La ruina económica parece que ha detenido un poco la serie de medidas que tenía en su cabeza el presidente del gobierno para presentar el anteproyecto de ley de libertad religiosa.
Las fuentes a las que he acudido me indican que es posible que cuando se calme el mal humor de los españoles a los que nos han reducido la paga mensual y las pensiones a los jubilados, se saque de la chistera un plan para arrinconar todo lo religioso de la vida civil española para imponer el laicismo puro y duro.
Quien no se para en barras es la ministra de defensa, que gobierna un ejército a base de decretos y nuevos reglamentos. La fiesta del Corpus en Toledo, Granada, Sevilla y otros sitios más donde la presencia de militares escoltando al Santísimo era secular ahora estarán los guardias municipales, y según un andaluz militar, lleno de risa por no llorar, me dice que el año que viene le harán escolta los vigilantes de seguridad de cualquier empresa del ramo.
En Libertad Digital lo encontramos en la siguiente dirección:
http://www.libertaddigital.com/sociedad/chacon-quita-los-honores-militares-al-cristo-de-la-legion-1276394165/
La Semana Santa de Málaga no tendrá tampoco a la Legión y su Cristo de Mena por decisión de la señora ministra.
Ante todo esto, yo pregunto lo siguiente:
¿Los socialistas se creen que van a durar toda la vida gobernando España?
¿Los del partido popular, si ganan alguna vez, quitarán de un plumazo todas estas decisiones salidas de un gobierno inepto?
Mi opinión personal es que el partido popular comenzaría sospesando si sería conveniente derogar la legislación absurda del gobierno zapaterino, vaya que la calle se llene de descontrolados y puedan cercar sus sedes y llenos de furor cometan cualquier barbaridad.
Desde aquí reto a los miembros del partido popular a que tengan la valentía suficiente para prometer a sus votantes, antes de las elecciones, que van a quitar toda la legislación socialista desde 2004 hasta hoy. Si lo hacen ganarán y los socialistas tardarán años en llegar al poder.
Me doy un cabezazo contra el teclado. Me despierto y leo lo que he escrito y lógicamente lo dejo sabiendo que es un sueño imposible que nunca será verdad. Porque soñar es bello y barato y más en tiempos de ruina económica.
Tomás de la Torre Lendínez