Tras pasar varios años en la espesura de la oscuridad de una empresa cercana al Estado, Carlos Dávila ha entrado, gracias al peperismo, al pluriempleo bien pagado en sitios adictos a los propios que lo han nombrado. En La 2 de TVE presenta trece programas en El ojo clínico, por el módico estipendio de 1,700 euracos por sesión, emitiéndose los domingos por la tarde. El domingo pasado debutó notándose su poco entrenamiento en esos menesteres que no son políticos. Político, sí ha sido su entrada en la 13 tv, como tertuliano de lujo en el programa que dirige su «viejo amigo», Antonio Jiménez. Político, sí ha sido su incursión en Cope donde irá como tertuliano, a defender al peperismo residual, patrón de su ingreso en la cadena de los obispos, siempre sumisa, lo mismo que la 13 tv a la decisión del partido gobernando en funciones, si nadie lo remedia hasta las próximas elecciones allá por el inicio del inmediato verano. Tomás de la Torre Lendínez
El renacido

| 16 febrero, 2016