La velada navideña de Ibermúsica de este miércoles en el Auditorio Nacional, en la que William Christie dirigía a su orquesta Les Arts Florissants interpretar ‘El Mesías’ de Händel, volvió a alimentar el debate sobre los teléfonos móviles en los espectáculos culturales.
Al final de la primera parte del espectáculo, durante el aria ‘He was despised’ (en la que se canta: «Fue despreciado y rechazado por los hombres; un hombre de penas, familiarizado con el sufrimiento») a cargo del contratenor Carlo Vistoli, sonó un teléfono móvil desde una de las tribunas laterales, aquellas que se sitúan prácticamente encima del escenario donde está la orquesta. No era la primera vez que sucedía y Christie ordenó parar a sus músicos y volver a empezar una de las partes más recogidas e íntimas del Mesías. «Acaba usted de cargarse uno de los pasajes más bellos de una de las obras más hermosas jamás escrita», dijo mientras una persona abandonaba la sala tras su grito de «¡Fuera!».
http://www.elmundo.es/cultura/2016/12/22/585bccad268e3e39178b463a.html
Si hubiera entrado una feminista con los pechos al aire y con una pancarta, habrían tenido que tolerarla y aguantarse.