En el derecho consuetudinario español existía un resquicio para librarse de caer en manos de la Santa Hermandad, los mosquetes, patrullas a sueldo, o sicarios bien pagados. El posible delincuente perseguido entraba en un templo abierto al culto, en cualquiera iglesia, y le amparaba la propia Iglesia Católica, hasta que se aclarase el entuerto. El próximo lunes visitará el plató de 13 tv, propiedad de la Conferencia Episcopal, el actual presidente del gobierno funciones. Seguramente, por agradecimiento de la señal televisiva regalada a los obispos, sea recibido en la puerta por algún obispo o aspirante a serlo, le pondrá bajo palio, tan tradicional en las escenas del No-Do, hará su entrada triunfal, mientras por la megafonía suena el himno español. Algunos simpatizantes habrán colocado una alfombra azul, color del partido. Y las damas echarán pétalos de flores sobre tan española secuencia histórica. Allí, en el interior del plató, se han confeccionado en bacías de barbero una jabonosa composición del más oloroso producto químico, que se usará para enjabonar el ambiente y las palabras que se dirán a lo largo del programa, para que el invitado se encuentre en un ambiente de amigos y chambelanes que le deben el cargo, o alguna gabela para sus negocios de los propios medios informativos. A lo largo del programa, el señor invitado recibirá rendición con la cabeza del conductor televisivo, quien la presta por sus propios nervios de vasallo sin ideas propias. Cuando todo el circo de loas y cantos, de bucólicas composiciones poéticas, acabe el protagonista firmará autógrafos a los presentes, haciéndose unos selfies con los más conocidos como sobones o pelotas de oficio y beneficio. La salida del edificio será tan triunfal como la llegada, porque le dirán que su presencia allí ha batido todos los records de audiencia, y de presencia en las redes sociales. El obispo presente, o el que aspira a serlo pronto, dirá para su interior: -Hemos salvado a un presidente en funciones y en apuros, porque la Iglesia siempre acoge a los pobres y desamparados. Tomás de la Torre Lendínez
El derecho a sagrado en 13 tv

| 18 febrero, 2016
Hable de la PAtriacia Betancur, don Tomás, que es el icono de Vitaldent y la estrellita nocturna de 13. Y para quitarse el muerto de encima (su marido, uno de los jefazos timadores del invento) ha dicho que es que se ha divorciado. ¡Genial!