El alguacil alguacilado

Era un pueblo, donde el alguacil del juzgado siempre era el perfecto santo que metía a todos en la trena so pena de no sé que malos augurios. Siempre ganaba todas las batallas de la venganza entre las familias pueblerinas. Un buen día, un vecino le descubrió su juego: compraba a una red de soplones, a quienes les invitaba a delatar las acciones punibles que oyeran o vieran. El vecino conocedor de tales artimañas se fue a la capital y denunció al alguacil por malas artes en las acciones judiciales. Al poco tiempo el aguacil fue apresado, metido en prisión, y pasado por la sentencia de la justicia. Los copleros populares cantaban el caso del alguacil alguacilado. Vidal, el intocable, el alguacil de todas las causas punibles en la Iglesia española y universal, el látigo y el dedo acusador de todas las sombras que se mueven por el paisaje eclesial, desde obispos al último sacristán, ha perdido un bocado informativo de primera categoría: el caso de la secta del brujo que la Guardia Civil ha encerrado en prisión y el obispo de Tuy-Vigo ha disuelto con el Código de Derecho Canónico en la mano. Si hubiera sido Vidal el que llevara en su cueva de multirreligión la información sobre el caso del brujo Miguel, seguramente le hubiera reportado unos cuantos «millones» más de lectores, y alguna migaja que se hubiera perdido por las montañas y valles gallegos. No ha sido así. Cuando el caso ha estado en manos de este portal de Infovaticana, quien ha presentado documentos, ha contado con testimonios de personas afectadas y ha seguido la investigación de la Guardia Civil, ahora, solamente ahora, Vidal, salta como el alguacil alguacilado contra este portal, su director, el obispo de Tuy-Vigo, y no lo hace con el actual sucesor de Pedro porque son amigos, y «pobrecito» no le han dado la información a él en exclusiva. La basurienta crónica que escribe es propia y lleva el sello de la «casa de Vidal y Bastante». Usa su método de trabajo: «dicen….uno de ellos….parece…..ataca…..por ser miembros de tal…….el obispo…….no sabe derecho canónico….si yo hubiera cogido esta pieza informativa me inflo…..» Te han descubierto Vidal. Eres el alguacil alguacilado. No eres más. Tomás de la Torre Lendínez