-Haría huelga si, la Conferencia Episcopal Española, al completo, hubiera escrito un documento con sus orientaciones pastorales sobre las reformas.
-Haría huelga si, un obispo suelto hubiera usado un lenguaje conectado con la actual Doctrina Social de la Iglesia.
-Haría huelga si, los documentos de la JOC y la HOAC no estuvieran llenos de ideas tan cerca de una ideología marchita y enterrada.
-Haría huelga si, los nostálgicos de primaveras eclesiales que nunca más volverán no aplaudieran la huelga.
-Haría huelga si, en España no hubiera cinco millones de parados.
-Haría huelga, si no viviéramos en el filo de una navaja por la crisis económica y social.
-Haría huelga si, viera que las sedes sindicales y de los partidos políticos abrieran comedores sociales para alimentar a tantos necesitados.
-Haría huelga si, conociera que desaparece la corrupción política, sindical y laboral del suelo de España.
-Haría huelga si, acaba cuanto antes la economía sumergida.
-Haría huelga si, cuando se estaba produciendo tanto paro laboral la hubieran convocado con la misma intención política que hoy.
-Haría huelga, si viera que va a servir para algo.
-Haría huelga si, hubiera una ley que regulara el derecho a la huelga.
-Haría huelga si, viera que los convocantes colaboran con Cáritas, ahora que han cobrado el dinero de los fines sociales del impuesto de la renta.
-Haría huelga, si, finalmente, en oración ante el Señor, me indicara que debía hacerla en su nombre, nunca siguiendo la voz de unos falsos defensores de los parados y los pobres creados durante un septenado de mandato de un partido determinado, que callaban como muertos y mentían como bellacos.
Tomás de la Torre Lendínez
