los que seguimos teniendo al matrimonio como Sacramento… el oficiante es otro.