ReL
13 enero 2017
En la remota diócesis de Ketapang en la más aún remota isla de Kalimantán (conocida como Borneo) los católicos que viven en el interior de la jungla ven un sacerdote únicamente cada tres o cuatro meses y no habían podido ver al obispo en 20 años.
El nuevo prelado ha decidido lanzarse a la aventura para ver a sus fieles y para ello ha tenido que recorrer peligrosos caminos embarrados por la jungla y pasar horas en una canoa para llegar a zonas a las que sólo se puede acceder en temporada de lluvias. El reportero de AsiaNews Mathias Hariyadi decidió acompañarle en esta visita pastoral y esta es su experiencia:
Lean la crónica es muy interesante en el siguiente enlace:
http://www.religionenlibertad.com/sorteo-los-peligros-selva-siguio-canoa-asi-54273.htm
Un aplauso muy fuerte a ese pastor que se juega el tipo.